Una infografista en La Moncloa: mi experiencia poniendo el periodismo visual al servicio del ciudadano durante la pandemia
Soy periodista y mi especialidad es hacer gráficos. Después de un par de décadas trabajando en medios de comunicación, en abril de 2020 me incorporé al Departamento Digital de la Secretaría de Estado de Comunicación, dos semanas después de ser confinados. Acabo de dejar ese puesto para emprender una nueva etapa y volver a trabajar en un periódico, La Vanguardia, pero antes me gustaría explicar mi experiencia.
En poco tiempo tuve que aprender a aplicar mi bagaje como periodista visual y mis conocimientos sobre infografía a la creación de productos digitales orientados al servicio público, durante dos años y medio críticos, con recursos limitados, en tiempos récord y sin haber trabajado antes en la Administración.
Pronto asumí que las necesidades del momento iban mucho más allá de mi experiencia previa, pero en el fondo -pensé- los periodistas digitales tenemos una ventaja al afrontar los retos de la administración digital: estamos acostumbrados a pensar siempre en el lector (¿quién es? ¿cómo puedo ayudarle? ¿cómo puedo llegar a él?). Solo que en este caso al lector se le llama ciudadano.
1. Los primeros momentos de la pandemia
Estábamos confinados por una pandemia inédita, todo era una incógnita, acababa de llegar a mi trabajo y no sabía por dónde empezar, así que di pequeños pasos sobre un lugar seguro: usar la infografía como un instrumento para explicar conceptos complejos. Este ejemplo, sobre cuándo podríamos salir a pasear tras mes y medio encerrados, me enseñó lo útil que podía llegar a ser un gráfico sencillo, y también el enorme alcance y la tremenda responsabilidad que implica difundir información oficial.
Creamos otros gráficos que fueron difundidos en JPG directamente a la prensa y también a la ciudadanía a través de las cuentas oficiales en redes sociales de La Moncloa, los ministerios y otros organismos públicos. Las infografías respondían con la información disponible en ese momento a grandes preguntas como ¿puedo ir a trabajar? o ¿cómo será la desescalada?
De esa época son también los mapas de la desescalada, que elaboramos con la información que nos proporcionaba el Ministerio de Sanidad. Jamás imaginé que los breaking news en la Administración serían más intensos que en los medios: la misma tensión, la misma presión para publicar lo antes posible y el doble de responsabilidad, ya que en este caso tú eres la fuente y un error se puede replicar hasta el infinito con consecuencias serias. Además, estos mapas eran difíciles de elaborar (como saben todos los periodistas especializados que también debieron hacerlos en sus medios) debido a la definición de las zonas sanitarias en España y lo intrincado del propio proceso de desescalada. La Secretaría de Estado de Comunicación los difundió por televisión a través de ruedas de prensa, los envió a los medios para facilitar su trabajo y también los publicamos en webs y redes sociales oficiales. Es difícil calcular el alcance de estos mapas, pero los vio mucha, mucha gente.
Pronto creamos una pestaña temporal dentro de la página web de Moncloa que enlazaba información sobre el Covid-19 dispersa en otros lugares: documentos del Ministerio de Sanidad, normativa aprobada, guías elaboradas por otros ministerios, sitios web de interés, etc. En este caso, el valor estaba en actuar rápido con los medios disponibles, no reinventar la rueda, no duplicar información, mantener siempre actualizada la página y redirigir al ciudadano al lugar correcto.
2. La campaña de vacunación: Vacunacovid.gob.es
En diciembre de 2020 llegaron las primeras vacunas contra el nuevo coronavirus y con ellas había que explicar la estrategia de vacunación y resolver las dudas que todos teníamos. Ayudamos al Ministerio de Sanidad y al Ministerio de Ciencia e Innovación a crear, en muy poco tiempo, una web verdaderamente dirigida a la ciudadanía. En un ecosistema digital público en el que abundan las web llenas de fotos de actos y notas de prensa no demasiado informativas, el diseño de esta página tuvo una premisa clara desde el principio: estaría pensada de verdad para los usuarios.
