Los 20 álbumes del 2013

Alex Ingberg
18 min readOct 27, 2014

Me dieron ganas de armar un pequeño espacio en la web donde pueda comentar y opinar sobre la música que me gusta. También, cada tanto sucumbir a esa tentación (la cual Nick Hornby, de forma muy entretenida, trata en su novela High Fidelity) que es armar listas.
Para comenzar, dejo esto que deriva de una pequeño post mío en Facebook de principios de este año.

2013 fue un GRAN año para la música. Armé mi lista de los “mejores” 20 discos del año y me costó un huevo. (“Mejores” va entre comillas… básicamente ensayé objetividad en una tormenta inalterable de subjetividad y me quedé con esto). Grandes discos quedaron afuera. Trate que más o menos se respete la variedad de género y que no vaya con ninguna jerarquía en particular. Acá van mis menciones.

Sin más preámbulo, podemos comenzar:

Justin Timberlake — The 20/20 Experience

Este disco cuenta la historia de un señor que había dejado la música hace como 6 o 7 años. Un día, se dio cuenta que no le iba a garpar más la carrera de intento de actor y le pinto volver a hacer un disco. La excepción fue que en esta ocasión aclaró: “voy a grabar lo que se me canta y tengo ganas de hacer temas de 8 minutos… que las radios se arreglen.” Así nació este álbum. Cabe destacar que en realidad es un álbum doble, pero la verdad que la segunda parte no me pareció tan buena, así que no la incluí.
Remontandonos al disco propiamente dicho, podemos decir que está cargadísimo de beats pegadizos y mucho R&B. Algunos momentos son hipnóticos y bastante empalagosos (Don’t Hold The Wall, Strawberry Bubblegum, Let The Groove Get In) y otros más poperos y grooveros standard (Mirrors, Suit & Tie, Pusher Love Girl). Atención al solazo de guitarra en Spaceship Coupé! Perfecta prueba de el pop yankee también está bien… y cuan bien!

https://www.youtube.com/watch?v=IsUsVbTj2AY

Queens Of The Stone Age — Like Clockwork…

A este tipo de rock le suelen decir “stoner”. Yo la verdad no sabría encasillar a Queens of The Stone Age. Pienso en rock yankee bordering lo mexicano, una suerte de banda de sonido de Breaking Bad mezclado con GTA San Andreas; lo que podrías escuchar yendo a máxima velocidad en un cadillac por el sudoeste estadounidense. Y además de eso, este disco es re vampiresco. Tiene esos momentos ruteros y otros que dan miedo. The Vampyre of Time and Memory es uno de los puntos altos. Como balada es más que original., Kalopsia, I Appear Missing son momentos del disco que rozan lo lisérgico y no se olvidan de agregar canciones para los que añoran a los clásicos: I Sat By The Ocean. Como frutilla del postre, en la mitad de las canciones toca la batería Dave Grohl.
Dato de color: el disco tiene ALTOS invitados que a hacer backing vocals. Esta lista incluye (pero no se limita) a Alex Turner, Trent Reznor, ELTON JOHN, Mark Lanegan y su ex bajista Nick Olivieri.

https://www.youtube.com/watch?v=iFca32_7YUU

¿Qué pasó con Marta Ramos? — ¿Qué pasó con Marta Ramos?

Nuevos. Y eso lo hace más delicioso todavía. En este disco convive la joda con el disfrute, las melodías pegadizas y las armonías vocales (que buena dupla, ¿no?), saxos y violines, el Dr. Emmett Brown y la Pachamama. Como una gran paleta de colores se va formando hit tras hit. Es un viaje de ida, no hay duda… y en vivo son más carismáticos aún! Nacho, Jere, Nico y Dan te van a hacer bailar con alguna de las cumbias (La sequía, Fui a bailar) o te van a hacer flashear con El opio o Cenipodis. ¿Mi tema preferido del disco? Definitivamente Bonita. Acuerdensé este nombre, Marta Ramos se va para arriba.

