Los números (y otros detalles) de Dealflow.es

Jaime Novoa
11 min readJan 2, 2020

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Aunque no estudié periodismo ni se me pasó nunca por la cabeza en mis años de estudiante dedicarme a la profesión, lo cierto es que si echo la vista atrás me doy cuenta de que ya desde pequeño me gustaba juntar letras.

Para mí el periodismo -o el blogging como se decía por entonces- fue la forma más fácil y directa para entrar en el mundo de la tecnología. Allá por el año 2009, recién terminada la carrera y cuando uno tiene que tomar decisiones sobre a qué quiere dedicarse, era ya plenamente consciente de mis limitadas habilidades y de que dedicarme a escribir historias podía ser un método bastante eficiente para entrar en el mundo de la tecnología-internet-digital, o como se le quiera llamar, que es precisamente a donde quería llegar.

Más de diez años más tarde, lo que empecé a hacer entonces e hice durante bastante tiempo, acabó desembocando en una llamada de Iñaki Arrola y la entrada en K Fund, donde estoy desde junio de 2016.

Sin embargo, y aunque la inmensa mayoría de mi tiempo se lo dedico a encontrar nuevas compañías en las que invertir y a intentar ayudar a las que ya tenemos en el portfolio, sigo teniendo una relación bastante cercana a la producción de contenidos, ya sea con todo lo que hacemos en K Fund como con Dealflow.es, que es una humilde newsletter que con el paso del tiempo se ha convertido en un side-project bastante majo en todos los sentidos.

Con este post lo que pretendo es explicar y aportar datos sobre lo que es hoy en día Dealflow.es y cosas que he aprendido en este camino que comenzó hace más de tres años.

Novobrief: del blog a la newsletter

Así era novobrief.com

Después de más de dos años en WeblogsSL y recién mudado a Madrid, en 2015 tomé la decisión de dejar mi trabajo como blogger para liarme la manta a la cabeza y lanzar Novobrief: un blog en inglés sobre el mercado español de startups y de inversión.

La idea de lanzar Novobrief llevaba años en mi cabeza, pero el detonante para lanzarme a la piscina fue conocer la existencia de otros medios en inglés que cubrían mercados europeos de startups como Francia, Alemania o Escandinavia, donde el inglés no era su principal lengua.

Con Novobrief quería demostrarme a mí mismo que podía escribir en inglés con soltura y que podía construir un negocio alrededor de los contenidos. Lo primero creo que lo conseguí. Lo segundo está claro que no.

El único negocio que generé desde Novobrief fue un patrocinio de Carto (gracias Eva y Sergio!) del blog y la -por entonces- rudimentaria newsletter, de €350. Con el paso de los años y consciente ya de que aquello no generaba caja, tomé la decisión de cambiarme a Tech.eu y unos meses más tarde me llamó Iñaki para incorporarme a K Fund.

Novobrief en barbecho

Si hay una cosa que tenía clara con la entrada en K Fund es que no podía seguir haciendo el mismo tipo de piezas y artículos. Ahora tenía acceso a muchísima información de muchas empresas, incluso algunas sobre las que había escrito antes, y ponerme a escribir artículos podía ser un conflicto de interés enorme para mí y un problema en el que no me quería meter.

Así que Novobrief como blog quedó aparcado durante varios meses, hasta que en 2018 lo vendí a un grupo editorial colombiano/americano.

Sin embargo, por entonces ya había empezado a trastear con una idea: un producto/medio -chámalle como queiras- que agregase información que otros publicaban sobre el ecosistema español de startups.

Mi razonamiento era que el mercado español de tecnología era (y es) pequeño, y que por lo tanto no hay un volumen suficiente de noticias todos los días para mantener a flote un medio de comunicación (hoy sigo pensando parecido, aunque con matices). Dadas las circunstancias, pensaba que una newsletter semanal de resumen/agregación de contenidos podía ser una buena idea.

Y eso fue lo que hice: me di de alta en Mailchimp y empecé a enviar todos los lunes una newsletter en la que no solo incluía noticias propias, sino también las de otros periodistas y medios de comunicación.

Hoy en día la newsletter la reciben más de 6.000 personas todos los lunes con unos ratios de apertura y de clicks bastante interesantes, y Dealflow.es se ha acabado convirtiendo en un side-project que en 2019 me ha generado más de €12.000 en ingresos publicitarios y que solo me requiere 2 o 3 horas de mi tiempo a la semana.

Estadísticas de las últimas 15 newsletters enviadas desde Dealflow.es

En el proceso, estas son algunas cosas que he aprendido. Ojo! No pretendo dar lecciones de nada, sino simplemente comentar cosas que he hecho y que me han pasado por si pudiesen ser de utilidad para otros.

Find a niche, get rich

Hay por ahí un refrán que dice algo así como que si encuentras un nicho, te puedes hacer rico. Yo obviamente no estoy en ese camino, pero sí que creo que hay determinados nichos que se prestan muy bien a algunos tipos de productos.