Enseguida elegimos un formato clásico de internet tradicionalmente muy bien tratado por los buscadores: plantear preguntas y responderlas. Lo primero que hicimos fue seleccionar las preguntas más importantes y a partir de ahí orientamos toda la estructura de la web a responderlas.
La primera pregunta de la lista era la que nos hacíamos todos los españoles: ¿Y yo, cuándo me vacuno? Para responderla tuve claro que lo haríamos a través de un gráfico. Tenía que ser muy sencillo, actualizable y no generar más dudas de las que ya existían. Por ejemplo, para evitar los “blancos informativos”, en ocasiones se recurrió a explicaciones como “sin anunciar”. El esquema también debía funcionar en el futuro pasara lo que pasara en las etapas posteriores.
Que una página oficial abra con un gráfico es inusual…
… pero no solo respondimos de manera visual a esto. Tuve el lujo de elaborar con la ayuda de la bióloga del CSIC Isabel Sola el gráfico “¿Cómo actúa y en qué se diferencia cada tipo de vacuna?”, otra de las grandes dudas de los últimos tiempos.
Este tipo de infografías son muy didácticas, adecuadas para divulgar temas complejos. La mayor dificultad consistió en conseguir un esquema comprensible para cualquier persona, donde se pudieran comparar los tres tipos de vacunas al mismo tiempo, también en el teléfono móvil.
La web fue presentada por el Ministro de Sanidad el 28 de diciembre de 2020 con una gran acogida. Nos halagó pero también nos sorprendió que su lanzamiento “sorprendiera” tanto en círculos profesionales del diseño digital. ¿Por qué en lo público no hay tantos buenos ejemplos de productos informativos digitales dirigidos a la ciudadanía? En este tiempo he pensado mucho en ello, y creo que una parte importante del problema radica en la ausencia dentro de la administración de perfiles especializados en el diseño de información, el diseño centrado en las personas, la experiencia de usuario, periodistas digitales que hayan gestionado productos informativos, etc. Cuando no se sabe qué se necesita comunicar es difícil saber incluso qué debes licitar para que los ciudadanos reciban la información de la mejor manera.
Con este proyecto, aprendimos que la accesibilidad va mucho más allá de alcanzar una triple A. Implica que todas las personas, independientemente de su situación, puedan acceder a la información en igualdad de condiciones. Para ello, utilizamos una estructura clara y bien definida, una navegación muy intuitiva y un uso del lenguaje sencillo y claro.
Seguimos evolucionando la web inicial buscando formatos que ayudaran a aclarar cuestiones que estaban en el aire y contribuyeran a luchar contra la desinformación. Así nació el blog Voces expertas, una sección elaborada por periodistas especialistas en ciencia, con la coordinación de la agencia SINC y bajo licencia Creative Commons.
Aunque el objetivo de esta web no consistía en proporcionar todos los datos de la vacunación, sí que era interesante prestarle atención al estado de la vacunación, recogiendo y simplificando los datos proporcionados por Sanidad. Como los recursos eran pocos, creamos un pequeño cuadro de cifras destacadas que al principio actualizábamos manualmente y después convertimos en un gráfico dinámico. Hubo que tener paciencia porque recursos como este, sencillos de implementar y que en otros contextos serían fáciles de llevar a cabo, pueden llevar semanas de desarrollo porque implican la coordinación entre varios departamentos y ministerios.
3. Los fondos de recuperación europeos: Planderecuperacion.gob.es
En julio de 2020 el Consejo Europeo aprobó los fondos Next Generation para ayudar a la recuperación de los estados miembros tras la crisis del COVID-19. Con ello, vuelve a surgir la necesidad de explicar algo muy bien: en este caso, cómo iba a ser la estrategia española para canalizar la partida destinada a nuestro país, de hasta 140.000 millones de euros para reformas e inversiones.
