¿Cómo aplicar pensamiento de diseño a la nueva normalidad después de COVID-19?
Cinco estrategias para navegar los nuevos tiempos y reinventarse.
¿Qué estaba haciendo usted cuando empezó la pandemia en su país? Esta pregunta se convertirá en una especie de hilo que teje las conversaciones humanas del futuro. La cultura viva ya empezó a integrar a COVID-19 en todas las expresiones artísticas, mientras se empieza a diseñar una nueva normalidad.
De acuerdo con recientes hallazgos científicos el pensamiento humano se construye como un sistema de navegación. Según Bellmund conforme la persona percibe se crean mapas mentales para organizar la experiencia, denominados espacios cognitivos.
Además, la forma en la que se crea una memoria surge de la especie de coordenadas activadas por células espaciales y de navegación.
En estas semanas el sistema de navegación de la humanidad se ha encontrado con una disrupción global de tal magnitud que provocó algún grado de alteración permanente. Ahora aparece el nuevo reto: navegar la nueva normalidad. La nueva normalidad va a incluir desde cambios menores hasta una reinvención.
Para navegar la nueva normalidad es importante co-crearla desde la armonía interna y la plasticidad. Ante tiempos extraordinarios y exponenciales es posible adaptar cinco acciones de pensamiento de diseño para estimular la co-creación de un renovado capítulo de vida.
- Practicar auto-empatía
En estas semanas abundan las ocasiones para sentir empatía. Ponerse en el lugar de personas que han enfrentado lo peor: perder la salud o a un ser querido. La mirada ha estado en las pantallas y el pensamiento en todas partes.
Las exigencias de origen interno y externo consumen parte o toda la energía diaria. Especialmente, si se siente una distancia entre el comportamiento o ánimo propio y el que los demás esperan.
Por lo anterior, la primera estrategia entonces se define como auto-empatía y representa tres acciones: en primer lugar, observarse y reflexionar sobre los sentimientos y actuaciones en estas semanas. Especialmente para encontrar los puntos más altos y más bajos.
En segundo lugar, valorar cuales presiones asumidas podrían gestionarse mejor. Finalmente, demostrar comprensión, consideración y afecto para sí mismo, con alguna actividad específica.
2. Imaginar el máximo bienestar
Definir este reto personal en un escenario de incertidumbre es un proceso de exploración. Este es un buen momento para explorar las fronteras del máximo bienestar. El punto de partida puede ser el tiempo y el espacio.
¿Cómo se podría distribuir el tiempo de un día ideal en su vida? ¿Cuales son los espacios ideales para estimular su bienestar?
Para lograr apuntar al máximo bienestar es necesario estar consciente de los pensamientos espontáneos que saltan con limitaciones o advertencias.
Puede ser que los pensamientos espontáneos sean parte de un sistema de navegación emocional y que guarden coordenadas de afirmaciones recibidas en la niñez o en otra época de la vida. En todo caso, son el principal riesgo, podrían promover el regreso a la vieja normalidad y silenciar los aprendizajes y aspiraciones que han surgido.
Este es el momento para probar un nuevo diseño de día o de vida, que se puede co-crear paso a paso, desde la experimentación.
3. Descubrir intereses y capacidades
Con más tiempo disponible y limitaciones, la creatividad se estimula y surgen posibilidades que estaban a la sombra de la dinámica diaria.
Haga una lista de las nuevas actividades que resultaron más retadoras y las menos retadoras. Para cuales tiene mayor o menor facilidad. La combinación ideal es la actividad retadora para la que tiene facilidad.
¿Cómo se relacionan estas actividades con su máximo bienestar posible? ¿Cómo podría integrar estas nuevas actividades en la nueva normalidad?
4. Reconocer el mínimo bienestar viable
En estas semanas la mayoría de las personas se enfrentaron a pensamientos relacionados con la pérdida de la salud o la vida, ya sea propia o de un ser querido. Millones de personas han tenido pérdidas reales de personas o condiciones.
En este contexto amenazante y crítico, se activan las capacidades para adaptarse al mínimo bienestar viable. Este mínimo es diferente para todas las personas y a pesar de grandes muestras de solidaridad presentes en este periodo, aún no existe la forma de garantizar a todas las personas, el bienestar mínimo.
Por lo anterior, el reto máximo de esta humanidad que vive COVID-19, es acelerar la estrategia para garantizar a todas las personas el bienestar mínimo. Hay experiencias alrededor del mundo como el sistema de salud solidario, el salario mínimo universal o los servicios públicos gratuitos.
Entonces, el mínimo bienestar viable, tanto personal, como para todos los seres humanos, sirve de punto de partida para prototipar el diseño del estilo de vida en la nueva normalidad.
El bienestar máximo personal se alcanza cuando se aspira a un propósito mayor: el bienestar biocéntrico, en el que todas las formas de vida son importantes.
5. Probar la nueva normalidad y reinventarse
Afortunadamente, el regreso total a las actividades acostumbradas no será inmediato. Lo cual presenta la oportunidad de experimentar.
Después de recorrer la auto-empatía, imaginar el máximo bienestar, descubrir intereses y capacidades y valorar el mínimo bienestar viable, resulta más fácil probar.
Probar no significa cambiarlo todo, significa elegir una nueva capacidad descubierta, un espacio ideal o un tiempo especial para que forme parte de la nueva normalidad.
Reinventarse es un proceso cíclico que requiere desaprender, probar, aprender y mezclar.
Reinventarse se refiere a un nuevo enfoque del aprendizaje: el aprendizaje vivo, la capacidad de gestionar el aprendizaje durante toda la vida. Es importante diseñar la propia experiencia de usuario ante la vida.
Este reto planetario puede facilitar que se hagan ajustes para tener una vida más fluida, con mayor balance y armonía.
¿Qué estaba haciendo usted cuando empezó la pandemia en su país? ¿qué desaprendió? En un tiempo, las respuestas que usted ha dado en este artículo tejerán la historia sobre cómo COVID-19 cambió su vida o cómo su vida cambia la de muchos…
Notas:
El sistema de navegación emocional es un experimento mental que hace paralelismo al descubrimiento científico mencionado al inicio del artículo.
Agradezco la guía generosa de mi colega K. Céspedes.