Después de la experiencia de Novobrief yo tenía claro que soportar un medio de comunicación sobre startups españolas era muy jodido, a pesar de que había interés en seguir ese tipo de información. Pero, ¿y si en lo que había fallado era en el formato de dicho producto?

El tiempo me ha dado la razón y creo que la newsletter en su formato actual es perfecta para la mayoría de las personas que la leen. Va al grano, se lee en pocos minutos y te da la opción de quedarte con los titulares o de clickar para profundizar.

Curación de contenidos > contenidos originales

Esto obviamente es solo mi caso, pero si hay algo que me gusta especialmente de la newsletter es que, frente a lo que pueda parecer, construirla se ha convertido en un proceso muy eficiente para mí. Es algo así:

  • Todas las mañanas tengo la costumbre de leer las noticias (en general, no solo de startups) mientras desayuno. El desayuno es sagrado para mí!
  • Aquellas noticias que pueden entrar en la newsletter las guardo en favoritos
  • El domingo mientras desayuno monto la newsletter en 1–2 horas

No hay mucha más chicha y es un proceso bastante artesanal.

Algunas veces he pensado en crear contenidos originales, en dar opiniones más largas sobre lo que se incluye en la newsletter o en probar con otro tipo de posts, pero la verdad es que creo que la curación/agregación manual de contenidos es con lo que más disfruto hoy en día y algo que además soy capaz de hacer de una forma bastante ágil.

Si hacer la newsletter me llevase 10 horas a la semana, seguramente ya me hubiese cansado.

Complicarse lo menos posible la vida

El tema de la eficiencia lo he llevado también a la forma de la gestión de la newsletter.

Hoy en día las herramientas que utilizo para crear y enviar la newsletter son las siguientes:

  • Twitter y RSS (Reeder) para marcar contenidos como favoritos y Notion para guardar otro tipo de enlaces que yo me encuentro
  • Mailchimp para montar las newsletters y enviarlas
  • OctoberCMS y varios plugins de Mailchimp para gestionar Dealflow.es y para que cada vez que se envía la newsletter, esta salga publicada en portada
  • Google Sheets para llevar la contabilidad y planificación de sponsors
  • Email para toda la comunicación con patrocinios

Hubo un tiempo en el que me puse a probar herramientas más complejas como CRMs, herramientas de contabilidad y otras muchas cosas para la gestión de la newsletter, pero no tardé en darme cuenta de que no me hacían falta y que con lo anterior era más que suficiente.

Toda la comunicación con los posibles patrocinadores ocurre por email, los reportes de los patrocinios también se envián por email (muerte al PowerPoint) y todo lo intento hacer de la forma más sencilla posible.

¿Los patrocinadores de dónde salen?

Como decía antes, Dealflow se ha convertido en un hobby que me ayuda a estar informado de lo que pasa en mi ámbito profesional y que, además, monetiza (toco madera) bastante bien.

En 2018 facturé un total de €5.675, 2019 se cerró con €12.150 facturados y 2020 pinta por ahora bastante bien.

La idea de ofrecer a empresas la posibilidad de patrocinar las newsletters me parecía lógica por dos motivos principales: el primero porque creía que lo que hacía y hago tiene cierto valor, y el segundo porque me parecía que podía haber empresas de producto y servicios interesadas en llegar a esas 6.000 personas que están apuntadas. Calidad de suscriptores por encima de cantidad, siempre.

Hasta ahora nunca he salido activamente a ofrecer los patrocinios a otras empresas. Por decirlo en jerga marketiniana, todo lo que he hecho por ahora ha sido inbound, ya sean empresas que reciben la newsletter u otras que se la encuentran y que quieren patrocinarse.

Como decía antes, toda esta gestión la hago por email de tal forma que me quita muy poco tiempo y evito tanto crear (yo) como leer (los patrocinadores) engorrosos PowerPoints y demás materiales que en el fondo, y para lo que yo hago, aportan muy poco valor.

Quick tip: una cosa que me fue muy útil al principio de la newsletter para conseguir nuevos patrocinadores fue buscar la forma de que ninguna newsletter pareciese vacía. Si en una semana no tenía patrocinador o si se habían producido cambios de última hora, ofrecía ese patrocinio gratis a las startups del portfolio de K Fund. Otro perk para que invirtamos en tu empresa desde K, un poco de publicidad gratis nunca viene mal ;)

Creo que esto ayudó mucho en su momento a animar a otros patrocinadores a apostar por la newsletter. Hoy en día, por suerte, estas pequeñas trampas ya no hacen falta!

La fijación de precios

Los primeros patrocinios los cobraba a €50 la newsletter y hoy en día estoy cobrando €450. Encontrar el precio adecuado no me ha resultado fácil, pero me lo he pasado muy bien haciéndolo.

Es y ha sido cuestión de hablar con clientes antes y después de los patrocinios, de pedir feedback y -para qué mentir- de a veces enviar una propuesta el doble o triple de cara que el resto para intentar encontrar así el precio/valor techo.

