Day 54 – admito
Patadas de Ahogado – LATIN MAFIA, Humbe
No me importa sentir profundamente todo lo que me pasa. Tengo la sensación de que si intentara evitarlo no hubiera descubierto ni la mitad de las cosas que me han hecho feliz en la vida y más importante aún, me han dejado conocerme mejor.
El odio desmedido, la admiración tonta, las ganas de depender de alguien, las ganas de ir por mi cuenta, divertirme sin poder parar de reír, dejar que la anticipación me cierre el estómago, la calma que me da cuando me doy cuenta de que me quieren, el asombro por cómo suceden las cosas, la incomodidad de no entender la manera de vivir del de enfrente, la alegría como si estuviera borracha sin tocar una gota de alcohol, el aburrimiento que me ha dado buenas ideas, la confusión de sentir nuevas emociones, el interés que me empuja sin dejarme pensar… esa curiosidad, la nostalgia que es como una droga de recuerdos, el triunfo al sentirme súper afortunada, la satisfacción que me da estar a gusto de ser quién soy, la tristeza que a veces me ahoga, y el romance que me deja con la miel en los labios.
Pensaba que quizá me había cansado de sentir tan intensamente. Y había ralentizado. Mucho, había echado el freno de mano en seco. Y estoy como quieta esperando, dudando si entrar en esa carretera de emociones… que me ha dado tanto y a la vez me he estrellado tan estrepitosamente.
Me parecía que quizá se me había acabado el fuselaje para seguir así. Pero la realidad es que no quiero. Quiero sentirme expuesta, quiero seguir teniendo una esperanza desmedida. Quiero seguir sin entender el pesimismo. Quiero ser una boba y pensar que aún puedo conseguir un par de sueños. Siempre alerta de conocer nuevos mejores amigos.
Dale abrázame otro rato
Apapáchame la vida entera
Es que es adictivo. No queremos dejar de querer por muy desesperado que parezca. Querernos, querer más de la vida, querer conseguir sueños. Lo necesitamos como una medicina. Nutrición del alma.
Sin saber si la armamos, seguimos nadando
Por ti sigo tratando, cavando
Regando las flores que de viejos nos veo fumando
Si me dejo querer eso es lo que pasa. Te quieres dejar querer. Nadie tiene un manual. Nadie sabe cómo es mejor querer. Y no me hace falta creer en el amor. Yo lo conozco. Lo he sentido muy cerca y muy fuerte, sin saber que había estado tan cerca de mí. Y eso es suficiente para darme toda la esperanza que necesito para volver a ir a todo gas y si hace falta estrellarme otra vez.
Tiene tiempo que yo trato
Llevaba tiempo buscando a quién cantarle
Sobre cuando me siento vulnerable
Anhelamos un abrazo más largo. Un abrazo que nos dé el tiempo suficiente de contar nuestras penas, contar cómo nos hemos chocado, todas las veces que nos hemos chocado.
Anhelamos una eternidad que nadie nos va a poder dar pero vivirlo cómo si lo fuera es más que suficiente.
Ser música de la que prefieres
Y que nunca me quieras pausar