Esta web tenía dos objetivos:
- Explicar qué era el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia
- Facilitar el acceso a las ayudas a ciudadanía y empresas, especialmente a las de pequeño y mediano tamaño
Para diseñar una web sobre un tema tan complejo hubo que entender bien en qué consistía el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, la agenda de inversiones y reformas estructurales para España que giraba alrededor de 10 políticas palanca y 30 componentes. Para que los usuarios entendieran esta compleja estructura desarrollamos un sistema de consulta/lectura por niveles: uno más general con las 10 grandes categorías y otro más específico por temas con los 30 componentes. Estos últimos tenían nombres muy largos y difíciles de comprender en un primer vistazo, así que los simplificamos y los convertimos en palabras rápidamente reconocibles por todos.
Una vez más nos apoyamos en los gráficos para visualizar, por ejemplo, la canalización de los fondos en las diferentes áreas:
Ayudar a empresas y ciudadanía a acceder a los fondos fue un proceso en dos partes. Comenzamos con un sencillo asistente de búsqueda de convocatorias, que evolucionó hasta la creación de un potente buscador que hoy permite consultar las licitaciones, subvenciones y ayudas relacionadas con el Plan tecleando los términos de interés.
a) Asistente de búsqueda de convocatorias
Para encontrar una licitación o una subvención cualquiera en la Administración General del Estado hay que buscar en sus plataformas oficiales. Es complicado sin experiencia previa o capacidades digitales avanzadas. Yo misma me puse a buscar convocatorias y descubrí que el proceso puede llegar a ser farragoso y, en ocasiones, desesperante.
Si unos meses antes tuve que aprender cómo funcionaban exactamente las vacunas, en esta ocasión para gestionar el proyecto tuve que aprender sobre contratación, preguntando aquí y allá y tomando prestados libros sobre la Ley de Contratación de la biblioteca de la Secretaría de Estado de Comunicación. Se acumulaban en mi mesa junto a los tomos encuadernados del Plan de Recuperación.
En la primera fase de la web decidí crear un asistente de búsqueda de convocatorias que facilitara este proceso de consulta. Su espíritu era la transparencia: como no existía un lugar único donde buscar licitaciones y subvenciones vinculadas al plan, ayudaríamos al usuario a saber dónde y cómo debía buscarlas.
Para ello, hablé con varias pymes, ya que por su tamaño siempre cuentan con recursos limitados para contratar este tipo de servicios que ofrecen algunas empresas previo pago. Una pequeña empresa me contó que tenía un ‘post it’ siempre en su mesa a modo de chuleta con algunas claves importantes para el proceso de búsqueda. Este detalle me pareció importante, ¿por qué no facilitar ese ‘post-it’ a nuestros usuarios?
Diseñé el asistente para que describiera varios escenarios básicos. El usuario tan solo tendría que elegir entre ciertas opciones y la herramienta le devolvería como resultado un cuadro, ese ‘post-it’ con un enlace directo a la fuente de búsqueda y con las pistas necesarias para que su proceso de búsqueda en las fuentes oficiales fuera más sencillo.
b) Buscador de convocatorias
Recordemos que, al principio, no existía ningún lugar único donde poder buscar todas las licitaciones, subvenciones y ayudas vinculadas al plan. Para solventarlo, en los primeros momentos publicamos las primeras convocatorias en una página básica de html, unas tras otras en una larga lista difícil de mantener y actualizar:
El número de convocatorias publicadas iba creciendo poco a poco y se hacía necesario convertir los registros en datos estructurados para poder desarrollar una primera versión del buscador y permitir la entrada automática de información en el futuro. Para traer registros de varias bases de datos diferentes estudiamos sus modelos de datos, seleccionamos solo los necesarios para una consulta básica y los equiparamos para que pudieran entrar en nuestro esquema en uno u otro campo.
Nuestro buscador no pretendía ser una réplica de la información publicada en las plataformas oficiales sino una puerta -fácil de abrir- de acceso a las mismas, una herramienta gratuita que facilitara la localización de las convocatorias a través de un proceso simple.