El reporting

Desde que Antonella Briatore de IronHack me lo recomendó, un par de semanas después de cada patrocinio envío un email a la empresa (simple, sin demasiada complejidad) con datos sobre el performance que ha tenido la campaña.

Este email a veces incluye datos interesantes sobre el performance del patrocinio y otras veces aporta información menos accionable.

Sea como fuere, creo que es lo mínimo que puedo hacer cuando una empresa o una persona apuesta por la newsletter y decide invertir parte de su dinero y tiempo en ella. Además, me es de gran ayuda para recoger feedback de los patrocinadores y poder mejorar con el paso de las ediciones.

Datos personales y encuestas

Si te has dado de alta en algún momento en la newsletter quizás te has dado cuenta de que nunca pido datos personales de los suscriptores. Lo hago así a propósito y por la sencilla razón de que me parecen datos privados que no necesito.

Lo que sí que hago todos los años en Navidades es enviar una encuesta a los suscriptores con una serie de preguntas para conocer mejor quiénes sois, dónde trabajáis y, sobre todo, para que me deis feedback de lo que os gusta y lo que no os gusta de la newsletter.

Esto último es para mí, y con mucha diferencia, lo más valioso de la newsletter y a partir de varias cosas que he recibido en las últimas semanas ya estoy pensando en cambios a introducir.

Nueva marca y rediseño

Varias personas me han dado feedback sobre el diseño de la newsletter (que es ligeramente diferente al que utilizaba en Revue) y que probablemente introduzcamos en algún momento.

Aunque no lo he comentado hasta ahora en este post, el nombre y diseño de la newsletter cambió a mediados de 2019 gracias a la ayuda de Sensa. Con la venta de Novobrief.com me apetecía darle un cambio de aires a la newsletter y un poco más de estructura.

Hoy en día la newsletter se sigue enviando como siempre y todos los suscriptores la reciben en su bandeja de entrada los lunes hacia las 10:00 de la mañana, pero con el rediseño la newsletter también se publica en Dealflow.es

¿Por qué? El motivo principal para construir la web de Dealflow era el de ofrecer una forma eficiente de consultar newsletters pasadas. Me he encontrado muchos suscriptores en los últimos años que me decían que de alguna forma u otra consultaban ediciones pasadas de la newsletter para conocer mejor a empresas o personas.

Desde el cambio a Dealflow.es (gracias Walter por el dominio!), cualquier persona que visite la web puede utilizar el motor de búsqueda (haciendo click en la lupa o simplemente pulsando la tecla F en el teclado) para buscar cualquier cosa. Y la verdad, y no es porque lo diga yo, es que funciona bastante bien….

Ejemplo con resultados de búsqueda de Factorial, otra empresa del portfolio de K :)

El inglés

Otra cosa que aparece en el feedback de los suscriptores todos los años es el tema del idioma de la newsletter.

Si los contenidos a los que se enlazan normalmente están en español, por qué hacer la newsletter en inglés?

Hay varias razones:

  • Si trabajas en este sector, es muy probable que sepas leer y entiendas bien el inglés.
  • Más de un 10% de los suscriptores están fuera de España.
  • Dentro del 80 y algo por ciento que leen la newsletter desde España, estoy seguro de que un % majo son personas extranjeras.

En resumen, hacerla en inglés me parece más inclusivo que hacerla en español.

Dealflow como fuente de dealflow

La palabra dealflow significa muchas cosas y en el mundo de la inversión se refiere al flujo de startups y oportunidades que un fondo recibe para analizarlas y, quizás, invertir en ellas.

La mayor parte de mi tiempo en K la dedico a buscar nuevas compañías en las que invertir y a gestionar las que tenemos en la actualidad en el portfolio.

Dealflow.es, la newsletter, es muy útil para lo primero.

No tengo los números, pero han sido ya varias las compañías que a partir de Dealflow.es nos han escrito para analizarlas en K y ojalá que el ritmo no decaiga.

Otra utilidad de Dealflow.es relacionada con K Fund es la relación con los fondos internacionales. Para nosotros, como fondo, es muy importante tener una relación lo más fluida posible con otros fondos internacionales más grandes, y han sido ya bastantes las ocasiones en las que suscriptores que trabajan en fondos europeos me han escrito para pedir intros o para conocer en general cómo está el sector en España.

El futuro de Dealflow

El futuro de Dealflow es el presente. No tengo en mente grandes cambios a introducir y estoy contento con cómo está funcionando.

De vez en cuando se me pasan por la cabeza algunas ideas, pero acabo desechándolas porque no quiero complicar demasiado las cosas y quiero que enviar Dealflow siga siendo igual de eficiente y ágil que como hasta ahora.

Este proyecto no tendría sentido sin los suscriptores. Así que si ya lo eres o estás a punto de serlo, graciñas mil!

(Si tienes alguna pregunta en concreto sobre la newsletter o cualquier tema que se le parezca, escríbeme a jaime@dealflow.es y encantado de ayudar si puedo!)

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