Una fábula sobre emprendimiento en Bolivia.

desde Google.

Me permito escribir una fabula:

David se despertó y empezó a preparar su desayuno, al padecer de enfermedad celíaca (EC) tenía cuidado con lo que comía. Noche antes accedió a un reporte sobre la quinua y su papel para regenerar la tolerancia al gluten, antes de dormir escribió un twitt bilingue sobre la quinua y la EC que se compartió automáticamente en su muro de facebook.

Al revisar los RTs de twitter y respuestas en Facebook, encontró que su dolencia no era exclusiva y que los tratamientos y la dieta tenían diferentes costos según el país del enfermo. Se sorprendió por tres respuestas en ingles, preguntando por mas datos sobre la quinua y la tercer respuesta, incluía una pregunta: ¿podía vender quinua y enviarla a USA?.

Busco en internet, encontró dos páginas de proveedores bolivianos de quinua ubicados en Oruro, una con certificación de origen y certificación sanitaria. Mediante la pagina web del proveedor pidió una cotización de compra por volumen mas condiciones de pago y garantías del producto.

Escribio por Telegram un mensaje a su médico nutricionista, preguntando si se animaba a abrir una página web sobre tratamiento con quinua de la EC. Consulto en un grupo de ofertas de desarrollo de software ubicado en facebook por el costo de una página web mas soporte técnico y sistema de comercio electrónico, incluyo un bosquejo hecho a mano alzada para mas señas.

Salio y busco un taxi con destino a su oficina.

En su reloj inteligente recibió tres alertas. La alerta de Telegram de su nutricionista tenía una respuesta positiva. La alerta de correo electrónico decía que había respuesta del proveedor de quinua con datos adjuntos y un nuevo mensaje en ingles pidiendo mas datos sobre la quinua.

Ya en su oficina, respondió con un correo electrónico a su médico, puso copia a su abogado y al contador que prestaban servicios terciarizados a sus empresas. El correo mostraba la estructura de un servicio de consejos profesionales sobre la EC que incluya dietas en base a quinua, el desarrollo de una app de control y seguimiento de la dieta, incluyo estimaciones sobre la afectación de la enfermedad en USA y Europa, para finalizar escribió plazos, pidió a todos que se debería tener todo en siete días exactos.

En sendos correos electrónicos, pidió al abogado y al contador, preparar papeles para cumplir con todos los trámites para registrar la nueva empresa que tenía en mente, puso una meta de 50 000 $ como capital inicial y dio como plazo 3 días para la parte burocrática. Una sonrisa se pinto en su rostro, recordando como habían cambiado las reglas para registrar empresas, los entes estatales tenían un plazo máximo de 48 horas para entregar todas las autorizaciones.

Preparo un correo mas formal con datos estadísticos, proyecciones de demanda, inversiones, flujos de caja, cálculos de VAN y TIR, cadena de proveedores y sistema de distribución, expectativas de mercado, estrategia de marketing con base de minería de datos, el reporte no supero las 12 páginas, envío el reporte a un grupo de amigos que estaban alertas a nuevas inversiones, en la parte final del correo electrónico escribió: “si desean participar, contactense con mi abogado y hagan la transferencia bancaria a hasta tal fecha”.

Por inbox de FB, recibió 10 propuestas sobre la página web, unas de novato que pedían mas datos, otras mas profesionales que incluían costos, plazos de desarrollo, estrategia de SEO y Social Media e incluso una que ofrecía una especie de sociedad. Eligió tres propuestas, el resto recibió un escueto “no cumple con mis expectativas”.

Selecciono a un equipo de programadores después de recibir un reporte rápido de un sitio web que vendía reportes confidenciales sobre calidad de servicios de determinadas empresas y proveedores de servicios, en Linkedin averiguo mas sobre los programadores, los cuales vivían en una especie de cooperativa ecológica en Coroico con una conexión de 500 MBs de fibra óptica. Se conecto con ellos por Jitsi y cerro el contrato de servicios fijando plazos de entrega y estándares de calidad.. En una hora, tenía la documentación legal suscrita con firmas electrónicas, adelanto un 10% mediante bitcoin’s , el resto seria entregado según avance del desarrollo por transferencia bancaria electrónica. En tres días, tendría un beta de la app y un 80% de la página web funcionando.

Los pedazos de manzana verde y dos vasos de yogurt fueron su almuerzo, reflexiono y dio gracias por no ser intolerante a la lactosa.

Después de responder los correos en ingles, grabo un vídeo personal con su teléfono inteligente, describió su enfermedad, los cuidados de su dieta, presento a su nutricionista y ofreció el servicio: en base al análisis de transglutaminasa tisular IgA y/o IgG , los datos de FitBit y determinación de patrones alimenticios podía hacer envíos a USA (y a otras partes del mundo) de quinua liofilizada (saborizada y con sabor neutro), la compra de la quinua incluia tratamiento personalizado mediante una app de cuidado de la dieta. Edito el video y creo un grupo en facebook en ingles y otros en francés, ingles, árabe y español para personas que padecían EC.

Escribió a una empresa de Social Media para la campaña de posicionamiento en redes sociales, fijando metas y resultados para su nuevo emprendimiento. Selecciono un servicio de correo físico que tenía como mantra “entregamos su producto en 24 horas, en USA y Europa”, contratando un paquete por volumen de productos y de largo plazo. No se preocupo por el sistema de pagos, puesto que la regulación bancaria fomentaba el comercio electrónico, ofreciendo desde capacitación hasta un sistema de acompañamiento y apoyo legal a quienes exportaban productos bolivianos.

Al acabar la tarde cerro el contrato con el proveedor de granos de quinua, fijando estándares según la FDA de USA, envío los diseños del envase de vidrio a una sopladora de vidrios ubicada en Potosí, el arte de la etiqueta y el diseño de las cajas a una imprenta en Oruro. No le preocupo la inversión, puesto que era parte de un circulo de personas que fomentaba el desarrollo de emprendimientos de base tecnológica con “olfato” para los negocios. Empezó a pensar en la segunda fase del emprendimiento.

Se antojo un fricasé con marraqueta crujiente y se puso triste pensando en la comida que no podía comer…

Originally published at bolivianueva.blogspot.com on November 21, 2014.