Escuela Sistémica de Milán

Daniela G
2 min readDec 2, 2016

--

Para comenzar considero importante resaltar la creatividad de los compañeros al exponer su tema a manera de noticiero, esto modificó la dinámica de la clase y me atrevería a decir ayudó a que les pusiéramos más atención.

Ahora bien, entrando en la escuela de Milán

La escuela de Milán se desarrolló en la década de 1971–1980 a través de las investigaciones del equipo formado por Mara Selvini, Prata, Boscolo y Cecchin. Al finalizar esa década, el equipó se disuelve en dos: Mara Selvini y Prata permanecieron juntas algunos años más; Boscolo y Cecchin crean otro Instituto.

La escuela de Milán utiliza los siguientes métodos:

CONTRAPARADOJA: técnica de intervención con un doble mensaje, prescribe la secuencia lógica relacional que ha sido connotada positivamente.

CONNOTACIÓN POSITIVA: mensaje por medio del cual los terapeutas comunican a la familia que su problema es lógico y significativo dentro de su sistema.

RITUALES: prescripciones que buscan cambiar las reglas del mito familiar, se entregan por escrito y deben ser leídas por los miembros de la familia en un horario, lugar y momento específico el cual es designado por el cuerpo terapéutico con anterioridad y cautela.

VISIÓN UNILATERAL: se centra en el proceso terapéutico y el papel de los terapeutas como parte del sistema

Con bases teóricas psicoanalíticas como parte de su formación inicial, estos autores fueron desarrollando una serie de premisas y postulados encaminados a la formación de la Terapia Sistémica Familiar. Premisas y postulados que correspondían a las necesidades contextuales en las que se desenvolvían.

Dentro de esta modalidad terapéutica adoptan los principios de hipotetización, circularidad y neutralidad, fundamentales para el desarrollo de la sesión. Las técnicas que desarrollan para el proceso con las familias son el interrogatorio circular, las preguntas circulares, preguntas hipotéticas y la connotación positiva. Se le estudia considerando los tiempos interactivos de sus miembros en los diferentes horizontes: presente, pasado y futuro. El diálogo del terapeuta ofrece más de un punto de vista, sin indicar cuál es el más adecuado, así la historia contada se hace multifocal y se libera de causalidad. Se crea un contexto dentro del cual la familia escribe de nuevo su historia, según sus propias opciones personales. Da un cambio de estudio de pautas de relación a las premisas y mitos familiares y la intervención se dirige a la co-construcción de las mismas.

--

--