VIDEO: Cómo generar una agenda minimalista para concentrarse en lo grande
«La perfección no se logra cuando no hay nada más para agregar, sino cuando no hay nada más para eliminar». — Antoine de Saint- Exupéry
El objetivo es identificar todo aquello que no produce grandes resultados y eliminarlo. Buscamos lograr una agenda minimalista. Con pocas cosas para hacer pero que nos producen gran retorno.
«Uno no acumula sino que elimina. No se trata del aumento diario sino de la disminución diaria. Crecer nos mueve hacia la simplicidad». — Bruce Lee
Continuamente veo profesionales o empresarios que pierden valiosas horas de su día discutiendo cosas que no van a generar ningún cambio.
El mundo de hoy busca maximizar la eficiencia. Pero una cosa es ser eficiente y otra cosa es ser efectivos. De nada sirve ser muy eficientes haciendo cosas que no tienen importancia y no necesitan ser realizadas en absoluto. Que una tarea haya requerido mucho trabajo duro no la hace importante de por sí. Hay muchas formas de perder el tiempo trabajando duro en cosas que no necesitan ser realizadas desde un principio.
La ley de Pareto: 80/20
El 80% de los resultados son generados por el 20% de lo que hacemos.
Por ejemplo:
El 80% de nuestras ganancias van a ser producidas por el 20% de nuestros clientes.
El 80% de nuestros clientes van a ser generados por el 20% de nuestras herramientas de marketing.
¿Será que podemos eliminar el 80% que solo genera el 20% de los resultados menores? Eso puede significar pasar de trabajar ocho horas al día a dos teniendo casi los mismos resultados. O también trabajar ocho horas al día teniendo cinco veces más resultados.
Haz un análisis 80/20 de tu negocio o empleo. Identifica el 20% que importa. Identifica al 20% de los clientes que generan ganancias, elimina al resto y céntrate en conseguir más clientes de los buenos.
La ley de Parkinson
Las tareas que tenemos para hacer, tienen la capacidad de expandirse o contraerse para ajustarse al tiempo disponible que tenemos.
Si tenemos ocho horas para realizar un trabajo que normalmente duraría dos, éste se expandirá hasta consumir las ocho horas que teníamos.
También funciona a la inversa.
Si tenemos una tarea que normalmente duraría ocho horas y por alguna razón solo tenemos dos, el tiempo se contraerá y lo podremos realizar en dos horas.
Piensa por ejemplo la semana antes de salir de vacaciones, en unos pocos días terminas lo que no has hecho en meses para poder dejar todo listo para irte.
Establece compromisos que te obliguen a terminar tu día laboral.
Por ejemplo, a las 5 pm agenda ir a tomar el té con un amigo. Tu obligación es terminar todo lo que tienes para hacer antes de las cinco. Empieza por lo más importante y no te preocupes si alguna cosa no importante no ha quedado hecha. Simplemente déjalo para mañana o directamente no lo hagas.
