El líder de adoración
La mayoría de las veces, un líder de adoración es un músico, sea en voz o en instrumento. Sin embargo, más allá de dirigir un equipo musical, su responsabilidad es que el talento no sea el enfoque en la adoración. Dios quiere que todos conozcan que su presencia está accesible y abierta para todos, y esto es lo que el líder enseñará cada vez que dirija.
El líder de adoración es un portero que abre las puertas para que otros entren a la presencia de Dios.
“Los sacrificios de Dios son el espíritu contrito; al corazón contrito y humillado, oh Dios, no despreciarás.” Sal.51:17
Testimonio
El líder de adoración lidera bien su propia vida antes de liderar a otros. Este no lucha para probarle a otros que vive una vida en adoración, sino que es algo que brota naturalmente en respuesta a Dios. No es ser perfecto, es tener un corazón moldeable y humilde. La vida personal de un líder de adoración es la canción más importante que cantará. Es un ejemplo a seguir. Por eso, antes de subir a la tarima o frente a un grupo a dirigir la adoración, el líder necesita reconocer que su vida es lo primero que rinde. Al no hacerlo estará actuando la adoración.
La adoración no se trata del líder de adoración y de lo que con sus fuerzas pueda lograr; se trata de quién es Dios, lo que hizo, hace y hará.
“Cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento.” 1 Cor. 14:15
Preparación
El líder de adoración se prepara para liderar la batalla. El líder busca tiempo en la presencia de Dios, leer su Palabra y buscar Su voz. Su relación con Dios es la herramienta más importante al momento de dirigir, ya que no puede dar algo que no haya recibido. Puede planificar y ensayar, pero es en la presencia de Dios donde el líder puede estar en armonía con Su corazón. La presencia de Dios es una atmósfera de salvación, sanidad, libertad, y mucho más y hay que estar listo para llevar a todos a ese lugar.
Es responsabilidad del líder adorar de manera que esté atento a lo que ocurre en el cielo y por consiguiente dirigir lo que ocurre en la tierra.
“y donde está el Espíritu del Señor hay libertad” 2 Cor. 3:17–18 (TLA)
Ejemplo
El líder es el primero en perderse en adoración. Adoración es sacrificio, es rendirse, es entrega, es dejar tu “yo”, es darle lo mejor de ti a Él. El líder de adoración es el primero en conectarse, el primero en brincar, el primero en postrarse y así consecutivamente. Cuando el líder se sumerge en adoración, los corazones se abren y están listos para recibir y ser cambiados por la presencia de Dios. Ser líder de adoración es amar lo que Dios ama, amar a las personas y llevarlos a tener un encuentro con Él.
“… somos como un espejo que refleja la grandeza del Señor, quien cambia nuestra vida…” 2 Cor. 3:17–18 (TLA)