Paralelamente se desarrolló la normativa que obligaba a identificar las licitaciones y ayudas como pertenecientes a estos fondos. Esto era fundamental: de otro modo no podríamos obtener la selección de registros que necesitábamos. Tras varios meses de reuniones y la colaboración entre muchos departamentos (la Unidad de Seguimiento de los fondos de Presidencia del Gobierno, el Ministerio de Hacienda y Función Pública y el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital), comenzamos a ver los primeros frutos. A la parte técnica, como en Vacunacovid.gob.es, la Subdirección TIC del Ministerio de la Presidencia y la empresa adjudicataria del concurso, Babel.
El proceso de automatización se hizo en varias fases hasta llegar a la versión actual del buscador.
4. La Moncloa: Lamoncloa.gob.es
Durante muchos meses el proyecto de renovar la web de La Moncloa se fue posponiendo porque llegaban nuevos proyectos que se convertían en prioritarios. Lo que al inicio se planteó como una mejora de algunas partes más tarde se convirtió en una renovación completa del sitio, incluida su marca, y que alcanzó también a procesos y formas de trabajar de la redacción que mantiene esta página.
El objetivo de esta profunda revisión era, como siempre, volver el foco hacia las necesidades del ciudadano, fomentar la función informativa de la web potenciando el contenido en directo, ágil y propio, y transmitir una marca y unos contenidos más claros.
La web tenía un problema de identidad, ya que en su cabecero convivían distintas marcas: se solapaban el logotipo de La Moncloa, el del Gobierno de España y el de Presidencia del Gobierno, además de alguna campaña institucional. El problema se agravaba en la versión móvil, porque la adaptación responsive se limitaba a reducir el tamaño de estos elementos gráficos hasta que cupieran en el ancho del dispositivo.
La solución apareció cuando conseguimos responder a la pregunta: ¿qué es esta página? Con la respuesta clara (es la web oficial del Presidente del Gobierno y el Consejo de Ministros), se decidió mostrar un solo logotipo en el header, el de La Moncloa, y reubicar el resto de elementos en su lugar correspondiente y en el formato adecuado. El logotipo del Gobierno de España cerraría la página en su footer y las campañas institucionales pasarían a ser banners claros y accesibles.
Para que los contenidos fueran más claros revisamos todos los elementos y los modelos de página: trabajamos la tipografía para mejorar la jerarquización de la información, mejoramos algunos formatos y, en algunos casos creamos nuevos, como el usado para narrar la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros:
Pasamos de mostrar una selección de varios vídeos cortos con momentos destacados al formato actual, muy innovador, donde el usuario ahora puede consultar la rueda de prensa completa, ir directamente a la intervención de cada protagonista o seleccionar los momentos clave de su participación. La adaptación a la versión móvil está muy cuidada. Hay muchas horas de trabajo junto a los técnicos de Moncloa en este rediseño. Todo el trabajo fue hecho “en casa”.
Otro de los contenidos más consultados en la web de La Moncloa es la agenda diaria en la que aparecen las actividades del presidente, vicepresidentas y ministros del Ejecutivo. Hasta ahora, esta información se presentaba como una lista plana de eventos clasificados por cartera ministerial en la que siempre he echado en falta el nombre de su titular.
Ejemplo de la agenda antes del cambio:
Necesitábamos que la agenda tuviera un formato más moderno y que fuera más fácil de consultar, ya que son 22 ministerios y muchos ciudadanos apenas reconocen unas pocas caras. Añadimos el nombre a cada cargo e incorporamos su foto oficial:
Decidimos que una información tan relevante tenía que mostrarse en la home y ser programada de forma que según avanzara la jornada fueran desapareciendo y apareciendo actividades. También se mejoraron los procesos internos que sigue la Secretaría de Estado de Comunicación para recopilar y publicar esta agenda.
5. La imagen de los Ministerios
Resolver el problema de identidad de la web de La Moncloa nos llevó a meternos en otro lío: la necesidad de revisar y unificar el cabecero de los ministerios. La poca homogeneidad entre unos y otros y la necesidad de destacar elementos importantes en un lugar visible llevaba en algunos casos a soluciones en las que la marca resultaba casi ilegible, especialmente en los dispositivos móviles. Eso suponía un problema, ya que para que la ciudadanía se relacione con seguridad con la administración el primer paso debe ser transmitirle que está en la página oficial y no en otra.