https://www.youtube.com/watch?v=3gjZgkpKzxk

Bajofondo — Presente

Ahora, para empezar a hablar de este disco hay que primero aclarar: la banda se llama Bajofondo a secas. Nada de “Tango Club”. Eso quedó atrás y tiene que ver con el hecho de que ya se sacaron de encima el estigma del “tango electrónico”. Aprendieron a ser una banda de rock y dejar atrás ese concepto tan trillado [sic] de “colectivo musical”. Este disco no es más que la misma prueba. A través de texturas super ríoplatenses y orgánicas se va formando un disco de 21 temas y casi 80 minutos. Y es un disco de Rock, nenennnn. Liderados por una dupla más eficiente que Batman y Robin (Juan Campodónico y, nada menos que, Gustavo Santaolalla) esta banda tiene momentos interesantísimos en esta obra de arte. Epicismo en temas como La trufa y el sifón (posta, este tema roza lo “Muse”), rock latinoamericano tacubense en Pena en mi corazón, exquisitez de adult contemporary en Lluvia y Cuesta arriba, boliche puro en Pide piso y Olvidate (que incluye un gran break tribunero con bombo de cancha e hinchada incluida) y todo sin olvidar esos excelentes instrumentales bien tangueros por los que se caracterizan: Código de barra, A repechaje y Milongón. Muchachos, ¡lo hicieron otra vez!

https://www.youtube.com/watch?v=GnekEPW4Okg

Moby — Innocents

¡Moby volvió! ¡Y en forma de fichas! Y sí, fuera de la referencia simpsoniana, cuesta decirlo, pero después de Play en el ‘98 empezó a decaer monótonamente. Incluso, podemos decir que sus últimos dos discos (Wait for me y Destroyed) son bastante malos. Pero la redención existe… y ¡oh, que bella forma tomó!. Este álbum está plagado de minimalismo y downtempo. Así como en Play había momentos que te querías poner a bailar ahí mismo o salir a correr, acá te dan automáticamente ganas de relajarte y tomarte un chai en la terraza. Lo que si se nota más es la profundidad de las composiciones. El disco entero está cargado de una emoción y una melancolía que en Play no existía (The perfect life, Almost Home, Saints, The dogs), y eso es un golazo. Dato de color: acá también aparece Mark Lanegan. ¿Mi momento preferido del disco? La introducción apagada de Everything that rises, porque desde ese acorde menor y ese punteo de guitarra hecho torta por algún plugin de delay oscuro, ya te promete que el vas a estar cautivado de principio hasta la última nota.

https://www.youtube.com/watch?v=t3ZDqe5j4q8

Arctic Monkeys — AM

Fue largo el camino que recorrió Arctic Monkeys en los últimos 7 años desde que salió “Whatever People Think What I Am, That’s What I’m Not”. Claramente no por la extensión de tiempo, sino musicalmente. En esta última entrega los vemos sumergidos en un mundo más oscuro y más cerca del R&B. Con conciencia a la hora de componer temas pegadizos y no tan “pum pam kaploom splash” y energéticos como los primeros temas que invitaban automáticamente al pogo de a uno. Estos temas nuevos tienen riff de guitarras premeditados, que nos obligan a corearlos (Do I Wanna Know?, R U Mine?, Why’d You Only Call Me When You’re High? y Knee Socks) y unos backing vocals que por momentos nos dan la idea de que se trajieron un coro de minitas para el estudio. GARPA. Otro punto alto, la clara referencia a War Pigs de Black Sabbath en Arabella. (¿Rip off? ¿Flash mío?).

https://www.youtube.com/watch?v=6366dxFf-Os

Atoms For Peace — Amok

Este pequeño amiguín me costó. Y tiene historia de hacerse desear. Ya en el 2009 Thom Yorke había formado una backing band para presentar The Eraser (un must). Se le ocurrió traer nada más y nada menos que a Flea (Red Hot Chili Peppers), Mauro Refosco(Red Hot Chili Peppers y Forro In The Dark), al batero de REM y al mítico y legendario Nigel Godrich. MUCHO hype. Los videos de fans en youtube no se hicieron esperar. Por cosas como esta mucha gente (me incluyo) espero 4 años este CD. La recompensa fue algo totalmente distinto. Matices electrónicos, melodías sutiles y unas basslines para volar. La primera escucha puede ser no muy interesante, pero a partir de la 2a o 3a…. ¡uf! ¡Boy, you’re on for a trip!. Temas como Judge, Jury And Executioner (outtake de Hail To The Thief de Radiohead) te hacen poner a bailar epilépticamente. ¡La guitarra de ese tema es magnífica! Otros temas son más facemelting synth cual Aphex Twin, al estilo de Ingenue. De principio a fin, una joya.

