Sin hablar
Esto es lo más bonito que podré decirte.
Hoy hasta el cielo quiere llorar por ti y se contiene, como lo hago yo.
Intenté irme muchas veces porque no sé querer y me da miedo que me quieran. Te tiré golpes y te clavé estacas donde me lo permitiste, hasta en el corazón. Aún así te quedaste a ver el final. Ojalá las palabras me salieran tan bonitas y no me diera miedo decir lo que se siente querer, como a ti. Ojalá hubiera aprendido a no tener miedo. Ojalá aprenda a querer.
Creo que nos encontramos cuando era necesario y en las circunstancias correctas. De otra forma no hubiéramos funcionado. De otra forma nos hubiéramos hecho daño. En cambio así, aunque duele un poco, siempre va a ser perfecto.