StartUp Weekend Aerospace Sevilla 2017 — Una visión personal
No se me dan bien los títulos cortos, y además, esto no se merece un título corto ni mucho menos. Se merece un título largo, en negrita, porque este año he sido ganador del “STARTUP WEEKEND AEROSPACE SEVILLA 2017”, aplausos, ovaciones, y un gran cinturon de campeón de los pesos pesados. O algo así.
Como toda buena historia comienza con algo gratis, y es que este año la Singularity University está subvencionando a través de un concurso de ideas las entradas al StartUp Weekend. Así que ellos simplemente te piden que subas tus ideas, tengan o no sentido, y te pagan una entrada de 35€ a un evento en el que te tienen todo el fin de semana en Julio fresquito con aire acondicionado, café, bebidas fresquitas, pizza y comida GRA-TIS. Por la gorra. By the cap. For your pretty face. No es que sea gratis si ganas, es que ahorras en comida, y en aire acondicionado que no está la cosa para bromas con Endesa.
Y yo lo que me dediqué a hacer fue regalar las grandes ideas que pasan por mi mente a diario. Porque yo soy así, porque yo voy por la calle, y se me ocurren mil historias que podrían hacerme rico a mí y a todos los que me rodean, pero no las hago. Porque para qué. ¿Eh? Yo no estoy aquí por la pasta. Yo estoy aquí porque vivir en Sevilla pasando calor es divertido, ¿vivir en Bali? Eso para millenials hombre…
Ideas que van desde cazar y destruir drones ( más de esto luego ), a crear asociaciones de aficionados a tirar globos metereológicos, pasando por recogida de basura espacial con los hermanos mayores de Wall-e.
Total, que empieza un fin de semana de Julio que se presentaba interesante. Mi novia se va a la playa, lugar donde yo deseaba estar cuando tuve que andar por una Sevilla de posguerra, completamente asolada por el bombardeo de calor. Y es que 40º no son para estar de broma, pero el aire acondicionado de EUSA nos acompañaba.
Para el que no haya vivido un StartUp Weekend le recomiendo que vaya a uno, es un fin de semana cuanto menos interesante. Quizás los verticales, como el que yo fui sean los peores, porque te tienes que ceñir a una temática, pero la experiencia es más que positiva.
Así que volviendo a lo que hay que volver, el viernes es el primer día del concurso. Y en general lo que haces es conocer a la gente, y muchos juegos para romper el hielo. En uno de ellos conocí a María, compañera de mi equipo en el fin de semana como experta marketera, en una pizarra se ponen palabras y cada equipo elegido al azar coge tres palabras y tiene que crear una idea de negocio.
Las palabras están entre absurdas y super absurdas, pero yo que soy un tío aburrido cogí tres palabras que juntas más o menos tenían sentido. Y salimos con algo para dormir en un aeropuerto cuando tienes tantas drogas dentro del cuerpo que un perro de la policía se sentaría a tu lado. Y tras una espectacular puesta en escena por mi parte, pasamos a las ideas de verdad.
Hubo de todo, desde minería espacial, a practicar yoga en los aeropuertos, usar drones para apagar incendios, usar drones para transportar cosas, usar drones para… WAIT WHAT!? DRONES!? Una de mis ideas del concurso era especialmente esa, drones, pero no que volasen sobre mí, sino VOLARLOS POR LOS AIRES. Y es que, considero, que los drones son un peligro en manos inexpertas o malvadas, así que presenté mi iniciativa y la llamé “Fuck your drone”, pero aunque salió elegida en el primer filtro no apareció la aclamación popular y multitudinaria que yo habría querido.
Pero en ese momento, tuve la suerte de que a mi lado, en el escenario estaba Jaime. Jaime es un máquina. Y como buen máquina llevaba una idea pensada por su sesuda mente de exprimidor mental. Y fue arriba cuando yo entendí exactamente lo que él intentaba transmitir, no porque no lo transmitiese bien, sino porque yo soy un cabezón.
