Dime cómo te llaman y te diré quién eres

GROW
culturagrow
4 min readMar 6, 2024

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Ha llegado el momento de darle cierre al apartado de narrativas de nuestro Canvas de Identidad GROW. Primero, hablamos sobre cómo contar la historia de tu organización, luego hablamos del manifiesto y también te dije cómo crear un pitch perfecto.

En la última parte de narrativas hablaremos de las nomenclaturas, simples palabras que valen oro.

¿Qué es la nomenclatura en la organización?

Creo que el mejor ejemplo del poder que puede tener la nomenclatura en una organización viene de los deportes, si eres fan del futbol americano estoy segura de que no conoces a los jugadores del equipo de San Francisco, conoces a los “Niners”, si te gusta el futbol soccer y amas el Barcelona seguro que los llamas “Los Culés”, si lo tuyo es el béisbol sabrás a quién me refiero cuando digo: “Los Bombarderos de Manhattan”.

A simple vista, estas palabras son simples nicknames pero en muchos casos estos sobrenombres son parte de la historia, hábitos, relaciones y rituales que existen en una organización.

La nomenclatura ayuda a hacer visible la cultura de la organización a través del lenguaje y de palabras auténticas y únicas. Estos nombres no solo pueden representar a todas las personas de una organización sino también a roles o áreas específicas dentro del organigrama.

¿Cómo descubro mi nomenclatura?

Es importante saber que ante todo, descubrir las nomenclaturas es un proceso creativo y debe incluir a personas clave: los influenciadores.

Para descubrir la nomenclatura de tu organización debes revisar tu propósito, tu historia de marca, tu documentación, todos estos elementos narrativos te pueden ayudar a crear el o los nombres indicados para tu equipo, áreas, roles, etc.

Un ejemplo muy representativo y famoso de la nomenclatura en las organizaciones es la de Google, los famosos “Googlers”, así se les llama a los empleados de la empresa, fue un nombre que nació de forma interna pero con el paso de los años trascendió a nivel externo.

En Google la nomenclatura no se quedó ahí, a lo largo de las décadas la compañía ha crecido su glosario a partir de la salida de nuevos productos, los rituales aprendidos y las tribus surgidas, acá algunos ejemplos:

  • Noogler: los googlers novatos reciben este nombre. Además de ser identificados por llevar una gorra de colores.
  • Greygler: hace referencia a los empleados veteranos de Google, que tienen más de 40 años y ya lucen unas cuantas canas.
  • Xoogler: o lo que viene siendo un exgoogler, que ahora trabaja para otra compañía.
  • Doogler: son los googlers que llevan su mascota al trabajo y así también es como se llama a los animales que les acompañan.
  • Stan: Es la mascota principal en Plex. Se trata del esqueleto de un T-Rex ubicado en el parque del campus.
  • Brewgler: son los googlers amantes de la cerveza, que comparten su afición y recomendaciones en los ratos de ocio.

¿Cómo redactar la nomenclatura?

  1. A partir de la sesión creativa con las personas influenciadoras, encuentra puntos en común entre el propósito de la empresa, su trabajo y las respuestas que dieron los influencers.
  2. Hazte una pregunta: ¿Esta nomenclatura es auténtica y responde a la realidad de la organización?
  3. Crea una fórmula para alinear todos los nombres de las distintas áreas/roles/equipos.

¿Por qué crear nomenclaturas en mi organización?

Fomenta un sentido de pertenencia

Al asignar nombres únicos y personalizados a áreas, roles y equipos, los empleados pueden sentirse más conectados y comprometidos con su trabajo. Esto puede fortalecer el sentido de pertenencia a la empresa y mejorar la moral de los empleados.

Refleja los valores y la identidad de la empresa

Las nomenclaturas personalizadas pueden reflejar los valores, la misión y la identidad de tu empresa. Por ejemplo, si uno de los valores de tu empresa es la innovación, podrías nombrar a un equipo de desarrollo de productos como “Equipo Innovador” o “Equipo de Creación”.

Facilita la comunicación interna

Al utilizar términos únicos y personalizados, se puede facilitar la comunicación interna dentro de la empresa. Los empleados pueden identificar más fácilmente a qué área o equipo pertenecen y comprender mejor sus responsabilidades y funciones.

Promueve la creatividad y el espíritu de equipo

Involucrar a los empleados en el proceso de creación de nomenclaturas puede fomentar la creatividad y fortalecer el espíritu de equipo. Puedes organizar sesiones de lluvia de ideas donde los empleados contribuyan con sugerencias para nombres de áreas, roles o equipos.

Diferenciación frente a la competencia

Utilizar nomenclaturas originales y personalizadas puede ayudar a tu empresa a diferenciarse de la competencia. Esto puede ser especialmente beneficioso en sectores altamente competitivos donde la diferenciación es clave.

¿Te sientes listo(a) para crear tu nomenclatura?

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Nos leemos la próxima semana, recuerda que arrancaremos con el apartado de organización.

Keep Growing,

Daniela Blank.

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