La fulgurante carrera deportiva de Riqui Puig quedó estancada en su llegada al primer equipo del Barça, donde no ha cuajado al nivel de las expectativas generadas con ningún inquilino del banquillo azulgrana, ya fuera con Ernesto Valverde, Quique Setién, Ronald Koeman , fugazmente con Sergi Barjuan y finalmente con Xavi Hernández.
En cuatro temporadas el canterano ha disputado 57 partidos oficiales, participando de 1981 minutos sobre el terreno de juego, anotando dos goles y rayando muy por debajo de lo esperado, atendiendo a su esperanzadora trayectoria en las categorías inferiores.
El de Matadapera, camino de Los Angeles para desempeñarse en la MLS, deja atrás un periplo de sinsabores deportivos que muchos atribuyen en gran parte a una vida poca aseada fuera de los terrenos de juego.
No sólo sus salidas nocturnas han dado de qué hablar, si no también su actitud algo despreocupada y fuera de foco a veces, como cuando con un amigo transitaban por la Avenida Diagonal de Barcelona en patinete eléctrico sin casco y a punto estuvieron de atropellar a algún incrédulo transeúnte.
Riqui no se ha escondido en la noche barcelonesa y ha sido una persona muy accesible en momentos puntuales generando anécdotas que no han dejado indiferente a nadie.
En esta ocasión y toda vez consumada su transferencia a Los Angeles y al tratarse de unos audios recopilados en febrero les hacemos llegar unos comentarios que el ex jugador del Jábac y Terrassa destiló a unos compañeros de autoescuela durante unas clases para recuperar los puntos del carnet de conducir.
En estos desclasificados e inocentes audios, Riqui, primero hace referencia a la rueda de prensa de despedida de Messi tras 14 años en el club y sus lágrimas, mostrándose comprensivo con el astro argentino.
Posteriormente y tras ser inquirido sobre el traspaso de Ferran Torres del Manchester City, Riqui manifesta sorprendentemente ,ante desconocidos:
“Si Guardiola ni lo quería, el año pasado jugó 12 partidos.”
Para finalizar y tras ser preguntado sobre las posibilidades del Barça en La Liga, habla sobre su futuro y unas supuestas ofertas de Chelsea y Milan, ofreciendo una tajante declaración:
“Yo estoy muy bien, aquí en Barcelona”… “A ver, te pagan el doble y luego estás ahí solo…en …claro”
Para concluir, le consultan sobre si vive todavía con sus padres y Riqui contesta:
“Ahora no, antes si vivía con mis padres”, concluye.
Una frases versadas en un contexto apacible que no cambian absolutamente nada pero que Puig debería haber tratado de evitar proferir.
Tanta paz lleve como descanso deja y ojalá para el mundo del fútbol y para su desarrollo personal pueda resarcirse y ser definitivamente un jugador admirado y que recupere el status que muchos le atribuían
“Bona sort, Riqui, bon viatge”.