Jaime quería crear el AirBnb de los drones, o algo así. Un lugar, donde un piloto, pudiera ofrecer su drone, para lo que quisiera. Y, y, Y!!!! COBRARLES UNA COMISIÓN DEL SERVICIO!!!!OH MAY GAD! FRI MONI!
He de decir que yo soy un friki de la ingeniería, y este tipo de historias no me suelen atraer demasiado. En general, lo más divertido para mí es aquellas cosas que incluyen que alguien puede morir, o que ciertas cosas pueden salir ardiendo. No es que yo esté especialmente habilitado para hacer algo con un resultado dicotómico, pero me es más atractivo. Explotar, o morir. Sin embargo, un startup weekend no es un hackaton de ingeniería, y no vas a exprimir el evento si tienes que prototipar algo complicado, así que lo mejor es que aprendas de todo lo que está relacionado con montar un negocio.
Es decir, que no vas a montar un cohete. Pero si le podrías poner un palo a un caramelo y venderlo. Y hacerte millonario y llamarte Mr. Chupa Chups. En Sevilla, los StartUp Weekends suelen acabar con empresas montadas, y una de las empresas que salió de uno de los primeros StartUp Weekend si vende algo que creo que prototiparon ese fin de semana. -> LINK! -> http://www.oblumi.com/es/
En general, sigue el consejo de abajo…
Así que de alguna forma acabé con Elena, Jaime y María en el equipo. Y con dos personas más, de las que no recuerdo su nombre, sinceramente, ni me acuerdo. ¿Por qué no? Pues porque se piraron…
Dejadme seguir con mi historia, si es que seguís leyendo, porque esto está siendo largo de cojones. Montamos un equipo compuesto por seis personas, el más grande de lejos, y el viernes no acabamos de concretar la idea. Estuvimos horas, discutiendo hasta las 11 de la noche que nos echaron de allí.
Por la mañana, en el grupo de whatsapp de nuestro equipo había dos mensajes, de estos dos chavales a los que les había salido algo de última hora y no iban a seguir en el evento. Ok. Muy bien. Genial. ME-JOR! Y de hecho, fue mejor, porque llegamos, concluimos en una idea y el sábado por la mañana ya empezamos a trabajar en dronea.
Dronea es básicamente un marketplace donde los usuarios pueden contactar con propietarios y gente formada en el mundo del drone para alquilar sus servicios. Aunque el servicio original son grabaciones, también había reparaciones, cursos, y todo tipo de historias.
Jaime se curró una investigación de mercado e hicimos numerosas extrapolaciones con datos de dudosa procedencia sobre el mercado BBC español y las grabaciones aéreas de las mismas. Yo me dediqué a lanzar encuestas y llamar a gente del mundillo que conocía de primera mano. Todos, querían aparecer en un directorio que les llevase a clientes, porque todos podían dar más servicios, y les daba igual que nos quedasemos con un parte del pastel si ellos tenían trabajo. WIN WIN WIN!!!! Tenemos interesados.
Elena lanzó encuestas para ver si había gente que pudiera estar interesada en comprar los servicios de los anteriores. Y los hay. Tanto para grabación como para enseñanza. WIN WIN WIN!!!! ¿Puede haber clientes? ¿Dinero?
Entretanto nos reuníamos con los mentores. A mí me gusta que me tiren por tierra las cosas que digo, para venir con más fuerza, encontrarme un sonoro no.
Pero no, no nos lo encontramos. Al contrario, fueron siempre muy positivos, mientras que a otros grupos según nos comentaron les daban candela. Les explicamos la idea, y la base, y parecía sensata. Nos daban indicaciones, como validar el mercado. Lo hacíamos, y de nuevo, todo muy positivo, avanzando todo el rato.
Los mentores fueron geniales, nos enriquecieron todo el rato. Entre ellos había uno de los fundadores de una empresa de recogida automática de fresas en huela ( agrobot ), abogados, emprendedores, gente de marketing, freelances de comunicación, un poco de todo, y todos nos ayudaron. GRACIAS!
El mismo sábado teníamos página web, y todo muy encauzado, María le dio caña a la web y las redes. Las encuestas hechas, llamadas a gente que mostraba interés. Todo validado. Demasiado bonito para ser verdad.
