El COVID19 pone a prueba la capacidad de los hospitales del mundo y se vuelve trascendente tener números actualizados sobre la infraestructura hospitalaria de México por la proporción de enfermos que necesitan atención médica ambulatoria, hospitalización o una sala de cuidados intensivos (hasta el momento se maneja aprox. 85%, 15% y 5% respectivamente, ver Global Health Institute, Harvard).
Las autoridades federales han informado sobre la capacidad hospitalaria del país: número de instalaciones, número de camas y equipo médico. La buena noticia es que se habilitan instalaciones de la SEDENA, SEMAR y otras instalaciones públicas al plan de atención, la mala noticia es que nuestros números han sido bajos por décadas.
Nos hemos mantenido entre 1 y 1.7 camas de hospitalización por cada 1,000 habitantes desde 1990. Como referencia, Alemania reporta 8 camas por cada 1,000 habitantes. Italia, uno de los países más afectados por el COVID19, reporta 3 camas hospitalarias por cada 1,000 habitantes.
En esta publicación se va a dimensionar la Capacidad Hospitalaria en México en tiempos de COVID19 con base en:
- Número de Unidades Médicas (UM)
- Número de camas hospitalarias y número de camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI)
- Porcentaje de ocupación de las UM en condiciones normales
- Distribución geográfica de las UM y las camas hospitalarias
- Número de Unidades Médicas (UM)
En México hay en total 33 mil Unidades Médicas (UM) en operación con diferentes niveles de atención: primer, segundo y tercer nivel de acuerdo con la base de datos: Clave Única de Establecimientos de Salud (CLUES [1]). Las UM de primer nivel (85.5%) se caracterizan por ser de consulta externa sin capacidad de hospitalización, por ejemplo, un consultorio público del IMSS o un consultorio privado de medicina general.
Por otro lado las UM de segundo y tercer nivel (14.2%) tienen camas para hospitalización en diferentes especialidades médicas. En esta categoría se encuentran unidades públicas como el Hospital General de la CDMX o unidades privadas como el Hospital Ángeles Lomas.
Si bien las UM de primer nivel no estarían equipadas para hospitalizar casos complicados de COVID19, son muy importantes, ya que pueden filtrar y referenciar a pacientes que necesiten atención hospitalaria a unidades médicas de segundo nivel.
Aún sumando la infraestructura del sector público y el sector privado la disponibilidad puede ser baja por el porcentaje de ocupación que tienen las UM, en este sentido en un momento de emergencia ¿se podría solicitar atención universal en México?
2. Número de camas hospitalarias y número de camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Como se ha mencionado, únicamente las UM de segundo y tercer nivel tienen camas de atención hospitalaria. Las instituciones que tienen un mayor número de camas de hospitalización y camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) son la Secretaría de Salud y el IMSS.
Si consideramos tanto las camas en instituciones públicas como en las privadas tenemos un total de 126 mil camas hospitalarias en el país y poco menos de 4 mil en la UCI.
Para dimensionar físicamente, la unidad médica que tiene el mayor número de camas en México, es el Hospital General de la SSA en la CDMX con 836 camas de hospitalización distribuidas en distintas especialidades y 64 camas en la UCI.
Mundialmente hay un énfasis en la cantidad de camas dentro de la UCI, ya que cuentan con el equipo médico necesario para atender a la proporción de casos confirmados de COVID19 más graves y que requieran cuidado intensivo (se estima 5% del total de casos confirmados).
Si bien tenemos un número aproximado de 126 mil camas hospitalarias en el país es necesario también dimensionar ¿Cuántas de estas camas están libres en promedio diariamente?
3. Porcentaje de ocupación de las UM
No existe una plataforma o una base de datos (pública al menos) programada para compilar y consultar la ocupación de las UM y tener una idea de las camas libres que hay diariamente en el país. Sin embargo, es posible estimar la ocupación de una UM de manera indirecta con el indicador de ocupación hospitalaria que se construye con los días de estancia de los pacientes en un año[2] y el número total de camas en la unidad médica (ver fórmula).
