A mi tampoco me gustan Las Planchitas (pero las defiendo)

Ale Huerta
3 min readSep 17, 2016

--

Un amigo está sumamente enojado porque considera que el negocio de tacos de barbacoa estilo Jalisco (Las Planchitas), que ha invadido la ciudad de Aguascalientes, es malo.

La verdad es que a mi tampoco me gusta, pero por otras razones, en realidad no como muchas cosas: menudo, birria, barbacoa, entre otros platillos.

A pesar de eso entiendo el éxito de los tacos antes mencionados, y es que desde hace tiempo se han estado expandiendo; actualmente cuentan por lo menos con cuatro sucursales en la ciudad.

Primero que nada hay que decir que ofrecen rapidez en el servicio, además de orden lo cual es muy importante (explicaré eso más adelante): llegas a la caja, pagas tus tacos o quesadillas, tu bebida y pasas a que te lo entreguen; los preparas en una especie de barra de salsas y condimentos, te sientas, comes y depositas los platos o basura en el bote correspondiente.

Las Planchitas no es un restaurante en donde te van a atender meseros, es más bien tipo autoservicio, yo lo comparaba con los bufetes.

Esto hace haya un flujo de gente constante, porque no tienes que esperar a que alguien llegue a atenderte si quieres mas cebolla para tus tacos u otro refresco.

En Aguascalientes es el tipo de comida perfecta para la resaca (la cruda pues), debido precisamente a lo rápido del servicio y a la variedad de salsas que ofrecen.

A mi amigo le molesta esto, dice que prefiere los tacos del carrito de la calle, pero ahí tengo otro punto: está bien cuando eres soltero y vas con los amigos, pero si tienes hijos -por lo menos uno- es imposible comer en los tacos de la esquina.

¿Por qué? Porque el niño, o niña se van a cansar de estar parados, usualmente hay dos o tres sillas pero siempre están ocupadas, entonces vas a tener que cargar al pequeño y darle de comer, ni hablar de darle de tomar el refresco -porque es la única bebida que ofrecen los taqueros- de botella de vidrio; en realidad se convierte en una odisea.

Ahí entran Las Planchitas, una taquería con espacio suficiente para sentarse y variedad de bebidas, este lugar solo trabaja en el día por lo que ofrecen de beber algo más que coca light: jugo de naranja, agua fresca y en un principio los llamados «esquimos» o «chocos» como les decimos en Aguascalientes, que no son mas que una especie de licuados de fresa, chocolate o vainilla con espuma.

En general me parece un buen negocio, muchas veces he ido con mi familia por tacos y quesadillas antes de salir de viaje, precisamente por la rapidez.

En este caso la barra de condimentos no me parece que es lo que hace la diferencia -incluso hay en Mc Donalds-, aunque para los remilgosos como yo, es un acierto porque así puedo decidir si quiero mi quesadilla con una, dos o tres salsas. O si quiero cebolla guisada o no.

Es cierto que vivimos en la era de la personalización, todo lo queremos a nuestro gusto, pero eso no tiene que ser siempre malo.

La verdad hay tacos más buenos, que Las Planchitas, eso sí, no lo puedo negar.

Ah si, iba a explicar lo del orden, en unos tacos nocturnos como los de San Cayetano -se ponen a un costado de Plaza San Marcos-, uno llega con el taqueros y pide su orden, lo malo de esto es cuando hay mucha gente, porque luego a personas pequeñas -como yo- no nos hacen caso (inserte aquí carita triste) y llegan los demás a meterse, ergo, nos quedamos con hambre hasta que el taquero nos escucha.

Bonus: Amo los bufetes, eso podría ser otra explicación de por qué no me molesta el autoservicio en lugares como Las Planchitas, a parte de que no tienes que estar batallando con que los meseros se dignen a atenderte (o te atiendan de más al grado de llevarse tu plato aun con comida), te ahorras la propina :).

--

--