Guiones, ¿el punto débil de los videojuegos?

Álvaro Bohórquez
2016-juegos
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4 min readJan 31, 2017

2016 ha sido, además del peor año de la historia de los videojuegos, un año en el que la narrativa en este sector ha roto reglas y estándares que hacía tiempo que no veíamos. Oxenfree, Uncharted 4, Quantum Break, etc. Estamos ante una gran camada de juegos que han buscado cambiar la forma en la que se cuenta lo que sucede en un juego.

El año pasado nos llegaron títulos tan rompedores como Her Story o la última chaladura de Kojima: Metal Gear Solid V, que buscaban cambiar esa forma de contar historias que no dejaba de ser, prácticamente, la misma desde los 8 bits. Esa evolución tan notable no ha venido acompañada de unas mejores historias. Todavía vamos por partes. Primero mejoramos la forma en la que se cuentan y luego pasamos a mejorar lo que se debe de contar. Creo que es un buen planteamiento.

Llevo tiempo pensando que las historias en los videojuegos son algo flojas. Hay juegos que no necesitan más. Un monstruo secuestra a una princesa y el único héroe disponible para salvar un reino de champiñones antropomórficos es un fontanero italoamericano de bigote al que nadie le ha visto nunca con una llave inglesa arreglando un grifo. Mario no necesita nada más. En general, los plataformas, juegos de conducción, deportivos, etc. son géneros que no tienen que apoyarse en ninguna historia, aunque cuando lo hacen no están mal. Es el caso de TOCA Rice Driver 2 con su vieja canción del chaval que quiere llegar a ser el mejor en el mundo de las carreras. O las películas de Spike Lee del NBA 2K1X que, incluso, están guionizadas por el realizador estadounidense. También el último modo El Camino del FIFA 17 que nos pone en la piel de un jugador negro que quiere petarlo en la Premier. No es necesario, pero se agradece.

Recuerdo que cuando era chaval, a muchos nos fascinaban las épicas historias de los Final Fantasy VII y VIII, aunque al crecer y verlas con perspectiva son bastante insulsas, insípidas y pelín pesadas. Además, no dejan de ser lo mismo de siempre: tienes que salvar al mundo. Recientemente he jugado de nuevo al Final Fantasy IX y me ha vuelto a enamorar. Deja atrás las chorradas de sus inmediatos predecesores y vuelve a querer contar un cuento, con esos tintes medievales. De hecho, si el juego se redujese a los dos primeros CDs, estaríamos hablando de uno de los putos mejores títulos de la Historia de los videojuegos. En el tramo final, como en casi todos los Final Fantasy, se les va la perola.

Precisamente, parte de los guiones también implica el ritmo del juego. Todo el conjunto. Es normal ver juegos que se van pinchando hacia el final (el reciente FFXV y su famoso capítulo 13, por ejemplo) o que te obligan a repetir mundos o mecánicas ya pasadas cerca del final (¿Metal Gear Solid V?). Incluso la original idea de alargar los juegos artificialmente para que el cómputo total de horas de algo aceptable y no se te eche encima la crítica (cosa que hará por eso, precisamente).

¿Cuál es vuestro mando favorito?

Volviendo a las historias de los videojocs, hay poca variedad al fin y al cabo. Rescatar princesas o salvar mundos (planetas, galaxias, ciudades, lo que fuese). Hay pocos juegos que tengan una temática más mundana y, casi todos, son independientes que tienen menos que perder que los todopoderosos triples A. Hasta los Persona, que buscan esa cotidianidad de tener que ir a la escuela y superar exámenes, acaban con un trasfondo mucho más épico y fantasioso que termina por buscar la salvación del mundo (o parte de él). Todo ello protagonizado por adolescentes con sus problemas y tribulaciones típicos.

De nuevo hay que refugiarse entre los indies para conseguir algo distinto a lo habitual. Tal vez porque la edad de los jugadores está aumentando y éstos desean historias más adultas y diferentes, hay que reconocer que el número de títulos que tratan temas más mundanos y menos épicos. Historias de andar por casa que, de vez en cuando, apetecen.

Por eso hago esa pregunta al inicio, ¿es el punto débil de este mundillo? ¿Los desarrolladores no saben meterle ritmo o historias que enganchen a sus videojuegos? Es buen momento para opinar.

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Álvaro Bohórquez
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Blogger adicto. Escucho podcasts. Exinfluencer. Acabé Periodismo, pero no he pagado el título. Hago cosas relacionadas con la mercadotecnia en un polígono.