ANÁLISIS DE “SOBRE HÉROES Y TUMBAS”, de Ernesto Sábato
Nos introducimos al análisis de “Sobre héroes y tumbas”, de Ernesto Sábato. Veremos en clave de resumen, algunas características y elementos que componen a la estructura de esta novela o anti- novela de uno de los autores más representativos de la literatura latinoamericana como así también, que personajes integran la trama, y qué simboliza la ceguera en la obra de Sábato.
Podes escuchar una versión extendida de este articulo en el podcast MONSTRUOS, BRUJAS Y MAGAS.
La importancia de “Sobre héroes y tumbas”, de Ernesto Sábato en la literatura latinoamericana
Ernesto Sábato, publica “Sobre héroes y tumbas” en 1961, recién a los 50 años. Es como decíamos, su segunda obra publicada después del “El Túnel”. Y al igual que otras obras publicadas por el autor, se salvo de la basura o de las llamas, gracias a la insistencia y aliento de amigos y de su mujer, quienes lo alentaron para su publicación (Algo de esto puede leerse en la dedicatoria de algunas ediciones).
En ésta obra, desde lo temático, indagará en algunos tópicos que serán recurrentes en su obra; la identidad; el “ser nacional”, la soledad, la muerte, la locura, la libertad… la ceguera como posible metáfora o signo, etc. Temas muy vinculados por aquel entonces a las reflexiones que se estaban venían produciendo en el campo de la filosofía.
No es de extrañar entonces, que autores como Albert Camus, o Thomas Mann, elogiaran la obra de Sábato.
En cuanto a los procedimientos técnicos, Sábato al igual que algunos escritores Latinoamericanos, pero desde un estilo muy singular, indaga en lo que muchos críticos y teóricos, catalogan como “anti novela”. Adjetivación que si recordamos también se le suele hacer a otra de las obras que hemos leído en el club, “Rayuela”, de Cortázar.
¿Qué es una anti novela?
Una anti novela es aquel material literario que se vale del cruce hibrido de diversos componentes, procedimientos, y géneros como la la crónica policial, el ensayo teórico. Y en donde se cruza lo sociológico, lo político y lo histórico) el diálogo teatral, etc) como así también del pasaje o puentes entre la voz de un narrador omnisciente que se articula en paralelo con las narraciones en primera persona de los protagonistas, o también personajes secundarios.
En el caso de Sobre héroes y tumbas por ejemplo, uno de los personajes que se transformará en narrador en la segunda parte de la novela, más precisamente en “Informe sobre ciegos” que redacta el mismo Fernando Vidal Olmos; personaje omnipresente que deambula y es aludido misteriosamente a lo largo de toda la obra, y que de alguna manera, interconecta a todos los personajes de ésta obra (Y de su novela precedente “El Túnel”) con la historia y la tradición de una familia argentina a lo largo del tiempo. En un claro gesto político, pues cruza esa ficción o relato del individuo (De lo individual) con ése ser nacional (Colectivo).
¿Qué simboliza la ceguera en las novelas de Sábato?
La oscuridad, como metáfora es ampliamente utilizada por Sábato. Ya en su primer novela, “El túnel”, el protagonista Juan Pablo Castel, busca ansiosamente “salir del túnel” en el que se haya o bien, encontrar quien lo comprenda (Y por ende, proteja) del estado de indefensión, soledad y angustia que le genera un mundo dominado por el absurdo, el sin sentido (Existencialismo) y quizás, porqué no, que sea hallazgo posible de un estado del ser absoluto pleno y libre.
Cree poder lograrlo al encontrarse “casualmente” en una exposición de sus propios cuadros (Ya que el mismo es pintor), con Maria Iribarne (Personaje femenino de “El Túnel”) pero su mismo ansia de poseer el absoluto, objetivado a través del personaje amado, lo destruye y se destruye así, a sí mismo. De echo, lo que quiso decir Allende al acusar a Pablo Castel de “Insesato” es que al buscar poseer a ese otro ser libre, enigmático, indescifrable, e inasible, que es promesa de lo ideal, y al cual busca ajustar o captar según su visión del mundo, y según las normas que establece como amorosas, lo aniquila; lo asesina y al hacerlo, se auto destruye y destruye también la capacidad sanadora y transformadora de aquello que asesina.
El túnel, es o podría ser entre otras acepciones y metáforas posibles (por ejemplo derivadas a de la lectura del psicoanálisis, sobre todo en Carl Jung), aquello inconsciente; aquel pasaje que se recorre entre las sombras, por debajo de la luz del mundo, del conocimiento, de lo diáfano (La consciencia racional).
Éste transitar en el sub mundo, en el pasaje de la inconciencia a la consciencia, o viceversa; de la cordura a la locura; o bien del control del ser racional al impulso irracional y “pasional” al cual se “es arrastrado” por “maldiciones, tormentas, demonios” (El Daemon griego), es recorrido por muchos de les protagonistas de las novelas de Sábato.
Porque si Pablo Castel, lo recorre internamente en el plano de la psiquis sobre la superficie de una Buenos Aires céntrica y diáfana; Fernando Vidal como veremos más adelante, en “Informe sobre ciegos”, reconfigurará la metáfora, en el campo de una realidad externa; del accionar concreto.
Es decir, el descenso a aquello que se encuentra oculto en la sombras, debajo del mundo, de la razón, de la lógica, de la cordura y la luz (la razón, la verdad, la belleza, lo bueno) para hallar en cambio, el infierno posible (y los habitantes de éste) que rigen el mundo desde ahí; los ciegos.