https://www.youtube.com/watch?v=DpVfF4U75B8

Arcade Fire — Reflektor

La coronación de una banda ya coronada desde su debut. 80 minutos de un disco doble que demuestra que está mal dormirse sobre las rosas y que siempre hay más espacio para construir cosas nuevas. En esta soberbia oportunidad, Arcade Fire nos sorprende con ritmos caribeños y latinos desde una perspectiva bastante sombría. Ya el opener, Reflektor, nos escopetea con unas congas que se adecuan fantástico a los sintes y transforman tu cuarto en una discoteca del estilo de esto. Este disco también los muestra rindiéndose hacia los temas épicos, onda Queen o Muse. Miren Joan of Arc o Supersymmetry. Los tambores metálicos son una gran adición, siempre. Es como la fórmula del éxito.

https://www.youtube.com/watch?v=EcKinnMXuKg

Bombino — Nomad

La historia de este pibe es increíble. Nació en un campamento Tuareg en la periferia de Niger y aprendió a tocar la guitarra como autodidacta. Cuando exploto la rebelión, dos de sus compañeros de banda fueron ejecutados y el voló al exilio en Burkina Faso (sí, posta). Ahí, graba su primer disco y este llega hasta los oídos de Dan Auerbach de The Black Keys. El resto es historia y se puede escuchar en este, su segundo disco.
No se mucho de música tuareg, pero puedo destacar en esta obra mágica unas guitarras espaciales y etéreas (Aman, Amidinine y Azamane Tiliade). Si estan buscando teletransportación al medio del Sahara, en una carpa extraña con fogatas y camellos, este es el disco.

https://www.youtube.com/watch?v=Ss9Znucx4GM

CHVRCHES — The Bones of What You Believe

Synth pop para divertirse. El álbum arranca con The Mother We Share y ya queremos ponernos unas polainas, una remera con letras en japonés, teñirnos el pelo de rosa y hacer cosas de freakie. Las melodías de los estribillos son super catchy y el disco tiene banda de otros hitazos (Recover, Gun, Lies) We Sink y Science/Visions te la suben con unos beats que tranquilamente podrían ser el soundtrack de algún juego de play de fútbol. Otra gran cosa para destacar es la interpretación vocal de Lauren Mayberry, las cuales por momentos se fusionan delicadamente con texturas de vocoder. Básicamente eso. Podemos resumir el disco en: melodías pegadizas, voces claras y lindas, sintetizadores.

https://www.youtube.com/watch?v=_mTRvJ9fugM

Asaf Avidan — Different Pulses

Con un sonido más despojado del garage rock que caracterizaba a los Mojos, su anterior proyecto, Avidan se lanza como solista bajo guitarras acústicas, beats sampleados, aplausos y unos coros cuasi-gospel que están infartantes. A eso le sumas la voz rasposa (confundible con Janis Joplin) de Asaf y tenés un golazo de mitad de cancha. Cada tanto aflora un riff con tremolo de una viola eléctrica y suceden cosas como ese hit que es Love It Or Leave It que bien podrías ubicar en un billboard del 67. En este torbellino de folk/rock queda un poco de lugar para la experimentación rítmica, al estilo de los últimos discos de Radiohead; hence, Cyclamen. Cuando el disco va asomándose épicamente a su culminación, aparece esta suerte de blues lento y poderoso que es The Disciple: ¿proclama antibélica? ¿acaso una fuerte crítica contra el Estado Israelí?. De todos modos la letra es fuerte, y el outro de vibrafón y guitarra recuerda a “Through The Gale”, el último disco que sacó con los Mojos. Entonces estamos preparados, para seguir por el camino de la nostalgia y concluir esta obra maestra: Is This It? es la balada folk versión sXXI que te desgarra el corazón.

https://www.youtube.com/watch?v=wHyplEnrgQQ

Billie Joe Armstrong & Norah Jones — Foreverly

“¡¿Mmmmmmmmmm el flaquito de Green Day cantando country?!” Así arranca la experiencia de todos los que tomamos este disco por primera vez. Al tercer tema se vuelve un “che, dejate de joder… que deje eso del punk pop y se dedique a esto”. Bueno, por ahí no tanto. Pero realmente es algo que vale la pena escuchar.
No es un capricho de rockstar, claramente sabe lo que hace al empuñar la guitarra acústica y la armónica. La forma de armonizar la voz propia con la de Norah Jones da cuenta del lenguaje musical nativo del country y no de un “import” del rock/pop. Se encuentran, juegan y se vuelven a alejar, solo para dar un par de vueltas y volver a cantar juntos. Flawless victory. Lo mejor de todo es que para colmo, los temas no son de él sino de los legendarios Everly Brothers. Así es. Esto no es nada menos que un gran cover de un album entero.
En el ya mítico standard Long Time Gone, se puede notar, en el solo de guitarra y esa deliciosa reverb, que Armstrong no es un extraño al tema. Nunca la voz de Jones estuvo tan bien puesta en un segundo plano como en Down In The Willow Garden. Siendo una balada downtempo llevada por una guitarra arpegiada, deja un espacio para una linda dupla vocal.