Así que el domingo nos dedicamos todo el día a darle más vueltas a la idea y a preparar el pitch. He de decir, que el fin de semana fue muy rodado porque después de la marcha de los dos compañeros, quedo un equipo muy centrado y con ganas de currar. Elena se montó un kanban, se le notaba que es project manager, y todos a currar. Íbamos haciendo las tareas y todo salió adelante. Y aquí es donde se demuestra lo que es un Startup Weekend y lo que fue mi error inicial, y mi aprendizaje.
Los StartUp Weekend no van sobre las ideas. Las ideas son muy buenas para el día cero, pero las ideas no sobreviven en el tiempo. No duran ni diez minutos, como fuck your drone, no, no duran.
En el SW las ideas no son más que un medio para conectar a las personas que tienen los mismos intereses, las mismas pasiones y quieren resolver problemas parecidos. Son el medio para crear un equipo efectivo. Fin. Las ideas no son importantes, lo que perdura son las personas.
Así que el domingo, ofrecimos una gran presentación en la que nos sobró tiempo para hacer el gilipollas. Y el jurado, nos masacró a preguntas, pero todo bien y divertido. Ojalá nos hubieran hecho más preguntas, pero hay unos límites bastante estrictos de tiempo, y los organizadores los aplican sin ningún tipo de misericordia.
No pensaba que fuéramos a ganar, había otras ideas buenas rondando por ahí. Pero de alguna forma, ganamos. Y no solo el premio del StartUp Weekend, sino el premio del público. De alguna forma, entre los participantes y los que nos vieron, se destiló que durante el fin de semana habíamos tenido buen rollo con todo el mundo, y sobretodo entre nosotros. Entiendo que haya gente que sea competitiva, pero este evento no es para ganar la eterna juventid, es un evento en el que se gana por participar porque lo que se aprende es tuyo, y lo mejor es ayudar porque serás ayudado. De esa forma lo vimos, y de esa forma fuimos a pasárnoslo bien con todos.
Recomendaciones para el StartUp Weekend, si quieres participar.
- El primer objetivo es pasárselo bien con todo el mundo. Conocerás a gente interesante, y aprenderás cosas interesantes si vas con el buen rollo por bandera, ir de otra forma es contraproducente.
- Ábrete a las ideas de los demás, no te aferres a las tuyas. Las ideas son ideas, si tu idea te fuera a hacer multimillonario no estarías aquí, estarías en un paraíso fiscal. Aquí se viene a hacer equipo, las personas son lo importante, porque harán que las ideas evolucionen y se enriquezcan.
- Coge tus ideas, que no son más que humo, y conviértelas en vapor de agua. Si consigues que llueva mejor. Esto es, que hagas que tus ideas entren en movimiento de alguna forma. Prototípalas como sea para que la gente las vea, llegar al domingo con un prototipo, un producto mínimo viable te ayudará a ganar.
- Valida tus ideas. Si crees que hay un mercado que está interesado en ella, sal a buscarlo. Descúbrelo. Llama por teléfono. Todo el StartUp Weekend está vertebrado alrededor de la metodología lean startup, que en general consiste en un trabajo de pequeños lotes. Eso es, si tienes las hipótesis N, valídalas, una a una, y aprende de ellas. En el caso de una empresa, lo más interesante es descubrir si tu idea se va a vender de alguna forma.
- Moverse es mejor que estar quieto.
- Diviértete. Es lo más importante.
- La primera forma de ganar el evento es probar todos los tipos de pizza. ARRASA!
- Yo no me puse zapatos en todo el fin de semana. No sé si quedaba raro, o creepy, me da igual, estaba cómodo. Ve cómodo. :)
- Dale las gracias al equipo. Lo hacen sin cobrar. De manera desinteresada. Al que le parezca cara la entrada para el evento, le recomiendo que no emprenda, porque no sabe lo que valen las cosas.
De verdad, id a pasárselo bien. Ganaréis mucho. Y sin más, gracias por leerme… :)
Luis B. ;p
Para que veáis que hablo con veracidad… :)
