Cuando la piratería no importa

Por qué el copyright existe en China pero no parece importarle a nadie

Oh! Digital culture
3 min readNov 14, 2016
Pirates of the Caribbean: At World’s End

Cuando comento a amigos europeos que llevo un par de meses asistiendo a clases sobre protección de derechos intelectuales en China, la reacción suele ser: “¿pero… existe una ley de copyright en China?”. Sí, existe y se puede consultar online. Sin embargo, como he venido descubriendo, la pregunta con verdadera enjundia es: ¿por qué si China posee leyes de copyright estas se aplican con tanta laxitud?

Zhang Jiajia, nombre habitual de la lista de autores más ricos y vendidos en China, declaró que durante 2013–2014 se vendieron cuatro millones de copias de su último libro, pero que otros cuatro millones se distribuyeron por canales ilegales. Cifras de este estilo no suelen ser noticia en China, donde pocas veces las editoriales suelen buscar responsables legales cuando el mercado queda inundado de copias piratas de sus propios bestsellers. ¿Por qué nadie en el país parece realmente escandalizado por esta situación cuando en Occidente la industria se lanza a batallas legales por mucho menos?

  1. En líneas generales, a nadie le preocupa la piratería mientras la cultura produce riqueza; solo cuando los beneficios escasean, la industria necesita gastar recursos en volverse contra los infractores. La industria del libro china, con unas ganancias de más de 16 mil millones de dólares en el 2015 y un crecimiento anual de más del 10%, no solo es el segundo mercado editorial más grande del mundo, sino que sus expectativas son arrolladoras, impulsadas por una clase media urbana en expansión, mejoras educativas y un gran consumo doméstico. En esta situación (tan alejada del estancamiento de la industria cultural occidental), las empresas culturales florecen con o sin piratería. Y esto, a mi modo de ver, refuerza la idea de que el problema en Occidente no es la piratería en sí, sino la falta de interés del público y la escasa inversión estatal en promoción cultural.
  2. Además, a los países en desarrollo ¿realmente les beneficia aplicar leyes de copyright estrictas? ¿Deben copiar las leyes de copyright de los países con una industria ya desarrollada? En China la ley es buscadamente laxa y solo se persigue criminalmente a los infractores que superan ciertas cotas (de miles y miles de descargas, por ejemplo). Otros países, por supuesto, se han quejado de que sus producciones campen en abierto en China, pero a un país en crecimiento le beneficia que las ideas innovadoras se distribuyan con rapidez, así que no es de extrañar que el gobierno remolonee a la hora de aplicar controles.

En cualquier caso, la ley de protección intelectual china está siendo revisada en este mismo momento y se prevé más severa. La razón principal es que los propios consumidores chinos están desencantados con gigantes como Alibaba, ya que hoy en día en China casi resulta difícil comprar por internet algo que no sea falso. De hecho, pronto los portales de ventas se verán obligadas a denunciar a sus proveedores de falsificaciones y copias ilegales, así pues… permanezcamos a la espera de los cambios por venir.

--

--