https://www.youtube.com/watch?v=RPgZ0mWMByA

John Medeski — A Different Time

Una de las grandes sorpresas. Es extraño para un músico que viene de tantos teclados electrónicos y sintes, y de una banda tan groovera como es Medeski Martin & Wood, que se anime a un solopiano en un piano acústico de la década del 20. El resultado es sorprendente. Un disco al que le falta esa explosión y ese filo que lo caracterizaba. ¡Pero no desespereis! Ese inesperado cambio nos lleva a deliciosa tranquilidad, con alguna ocasional disonancia. Luz marina es un momento de nostalgia y descanso, por momentos beethoveniana, por momentos digna de Bill Evans. Ran y Lacrima tienen un poco de esas tensiones disminuidas que buscamos en un disco de un pianista de jazz contemporáneo, pero también tiene esas séptimas y sextas que acarician el alma que esperamos de Debussy o Satie.
Por momentos pianista clásico, por momentos no tiene drama en levantar la tapa de piano y pegarle directo a las cuerdas. Así es John Medeski y así de genial suena este disco.

https://www.youtube.com/watch?v=IM0mpgPfPBM

El Kuelgue — Ruli

Esta nueva etapa muestra a El Kuelgue un poco más maduro, tanto musical como líricamente. Bah, igual esto último no era muy dificil de lograr… del disco anterior todavía tengo tatuadas en el tímpano frases como “masturbándote con el gobernador” o “3, 2, 1, ese culo tiene granos, anduviste con enanos a mi no me engañás”. En fin, les dura por lo menos hasta la primera mitad del disco…
Como decía, el disco muestra a la banda en canciones igual o más pegadizas que las que ya conocíamos (En avenidas, Sin parangón y Circunvalación), pero mostrando una cuota importante de crecimiento. Hay algunos detalles de experimentación sonora interesantes como FFWD y algunos ritmos latinoamericanos nuevos como en la carioca Si te vas y la murga uruguaya La 13.
Más hacia el fondo del álbum tenemos al Kuelgue que tan bien conocemos: polémicos, políticamente incorrectos e inmaduramente graciosos: Cristo es Marcos Di Palma, La vieja afuera y Clonasepam.
“Pop para divertirse”.

https://www.youtube.com/watch?v=IHRvx2GF90I

Orquesta Brazofuerte — Swingin’ Party

Soundtrack de las fiestas swing de Niceto Club, estos muchachos saben hacer las cosas bien. Hot jazz y un poco del swing tan característico de los años 20 en New Orleans nunca viene mal. Y todo esto sin necesidad de tener que remontarnos a una grabación de horrenda calidad de hace casi un siglo.
Dixieland del tracional, donde se presentan los temas y melodías y después se turna cada solista para improvisar (o a veces se mandan todos al mismo tiempo). ¿Qué podés esperar en este disco si no sos oriundo del género? Algunos instrumentos a los que no vas a estar acostumbrado: banjo, trompeta, trombón, clarinete y una tabla de lavar. Y todos suenan genial acompañados por el contrabajo y el piano. Darle play a esto garantiza que tu cuerpo se ponga a bailar automáticamente. El disco está compuesto por standards del género como That’s A Plenty o Sweet Lorraine. Cortito y al pie, para escuchar de corrido de principio a fin.