Decidimos aplicar la misma filosofía que con la web de La Moncloa, presentando una propuesta única, cerrada y con una versión responsive muy cuidada, todo ello más acorde con el Manual de imagen institucional. Lamentablemente, en España no existe una web gubernamental única, tenemos 22 páginas ministeriales independientes. Si el ciudadano entra en una de ellas, debe identificar rápidamente en qué lugar está.
La complejidad en este proyecto vino de esa misma dispersión que intentábamos solucionar. Trabajar con todos los equipos técnicos y/o de comunicación de los ministerios fue fatigoso pero muy interesante, ya que pude conocerlos y entender sus necesidades y problemas.
Algunas conclusiones
En resumen, creo que las circunstancias me llevaron a aprender y a entender la importancia que puede tener el diseño como herramienta para la innovación y modernización de las administraciones públicas. La simplicidad y la claridad, la síntesis y la búsqueda de una mejor experiencia de usuario son las únicas bases posibles para ello.
Esta es solo una parte del trabajo de los últimos años, pero hubo mucho más, menos visible: el lanzamiento de otras páginas web para Presidencia, la creación de promos para redes sociales o presentaciones internas, la participación en grupos de trabajo o el asesoramiento a otros departamentos y ministerios, por ejemplo.
Estoy muy orgullosa del trabajo realizado en este tiempo, pero una web única de gobierno, un Gob.es, hubiera simplificado todo y habría permitido mayor rapidez en momentos en los que transmitir buena información digital a la ciudadanía es clave. Hay muchas personas dentro y fuera de la administración con esta visión, que sin duda llegará a cumplirse algún día.
Descubrir este documento publicado por el Ministerio de Ciencia e Innovación en plena pandemia fue revelador porque ordenaba sobre el papel muchas de las cosas que rondaban por mi cabeza. Cuando me puse en contacto con sus responsables, vi que aunque yo no procedía del mundo del diseño, compartíamos la misma visión y a todos nos unía la necesidad de acercar mejor las administraciones públicas a los ciudadanos. En lo público no hay mucha cultura del diseño salvo maravillosas excepciones como los Servicios Digitales del Gobierno de Aragón. Jamás pensé decir algo así, pero sus licitaciones son verdaderos documentos de cabecera.
Gracias a la Secretaría General de Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación por promover la importancia del diseño y su capacidad de cambio. También al Grupo de Trabajo de Diseño y Administraciones Públicas y a todos aquellos que se han acercado a nosotras en este tiempo para echar una mano o apoyar nuestras iniciativas.
Otra sorpresa muy agradable fue comprobar la calidad de los equipos técnicos de la administración y, especialmente, de Moncloa. También echaré de menos a Babel, la empresa que desarrolló las páginas de Vacunas y Plan de Recuperación, siempre muy implicados y con la mejor disposición a pesar de lo intempestivo de algunos momentos.
Debo agradecer al equipo de la web de La Moncloa su paciencia y dedicación: creyeron desde el principio en un proyecto que parecía imposible. Gracias también al equipo de redes, siempre pensando en cómo comunicar mejor cuestiones complejas. Por supuesto, ha sido un placer trabajar con todos los compañeros de la Secretaría de Estado de Comunicación y de Presidencia del Gobierno. Agradezco también la confianza de los dos secretarios de estado, Miguel Ángel Oliver y Francesc Vallés, que apoyaron nuestras propuestas y supieron ver su importancia.
Finalmente muchas gracias a Delia Rodríguez, directora del Departamento Digital, que tuvo la intuición de que un perfil de periodista visual como el mío iba a ser imprescindible para una comunicación digital cercana a la ciudadanía. Durante este tiempo hemos trabajamos juntas en todos estos proyectos defendiendo la misma visión.