Shi Deru (a.k.a. Shawn Xiangyang Liu) — Credit

Artes marciales, literatura y beneficios multimillonarios

El portal de literatura de artes marciales Wuxiaworld ha firmado un acuerdo con la plataforma de literatura digital más importante de China, Qidian.

Oh! Digital culture

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Gana 110 millones de yuanes al año, publica online, sus sagas sobre héroes legendarios en un entorno de fantasía son seguidas por millones de ávidos lectores y es uno de los cuatro escritores más ricos de China, incluso es bien parecido y fotogénico, pero nunca has oído hablar de Zhang Wei.

Hasta ahora.

http://en.people.cn/n3/2016/0325/c90782-9035829.html

Fandom y artes marciales son los ingredientes de una noticia que, tal vez por parecer poco “seria” ha pasado de puntillas entre los medios; sin embargo, es un golpe directo a editores, traductores y profesionales de la cultura. El portal de literatura de artes marciales Wuxiaworld ha firmado un acuerdo con la plataforma de literatura digital más importante de China, Qidian.

Vale, así dicho no parece tan emocionante, pero veamos las cifras.

Primero, en China… Qidian y las otras plataformas del gigante tecnológico Tencent publican las sagas de 4 millones de escritores y albergan unas 10 millones de novelas (cada una con miles y miles de capítulos, actualizados casi cada día). Los lectores suelen poder leer gratis hasta cierto punto y luego hacer micropagos a través de su móvil; estamos hablando tal vez de menos de un céntimo por millar de caracteres, pero con 450 millones de lectores estimados en 2016… las cifras empiezan a cuadrar para muchos autores como Zhang Wei.

Y mientras tanto en Occidente… Wuxiaworld recibe trescientas mil visitas al día de lectores de todo el mundo deseosos de acceder al siguiente capítulo de alguna de las millares de novelas de artes marciales, acción y héroes legendarios que albergan las inagotables sagas de la página. La mayoría de estas adictivas novelas proceden de Qidian, precisamente, y son traducidas del chino por grupos de traductores voluntarios que a cambio reciben donaciones de los lectores. Con el reciente acuerdo entre Qidian y Wuxiaworld, ahora Qidian…. Según Sixth Tone, los responsables de Qidian tienen como objetivo promover la literatura online china en el exterior y la influencia cultural del país (“soft power”, esa valiosa noción).

Literatura online mucho más allá del libro, be water my friend…

Wang Xiaolei es otro escritor que se gana la vida explotando la literatura de artes marciales de manera inusual. En concreto, su medio es su cuenta pública de WeChat (esa eficiente mezcla de WhatssApp, Facebook, monedero online y más que no tiene aún equivalente en occidente). Wang analiza las novelas de artes marciales del clásico Jin Yong para los seiscientos mil suscritos de su canal y cada uno de sus artículos llega a doscientos mil hits. Con semejantes cifras, hace tiempo que Wang dejó su antiguo trabajo de periodista; ahora tiene un equipo que le ayuda a llevar la cuenta de manera profesional.

En occidente no solo es raro encontrar plataformas tan exitosas comercialmente como Qidian y emprendedores de contenido digital tan prósperos como Wang, sino que hasta la autopublicación ha tardado en ser aceptada como un modelo de negocio viable (y todavía discutiblemente rentable). En mi opinión, los editores occidentales estamos demasiado influidos por el formato libro y por la cadena de distribución clásica como para ver que la literatura online es un flujo; una narración que se puede adaptar a cualquier formato y tecnología.

Está claro que este modelo de micropagos de China, sostenido por una base lectora masiva, no se puede reproducir así como así en occidente (sobre todo en países con porcentajes lectores tan bajos y tan poca inversión en promoción lectora como España). Sin embargo, los sistema de plataformas, la intervención del fandom, los pagos móviles, los flujos de donaciones… dan pistas de que el negocio del contenido y la cultura en China está muy vivo y merece ser tenido como referente.

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