https://www.youtube.com/watch?v=TBNnUvr0J1k

Sound City Players — Sound City: Real to Reel

Salvo algunas excepciones (GROSAS excepciones), este disco se puede ver como esas cosas gay-friendly que suele hacer Jack Johnson. Un “Foo Fighters & Friends”. Actuando como soundtrack para ese documental excelente, “Sound City” que sacó Dave Grohl durante el 2012, el album ofrence una amalgama de sonidos, matices y texturas más que heterogénea. Hay rock pesado, hay flashes y hay baladas acústicas. El denominador común a todas: Dave Grohl, ya sea tocando la batería, cantado o tocando la viola. La idea resumida fue esta: el mítico estudio Sound City cierra inevitablemente por no haberse pasado nunca a digital, Dave Grohl compra la consola y la instala en su casa, invita a casi todos los grosos que grabaron ahí a componer y a grabar un disco en su casa. Y a Paul McCartney también. ¿Por qué? ‘CAUSE HE’S DAVE FUCKIN’ GROHL AND HE’S ABLE TO.
Casi todo es highlight, pero lo que yo más disfrute fue You Can’t Fix This con la rasposa voz de Stevie Nicks, The Man That Never Was, que tranquilamente podría ser un tema nuevo de los Foos y la canta Rick Springfield, y From Can To Can’t un blues lento super early-zeppelin y oscuro encabezado por Corey Taylor. Para los que no estén familiarizados con él, es el que se la pasa gritando atrás de una máscara en Slipknot y tiene una voz del RE CARAJO cuando no gruñe.
El verdadero spotlight del disco lo tiene Cut Me Some Slack. Dave Grohl tuvo varios méritos acá: reunir a Nirvana por única vez en la historia, con nada menos que Sir Paul McCartney a la delantera tocando una guitarra tenor Cigarbox, resucitar a Krist Novoselic que andaba probablemente en cualquiera y componer un temazo nuevo para Kurt que lo mira por TV.
Para cerrar: Mantra. Si bien me gusta más la versión instrumental del documental que la que tiene letra y está en el disco, este tema es un jam genial por donde se la mire. Grohl en batería, Trent Reznor en guitarra y teclado y Josh Homme en (¡!) bajo. Texturas minimalistas y linealmente crecientes. Hermoso.

https://www.youtube.com/watch?v=L2kGNdE0b5Q

Pearl Jam — Lightning Bolt

Desde que a mediados de los 90 se despegaron del grunge, Pearl Jam siempre fue una banda que se apego mucho a un guitar-driven hard rock clásico, por momentos muy AC/DC y por momentos muy Ramones. En este disco creo que aprendieron a incorporar sonidos nuevos, de las bandas que pasan alrededor de ellos. Podría verse como el disco de Pearl Jam para el sXXI.
Por momentos hay grandilocuencia rockera a lo classic : Getaway, Mind Your Manners, Let The Records Play. Por otro momentos muestran fases más maduras y tiradas al indie rock de moda (pero sin perder autenticidad y profundidad) como en Pendulum e Infallible. También hay grandes temas diseñados en fábrica directo para el rock de estadio. El mejor ejemplo de esto es Sirens. Una balada que en un par de años va a ser parte de la lista estable de Radio Aspen, que tiene un solo de guitarra desopilante con abuso de delay analógico y una outro con coritos que vamos a estar cantando todos desde el campo la próxima vez que Pearl Jam nos visite (“…oh-oh ah-ah, oh-oh ah-ah…”).
Lo lindo de esta obra es que, además de representarlos abrazando sonidos nuevos, es que se toma su tiempo para visitar diversos momentos de su ya extensa carrera. My Father’s Son nos trae recuerdos de Yield, Yellow Moon de Binaural y Future Days me remonta a Riot Act y un poco a esa balada hermosa, ya transformada en himno, que fue Just Breathe en Backspacer.
La frutilla del postre para un disco de cuatro estrellas y media: Sleeping By Myself versión full-band. Ament, Gossard, McCready y Cameron con su batería y armonías vocales (¡!) se suman arriba de ese ya establecido caballo de batalla que son Eddie Vedder y su ukelele. Afuckinmazing.

https://www.youtube.com/watch?v=qQXP6TDtW0w

How To Destroy Angels — Welcome Oblivion

Es interesante lo que pasa una vez que sacás a Trent Reznor de un proyecto personalista (o cuasi-solista) como es Nine Inch Nails y lo ponés en una banda. El resultado no se aleja mucho de ese noise industrial, pero resulta mucho más fresco. En esta ocasión acompañado por nada más y nada menos que Atticus Ross y su bella esposa Mariqueen Maandig.
Una voz femenina queda muy bien por arriba de esos ruidos oscuros que salen de los sintes. Con un sonido muy característicos de NIN por momentos, sorprende lo popero que puede resultar el producto. How long? podría haber sido vendido para revivir la carrera de Britney Spears tranquilamente(con agregado de postpo por David Guetta probablemente), pero de alguna manera extraña, encaja orgánicamente con el disco que se mueve sobre unas vias compuestas por beats y voces procesadas.
Otro vehículo del album claramente es la experimentación sonora, muy presente en Ice Age, donde se intenta llevar el costado acústico de la banda al límite, probando instrumentos de cuerda en pedales continuos y maderas huecas. Todo con la dulce voz de Mariqueen flotando por arriba. Deleite puro. Especial atención a On The Wing, guiñazo a Kid A de Radiohead.
El cd no aburre (como tal vez te pueda suceder con algunos discos de NIN) y es sorpresa tras emoción tras sorpresa tras emoción.

