Historias del barrio: escuela primaria “Pichique lig maicoño”
El cráter o zanjón es un cóctel de enfermedades, animales muertos, ratas y cuyo desprendimiento de gases nocivos para la respiración y olores insoportables en verano empobrecen las condiciones de salud de los vecinos del barrio, que tienen sus hogares adyacentes al lugar.
El cráter sigue creciendo y renovándose, haciéndose cada vez más notorio, creando su propio microclima y entorno social, donde chicos y chicas nacen en sus inmediaciones, pasan su infancia, adolescencia, juventud y siguen allí mismo o moviéndose a otro lugar, si las posibilidades de la vivienda se concretan.
Se vuelve difícil concebir que tal vez los vecinos se hayan adaptado a las condiciones mencionadas. Ésta es la visión cargada de impresiones con la construimos la experiencia de investigación.
Por ello seguimos una vieja y querida postura de quienes viviendo con poco son felices igual y nos propusimos indagar en las historias posibles que fueron abriéndose paso. A partir de aquí, nos preguntamos: ¿qué cosas malas o buenas quedan en el recuerdo de los habitantes del barrio en torno al basural? ¿Qué puede contar la gente? ¿Qué historias se unen para ser fuentes y voces narrativas a la misma vez?
Escuela primaria nº 357, “Pichique lig maicoño”
La escuela nº 357 fundada en el 2002 en barrio Nuevo recibió el nombre mapuche “Pichique lig maicoño” que significa “pequeñas palomitas blancas”. Además de funcionar como una de las tantas instituciones educativas públicas de enseñanza primaria de la cuidad, albergando a más de 400 chicos, con el correr de los años ha construido una identidad propia que tiene que ver con el cuidado medio ambiental, pues la realidad social del lugar donde se asienta cruza muchos de sus aspectos.
Una nota del diario Río Negro web, de junio -2016- describe una investigación escolar realizada por los propios alumnos, que brinda un acercamiento informativo a la situación con diversos datos relevantes:
· Claudia De Nápole, vicedirectora de la Escuela 357: “Con los chicos de séptimo que egresaron hicimos un informe para un periódico escolar y ahí fue donde saltó el tema y todo lo que implica. En la salita de Salud nos dijeron que son muchísimos los problemas respiratorios en el barrio porque allí se quema basura todo el tiempo. Los que tienen asma la pasan peor, y también problemas de piel”.
- Elizabeth Melo y Teresita Ceballos, maestras de la 357: “Van a jugar algunos; a juntar cosas para vender otros. Sacan comida, ropa y hay otros que hasta lo usan para ‘relaciones amorosas’ o para ir a drogarse. Se esconden los que roban. Es terrible. Hace años venimos pidiendo que alguien haga algo pero parece imposible erradicarlo”.
- Además otros datos que vinculan la problemática del basural con la realidad social de los niños que asisten a la escuela:
- “Vamos y preguntamos por qué no están asistiendo, a veces son varios hermanos, y comprobamos que estén bien”, cuenta Teresita.
- “Hay veces que bañamos y cambiamos a los chicos. Lamentablemente hoy se ve mucha necesidad, pero no solo material, sino falta de cuidados por parte de los adultos, una infancia muy vulnerable. No hay cuidado de lo más mínimo, ni alimentación, higiene, y notamos que los niños necesitan acompañamiento, amor. Pero hay que entender que son familias muy vulnerables también”, opina la vicedirectora del establecimiento”.
Claudia Di Napole, “No alcanza con que nosotros trabajemos el medio ambiente para superar la contaminación terrible del barrio”
A partir de esta información decidimos ir directo a la fuente. Entrevistamos a la vicedirectora del establecimiento, Claudia Di Napole y pudimos conocer como la salud de los habitantes de Barrio Nuevo, en especial la de los más chicos se relaciona directa o indirectamente con las enfermedades que acarrean los desechos en el zanjón. Hace un tiempo atrás que un grupo de docentes de la Escuela primaria nº 357 ubicada en Barrio Nuevo llevó a cabo una investigación con los niños y niñas que menciona la nota del diario.
La vicedirectora, Claudia Di Napole comentaba que:
“el tema del cuidado del medio ambiente es algo que nos atraviesa mucho en la escuela y se trabaja permanentemente”.
“La problemática del zanjón no solo requiere que se eduque en el cuidado del medio ambiente a los alumnos, sino de decisiones políticas que inviertan en el lugar para taparlo y convertirlo en plazas, canchas de fútbol o viviendas”.
Decisiones políticas
La docente dio su percepción acerca del accionar estatal:
“Sabemos que tuvo mucha repercusión el haber salido en el diario Río Negro, y a partir de eso el municipio comenzó a dar charlas sobre el cuidado del medio ambiente, pero bien sabemos que las charlas sobre juntar los papelitos y no tirar basura no corrige el problema ambiental del zanjón, ¿hay que educar? Si hay que educar, pero hay que tomar decisiones de fondo. El zanjón es un inmenso cráter, hay que invertir muchísimo dinero para rellenar y luego hacer obras que beneficien al barrio”.
¿Como se transmite la contaminación?
