Reseña: La gente feliz lee y toma café

María Del Mar Melero Muela
3 min readJun 18, 2017

--

Pese a que La gente feliz lee y toma café parte de una desgracia familiar, la muerte inesperada de Clara y Collin (primogénita y marido de Diana, la protagonista de la obra), lo cierto es que la trama del libro va mucho más allá de la adversidad y el duelo que siente una mujer que de la noche a la mañana pierde a dos de los pilares básicos de su vida.

La obra de Agnés Martin-Lugan deja en claro una moraleja bastante realista; de toda desdicha se puede salir por muy negativa que esta sea. Una enseñanza que no puede ser mejor relatada que desde la perspectiva de su autora, una psicóloga clínica. Martin-Lugan, no sé si a propósito, da existencia a un libro muy psicológico que bien puede ser útil de auto-ayuda o simplemente para hacerte reflexionar sobre el fino hilo que separa la vida de la muerte, de tenerlo todo a perderlo en un segundo.

La novela está narrada en primera persona a través la voz de la protagonista, Diane, que utiliza una descripción cronológica de los hechos para contar su historia. Un relato que se hace muy ameno y que engancha de una forma muy poderosa mediante unas descripciones que te ponen enseguida en situación. Si es bien, que durante la trama los sucesos pasan demasiado rápido. Diálogos muy poco viscosos, es decir, que terminan demasiado deprisa, les falta “chicha”. Pero para ser una obra debut, lo cierto es que Agnés Martin-Lugand no deja indiferente a otros escritores más afianzados.

Por su lado, es cierto que hay hechos que son muy previsibles. Pero aun así, cuando lees la escena, la vives como si fueses la propia protagonista. Y de verdad, te hacen sentir. En especial cuando suceden los entresijos amor-odio entre Diane y Edward, su vecino de su nuevo hogar en Mulranny (Irlanda). Es difícil ponerse en la piel de una mujer que ha perdido a su marido y que vuelve a recordar sentimientos que creía olvidados con otro hombre. Es difícil, pero el papel se asume y no crea lejanía. Más bien, todo lo contrario.

Algo que se agradece mucho es que no es muy recurrente la reiteración al pasado. Como he mencionado la trama está estructurada de manera cronológica y este aspecto se respeta bastante. Para evocar a los recuerdos se usa la inclusión de detalles a modo de leitmotiv simbólico: la alianza de boda, las camisas de Collin, el champú de Clara, las fotografías, las rosas blancas… Y con ello, Martin-Lugand aleja a la novela de esa sobredosis de sentimentalidad a la que muchos son adictos.

La gente feliz lee y toma café es una obra con un continente bastante cuidado, aunque le falte profundizar en algunas escenas y personajes, donde la identificación con la protagonista funciona muy bien. Así, la superación y el optimismo son los temas que destacan especialmente en el argumento de la novela, evocando a la identificación del lector con la historia y encarnando una moraleja: a la larga todo suma en la vida.

Título: La gente feliz lee y toma café
Autor: Agnés Martin-Lugand
Valoración: 8'5
Precio: 16 euros aprox. (Libro papel)
Sinopsis: Tras la muerte de su marido y de su hija en un accidente, Diana lleva un año encerrada en casa, incapaz de retomar las riendas de su vida. Su único anclaje con el mundo real es Félix, su amigo y socio en el café literario La gente feliz lee y toma café, en el que Diane no ha vuelto a poner los pies. Decidida a darse una nueva oportunidad lejos de sus recuerdos, se instala en un pequeño pueblo de Irlanda, en una casa frente al mar. Los habitantes de Mulranny son alegres y amables, salvo Edward, su huraño y salvaje vecino, que la sacará de su indolencia despertando la ira, el odio y, muy a su pesar, la atracción. Pero, ¿cómo enfrentarse a los nuevos sentimientos? Y luego, ¿qué hacer con ellos?

--

--