https://www.youtube.com/watch?v=EoXSUOjGk6w

Kanye West — Yeezus

¿Vieron cuando dicen que hacer música es arte? Yo creo que se referían a este tipo de cosas. Cada track está pensado minuciosamente. Cada textura, cada voz, cada equalización en cada instrumento, cada transición, cada beat, cada microsegundo. Podés escucharlo y estar metídisimo en un viaje y de repente BAM, te cambiaron la joda totalmente y encaja perfecto. Eso es Yeezus. Kanye West es polémico y bastante detestable (el track I Am A God tiene el agregado de “featuring God” en las liner notes) , sí… pero que sabe, sabe BANDA. Esto arranca con On Sight, al toque es obvio que lo coprodujo Daft Punk. Black Skinhead es lo que pasaría si Depeche Mode quisiese hacer rap y quisiesen samplear Sympathy For The Devil de los Rolling. I Am A God tiene una coda suave cantada por Justin Vernon (¿te suena? ¿Bon Iver?) que sigue agregando al factor WTF del álbum, pero que sigue sumando a esta obra de arte.
Las letras no dejan de ser el típico “la tengo gigante” del hip hop yankee (“Yo niggas can’t fuck with me / I know that pussies ain’t free”) pero la magia está en la agresión, el sentimiento que tiene el sonido de su voz cantándolas.
El punto alto, y obvio LO MEJOR, del disco es Blood On The Leaves donde se arma un dueto entre una Nina Simone sampleada y un Kanye autotuneado. El tratamiento en las voces es soberbio y la instrumentación, magistral. Brass, piano y más beats. ¿Classic hip hop? BAM y más BAM, ahí tenés. Que venga el careta de Jay Z a hacer un solito sobre ferraris, trajes y putas merqueadas. No. Esto no se trata de esto. Se trata de mostrar lo que es ser un visionario.
Esto claramente es el futuro del hip hop, y si lo negas sos un ciego.
¡¡¡Grande, Kanye!!!

https://www.youtube.com/watch?v=I5p5z5CIxiA

Babasónicos — Romantisísmico

Esto va a ser una suerte del “no review” (o por lo menos, no los laureles que se acostumbran a uno de los mejores discos del año). ¿Cuál es la característica novedosa y excelente de este disco? Ninguna. Ninguna y todas.

A ver: desarrolemos.
Desde la masa hiper mega genial e incomparable de Jessico que Babasónicos apuesta a la misma fórmula. Perfeccionando sus propios estandares y cada vez puliendola más. Alternan entre discos buenos y excelentes desde el 2001, pero, por más que públicamente lo promocionen de forma contraria, ningún disco les representa un riesgo ni una experimentación. No obstante, ¿qué les podemos exigir después la leyenda viviente de Jessico y los discazos de Anoche e Infame? ¿No es esa responsabilidad ya de las nuevas bandas?
Dicho esto, podemos atacar un poco este alimento que nos representa Romantisísmico basándonos en el análisis anterior. Tiene todos los componentes de un clásico discazo de los Baba. Las baladitas alegronas, rockpop y glamorosas (Aduana de palabras, Run Run), los hits pseudo punchis (La lanza, Uno dos tres), el tema acusticón que cierra el disco (Celofán), ese western-rockabilly tan particular que los sigue desde Desfachatados (1999) (Paisano) y obvio, su dosis de rock sónico con el sonido más trademark de los últimos años de rock nacional (El baile de Odín).
Al fin y al cabo, y por más predecible, no deja de ser un discazo. De nuevo, si los flacos son la gallina de los huevos de oro… ¿Por qué los mataríamos?

https://www.youtube.com/watch?v=j5AW9nEKYiY

¡Hasta aquí llegamos! ¿De qué disco nos olvidamos?

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Alex Ingberg

Data scientist, computer engineer and music fanatic. Here I’m half music recommendator and half data adventurer. https://www.linkedin.com/in/alexingberg/