Delante de mí, enigmática y dura, observándome con toda su cara, vi a la ciega que allí vende baratijas. Había cesado de tocar su campanilla; como si sólo la hubiese movido para mí, para despertarme de mi insensato sueño, para advertir que mi existencia anterior había terminado como una estúpida etapa preparatoria, y que ahora debía enfrentarme con la realidad. Inmóvil, con su rostro abstracto dirigido hacia mí, y yo paralizado como por una aparición infernal pero frígida, quedamos así durante esos instantes que no forman parte del tiempo sino que dan acceso a la eternidad (…) De ese modo empezó la etapa final de mi existencia. Fernando Vidal Olmos, Informe sobre ciegos
La ceguera; la privación de la capacidad de “ver”, es símbolo ya desde la época de Platón con su mito de la cavernas, la incapacidad de acceder al conocimiento puro, a la “verdad”; vivir en las sombras, es negarse (por decisión u omisión) al conocimiento.
Algo de esto, también se encuentra presente en la tragedia de Edipo Rey, de Sófocles, cuando al descubrir que ha cometido incesto y que ha asesinado a su padre, decide arrancarse los ojos incapaz de reconocer, de “ver” aquel error que ha cometido, producto de la imprudencia, la vanidad, y la desmesura.
No sucede lo mismo en cambio, en algunos relatos mitológicos griegos, donde la ceguera es la privación de un sentido, que en cambio, permite el desarrollo de otras habilidades (Como la fuerza en el caso de los centauros o la quiromancia en el caso de los adivinos).
Mientras que, en las tradiciones y culturas orientales o hindú, la privación del sentido de la vista, aleja al espíritu de burda materialidad de lo real concreto y físico, para brindarle otra concepción/percepción y conocimiento del ser y del mundo.
Sábato, se inclinará (Quizás llevado por su propios demonios, como él mismo lo asume) para encontrar (Al igual que José Saramago con su “Ensayo sobre la ceguera”), en la metáfora sobre los ciegos, y la ceguera, una visión (Cuack!) apocalíptica, pesimista (en parte, creo) muy vinculada al existencialismo, como comentaba al inicio del artículo.
Los ciegos, serán entonces aquellas “fuerzas” siniestras, que habitan en las sombras, por debajo del mundo o por debajo del yo consciente, que dirigen el orden secreto del ser y de la historia mundial arrastrándolos hacia su propia destrucción, a través de la ignorancia, del avance de una ciencia irresponsable (ética y moralmente); de la codicia, y de la pasión desbocada. Y estarán presentes en la obra de Sábato (Y en su propia vida) a través de la inclusión de personajes como “Allende”, en “El Túnel”, como en el “vendedor de ballenitas del subte y la secta de los ciegos, de ”Sobre héroes y tumbas” (Y que luego, retomará en Abaddón, el exterminador, la última novela de Sábato).
“UNO Y EL UNIVERSO”, El existencialismo en la obra de Sábato
En 1943, Jean Paul Sartre, principal exponente del existencialismo francés junto con Albert Camus (Aunque Camus rechazase para sí, tal etiqueta) publica “El ser y la nada”.
Dos años después, y en un claro cruce o diálogo con el título del primero, Sábato publica su ensayo “Uno y el universo”, en donde se interroga y reflexiona sobre algunos aspectos como el rol de la ciencia, del arte (Y más precisamente sobre el surrealismo, movimiento que frecuentó como dijimos durante su estadía en París) pero también sobre aspectos políticos, e históricos de la coyuntura reciente como el fascismo.
En la re edición de 1968, platea en el prólogo que su pensamiento sobre esos temas han diferido desde entonces pero que toma responsabilidad de lo que por aquellos años había publicado. Pero, porque vuelvo a éste libro; quizás porque encuentro en él, y en sus lecturas de los existencialistas, un claro cambio de paradigma que influirá en su pensamiento y por ende, en su obra posterior.
Esta afinidad con el pensamiento existencial, a través de su narrativa, encontrará como les comentaba en mail anterior, una excelente recepción de parte de Camus, quien, si recordamos, elogia El Túnel, y es uno de los responsables en alentar su traducción al francés y su publicación a través de la importante editorial Gallimard.
En resumidas cuentas y encontrando ciertos puntos de contacto, podemos encontrar que tal cual sucede en algunas de las premisas planteadas por el existencialismo; el individuo desprovisto de sentido; porque la vida no lo tiene por si mismo, debe anteponerse al absurdo de esa vida carente de sentido, que lo aliena y aísla, y reconocer la soledad inminente que le brinde la libertad para no ya encontrar el sentido sino, crearlo y en lo posible; no un sentido sino, varios que lo re encuentren con les otros, con el mundo y con el ser absoluto.
Todas éstas inquietudes propias del existencialismo, se trasladarán al campo de temática y de lo formal en las novelas de Sábato donde encontraremos que muchos de éstos personajes se encuentran en ésa búsqueda, en esas condiciones; solos/as, descreídos/ apáticos/ al borde de la locura o entregados a sus pasiones en ciudades alienantes, en mundos (internos y externos) tortuosos. De los cuales, se les dificulta “salir”.
Ahora, me gustaría hacerte un regalo: Puedes escuchar un fragmento del AUDIOLIBRO SOBRE HÉROES TUMBAS narrado por Facundo Rubiño, director creativo de LA CRESPO ESTUDIO, productor, creador y conductor del podcast MONSTRUOS, BRUJAS Y MAGAS y coordinador de ALTO VIAJE, club de lectura.
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