Crítica | Teatro

El cultivo de un despecho añejo

Sobre ‘Acreedores’

Paratexto Mag
2 min readMay 26, 2018

Acreedores, de August Strindberg en versión de Francisco Civit y Roberto Monzo. Dirección de Francisco Civit. Con Roberto Monzo, Verónica Pelaccini y Alfredo Staffolani. Vestuario y escenografía de Cecilia Zuvialde. En El Extranjero. Tickets $ 250 / $ 300. Funciones: los viernes a las 21 hs. Mayo 2018.

Acreedores tiene la forma, paradójica por momentos, de un dispositivo de dos puntas unidas por la bisagra de una mujer. Con un hombre de cada lado, los tres actos del este clásico dieciochesco son también un intercambio generacional: siempre en pares, inundándolo todo de texto hasta secarse la garganta, los protagonistas representan el epítome del burgués ilustrado pero infeliz, enfermo de cultura, enajenado de sí mismo.

Saltando entre los tópicos de la iniciación, la educación artística y sentimental y las sensibilidad espiritual, Acreedores enfrenta un mundo de sospechosa archi-artificialidad con el instinto, los celos y la envidia del animal que, al fin, somos. Y de aquí es de donde realmente brota el drama. Si los tres protagonistas de la obra se han dado a la tarea de ascender por las formas mas refinadas de la cultura, ha sido solo para que su descenso (nervioso, explosivo) sea más agudo, más fuerte y más rápido.

Con una mujer que es la escultura modelo de la libertad avant l’heure (decidida, política, prima de Nora, amiga de Julia. NdE: fantánticos todos estos síntomas del machismo que brotan en expresiones de mujeres heroínas hinchadas de fiebre por ser en la literatura europea del siglo antepasado), Tekla, que articula el (des)encuentro de sus varones (actual y pasado) y deja en evidencia que son las víctimas del cultivo y el fermento de la vergüenza y la venganza, de un sentido de traición y de despecho.

Para enmarcar tanta pasión interior, contradicción y crisis, la puesta ha optado por minimizarce a un piano, un par de sillas y un conjunto de referencias a un más allá marino que se señala en deícticos. Muy bien llevada, atrapante y entretenida, esta Acreedores pide lo que le corresponde y extiende el recibo por lo amplios aplausos recibidos en justicia.

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