“Las mascotas de ellos van al basural y luego van a sus casas, los niños juegan en el basural, que no solo es un lugar contaminado, también es un lugar peligroso. Si vos caminas para adentro, hay lagunas estancadas que tienen animales muertos. Eso bordea la calle Defensa que en todo su largo también bordea el zanjón”.
¿De donde viene ese gigantesco zanjón?
“Tampoco sabemos muy bien el origen de ese pozo, cómo se hizo ese pozo, lo que sí no es algo natural, lo más lejos que llegaron los nenes investigando es que hace muchos años atrás se sacaba arena para una empresa. Hay calles hechas por la gente dentro del zanjón, que los chicos del barrio Quinta 25 –que queda al otro extremo- utilizan porque si no tendrían que dar toda una vuelta. El transporte público no llega hasta la Quinta 25, por eso el uso de caminos alternativos dentro del zanjón”.
Producción comunicativa de la Escuela: la necesidad de hacerse escuchar
Desde hace dos años (2014) los chicos se animaron a editar un periódico propio de la escuela, donde publican todos los artículos de investigación relacionadas a la contaminación del barrio, otras realidades sociales y notas de color sobre las actividades escolares.
El periódico escolar llamado En Redacción, sale una vez por año con el valor de $5 y es redactado conjuntamente por los distintos grados de la escuela (con el asesoramiento de personal del Diario Río Negro). Se convirtió en una fuente privilegiada, ya que son los mismos chicos y chicas del barrio que los que conviven en ese espacio físico todos los días.
Con la seriedad propia de una investigación que conjuega la descripción cualitativa con estadística relevante, construyen su realidad.
Las notas comunican una fuerte preocupación hacia la contaminación que se vive por el basural, pero no solo por ser un foco infeccioso, también se alerta sobre la peligrosidad para las niñas y niños por ser un campo abierto, obviamente sin iluminación, donde han ocurrido casos de violación y demás hechos delictivos.
Con el titulo “Continuo reclamo de los vecinos por la acumulación de basura”, dan a entender la disconformidad con las autoridades municipales por la falta de políticas que den soluciones definitivas a la situación ambiental y social del zanjón.
El esplendor de risas inocentes convertidas en prosa periodística rompen una mirada negativa que se construyó del barrio.
Algunas estadísticas de la investigación
Los alumnos hicieron una serie de entrevistas y encuestas a los vecinos, éstas se vuelven en un relato de importancia.
“Compartiendo observaciones del zanjón” es el título de la nota que refiere a la charla que tuvieron con el médico Renato Gazzaniga de la sala de primeros auxilios del barrio, quien les comento algunas observaciones relacionados a las enfermedades que conlleva la basura en el zanjón y que materiales se encuentran allí.
Sobre las enfermedades, responde que se encuentran “muchos casos de sarna y cada tanto, sobre todo en el verano, gastroenteritis”.
Uno de los estudiantes le preguntó sobre la contaminación que traen los perros, mascotas de las familias aledañas:
“Si, pueden contagiar sobre todo de parasitosis, ya que se los toca, estos animales hacen sus excrementos en los patios de las casas, luego los chicos van a jugar y se les pega los parásitos en la ropa, en el calzado y en las manos, allí comienza el contagio”
Aquí se puede visualizar el trabajo de los y las estudiantes en el periódico, lo que está marcado con rojo es la nota comentada más arriba. Abajo el circulo muestra las estadísticas sobre la basura que se encuentra. De izquierda a derecha los chicos encontraron: botellas, bolsas, vidrios, latas y otro tipo de basura.
¿Que opinan los vecinos?
En uno de los continuos trabajos que forman parte de la investigación, los alumnos de 5to grado realizaron una encuesta a 24 familias que viven en las cercanías del zanjón, la mayoría ven a el zanjón como un problema de salud, los demás como un problema ambiental.
Es posible analizar como en realidad lo ambiental y la salud están estrechamente relacionadas: el 60% considera que el zanjón afecta sus vidas, el 30% lo ven como un problema medioambiental y un 10% dijo no sentirse afectado.
Eso sí, todos los entrevistados están de acuerdo en transformar el lugar y propusieron ideas como “hacer un barrio, rellenarlo, hacer un espacio verde, juntar la basura y darle terrenos a la gente”.
La postura de los vecinos y vecinas del barrio, respecto a la problemática, son la verdadera voz de quienes viven al costado de la basura.
La investigación de los alumnos tomo forma artística a través de un cortometraje realizado por los propios chicos y chicas de 7mo grado con colaboración técnica de estudiantes de cine del IUPA (Instituto Universitario Patagónico de Artes). La producción audiovisual ganó un concurso del programa del Ministerio de Educación y Derechos Humanos de la provincia de Río Negro, “A rodar escuela” que con un fin pedagógico trata sobre temáticas vinculadas a los derechos sociales.
Se trata de una ficción que articula en su discurso la problemática ambiental del zanjón con la venta y consumo de drogas en el barrio. Fue premiada Durante el fin de semana del 29 y 30 de octubre en el marco del 3º Festival de cortometrajes de “A Rodar Escuela Rio Negro”.
Historias del barrio seguro hay muchas, historias de indignación y denuncia, historias de sueños y esperanzas, historias que se vuelven en relatos de un tiempo y un lugar.
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