En el caso del Hospital General en la CDMX se estima un 81% de ocupación hospitalaria. De las 836 camas de hospitalización que tiene en operación, habría 157 camas libres en promedio diariamente. Si suponemos un porcentaje de ocupación igual para la UCI que tiene 64 camas, quedarían libres 13 camas en promedio dentro de este hospital.
De acuerdo con la Dirección General de Evaluación del Desempeño (DGED); el porcentaje de ocupación máximo oscila entre 85 y 90%; la recomendación es tener 15% de reserva en la UM. En promedio las UM que reportaron datos tuvieron un 77% de ocupación estimada, si suponemos que la ocupación promedio de todas las UM públicas y privadas es de 80%, de 120 mil camas hospitalarias tendríamos disponibles 24,000 camas.
No se puede negar, en caso de un incremento abrupto de la tasa de contagio, el número de camas disponibles puede ser bajo en el momento de mayor necesidad. Como se menciona al principio de la publicación, México ha tenido de 1 a 1.7 camas de hospitalización por cada 1,000 habitantes desde 1990 (Salinas, Zedillo, Fox, Calderon y hasta ahora AMLO).
En este escenario la pregunta es ¿Qué capacidad se tiene para escalar el sistema hospitalario en tiempos de COVID19?
En el informe del 23 de marzo del 2020, las autoridades hacen público que se suman al plan de atención las instalaciones médicas de la SEDENA, SEMAR y otras instituciones públicas. Por parte del sector empresarial se han hecho donaciones económicas y de instalaciones, por ejemplo, Grupo México ha puesto a disposición del gobierno una instalación médica con 60 camas que será operada por la SEDENA en Juchitán, Oaxaca. El número de camas disponibles aumenta, esperemos que sea suficiente.
4. Distribución geográfica de las UM y las camas hospitalarias.
La distribución geográfica de los servicios de salud es crucial para el plan de atención. Las UM de primer nivel están dispersas en el territorio, es el servicio médico al que tiene mayor accesibilidad la población, como se ha mencionado, en estas unidades se podrán identificar y referenciar casos con necesidad de hospitalización.
Por otro lado, las UM de segundo y tercer nivel están concentradas en las zonas urbanas. En el mapa se muestra la distribución territorial de las UM en los tres niveles de atención. El tamaño de los puntos es con base en el número de camas hospitalarias que tienen las UM.
Ya que la mayor concentración de UM con camas de hospitalización se encuentra en las zonas urbanas, es importante reducir los tiempos de traslado de aquellos casos que requieran hospitalización desde zonas rurales.
La identificación de zonas con mayor vulnerabilidad es indispensable para las autoridades y la población. Por ejemplo, los municipios de México que tienen un porcentaje mayor de personas con 65 años y más, y también aquellos municipios donde hay un mayor porcentaje de personas con enfermedades crónicas, hipertensión, obesidad y otras condiciones que aumentan la vulnerabilidad ante el COVID19.
Conclusiones
Sobre las unidades médicas públicas y privadas, es necesario conocer la estrategia que sumará los esfuerzos de ambos sectores en el combate contra el virus. Urge conocer los términos de cooperación entre los servicios públicos y privados en beneficio de la población afectada ante una sobre ocupación de las UM.
En cuanto al número de camas hospitalarias y el porcentaje de ocupación de las UM, en este momento la prioridad es monitorear las acciones para el escalamiento del sistema de salud, ¿Cuántas camas se suman a la contingencia? ¿Cuánto personal de salud? ¿Cuántas instalaciones?. El buen funcionamiento de la red del sistema de salud no sólo depende de procesos médicos sino también administrativos y de logística.
Con respecto a la distribución geográfica, la mayor concentración de UM de segundo y tercer nivel en zonas urbanas puede generar traslados de población desde zonas rurales con menor accesibilidad a los servicios hospitalarios y a las pruebas de laboratorio. Para esta contingencia es necesario tener una estrategia para reducir el impacto de la barrera geográfica y económica entre las UM y aquellos que necesiten atención hospitalaria en zonas menos urbanizadas.
[1] La base está disponible en el sitio de la Secretaría de Salud y actualizada en febrero de 2020.
[2]La base de datos es con corte a 2017, por el momento es la última actualización.
