El dilema de las redes sociales

Teia
4 min readJan 9, 2024

--

Resumen del documental “Social Dilemma” (Netflix), dirigido por Jeff Orlowski y producido por Larissa Rhodes

Todos sabemos que, en realidad, la tecnología ha creado cosas maravillosas en el mundo. Desde que se empezaron a desarrollar la intención era positiva, pero fuimos ingenuos con la otra cara de la moneda: liberas estas herramientas tecnológicas y cobran vida por sí mismas.

¿Cuál es el problema? ¿Qué está mal en la industria tecnológica ahora?

Datos y privacidad

Las plataformas digitales son un negocio. Pero, ¿qué venden? Certeza. Venden certeza a partir de los datos que recopilan. Así, todo lo que hacemos en línea está siendo observado, rastreado y medido, y con los datos que se recopilan, se construyen modelos que predicen nuestras acciones y emociones. A mayor cantidad de datos, mayor capacidad de hacer predicciones. A mayor capacidad de hacer predicciones, mayor probabilidad de tener éxito en el mundo digital. Es un mercado que comercializa exclusivamente datos de los humanos sobre su comportamiento con las tecnologías.

Adicción

Las redes sociales son una droga. La tecnología evoluciona rápidamente, pero nuestro cerebro no. Las grandes empresas trabajan para asegurarse que nos enganchamos a sus productos:

“Nadie en Gmail estaba trabajando para hacerlo menos adictivo”

Noticias falsas e información manipulada

Los magos eran casi como los primeros neurocientíficos y psicólogos, por su entendimiento sobre cómo funciona la mente humana. El mago comprende alguna parte de tu mente de la que no eres consciente.

“Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia”

Las noticias falsas en Twitter se difunden seis veces más rápido que las noticias verdaderas. Esto significa que la información falsa genera más dinero para las empresas. Con ello nace la tecnología de persuasión, basada en un refuerzo subliminal que a través de la manipulación implanta un hábito inconsciente.

Publicidad y monetización

Las plataformas compiten por tu atención y su modelo de negocio es mantener a la gente interesada en la pantalla cuanto más tiempo mejor. Entonces, lo que se dedican a vender estas empresas es nuestra mera atención a la pantalla, fijándose en qué vemos, cuándo lo vemos, cuánto lo vemos, cómo interaccionamos, con quién interaccionamos… Esta información es vendida a las empresas que publican anuncios en las plataformas de redes sociales.

“Si no pagas por el producto, entonces tú eres el producto”

Cambios en nuestra forma de ser y pensar

El producto de esta forma de organizar las redes sociales es provocar un cambio sutil y gradual en lo que haces, en cómo piensas, en quién eres. Esto se hace mediante la generación de confusión en los usuarios, quienes cada vez tienen menos control sobre quiénes son y qué quieren.

“El producto es el cambio en el propio comportamiento y percepción”

Conexión social

Hemos creado un mundo en el que la conexión en línea se ha vuelto primordial. El centro es la manipulación.

Sentido de autoestima e identidad

Usando las redes sociales hemos desarrollado un sentido de perfección porque fuimos recompensados por estas señales a corto plazo (corazones, me gusta, pulgares arriba…). Este hecho tiene una especial repercusión en preadolescentes y adolescentes: (autolesiones, suicidio…).

“No hemos evolucionado para que 10.000 personas nos administren la aprobación social cada cinco minutos”

Manipulación

Las redes sociales no son una herramienta, tienen sus propios objetivos y tienen sus propios medios para perseguirlos utilizando la psicología en tu contra. Hemos pasado de tener un entorno tecnológico basado en herramientas a un entorno tecnológico basado en la adicción y la manipulación. Algo no es una herramienta cuando te exige, te seduce, te manipula, que quiere cosas de ti.

La máxima representación de la manipulación digital son los denominados algoritmos, sistemas optimizados según alguna definición de éxito de algún grupo de empresarios que quieren algo de nosotros, aunque nosotros no lo sabemos. Lo peor es que estamos perdiendo el control sobre estos sistemas, están ya entrenados para actuar autónomamente sin la supervisión por parte de un humano.

¿Qué hay debajo de todos estos problemas?

3 objetivos principales en estas empresas tecnológicas:

  • Objetivo de participación: aumentar nuestro uso para que sigas desplazándote.
  • Objetivo de crecimiento: hacer que vuelvas e invites a tantos amigos como puedas.
  • Objetivo publicitario: ganar la mayor cantidad de dinero posible con la publicidad.

Cada uno de esos objetivos está impulsado por algoritmos y su trabajo es descubrir qué mostrarte.

¿La solución?

“Pero ¿dónde está exactamente la amenaza existencial? No se trata de que la tecnología sea una amenaza existencial. Es la capacidad de la tecnología para sacar a relucir lo peor de la sociedad, y lo peor de la sociedad es la amenaza existencial. La sociedad es incapaz de curarse a sí misma. ¿Cómo te despiertas de Matrix si no sabes que estás en Matrix? Es el modelo de negocio el que tiene un problema. Vivimos en un mundo en el que un árbol vale más, financieramente, muerto que vivo. Una ballena vale más muerta que viva. Estamos haciendo esto a pesar de que sabemos que está destruyendo al planeta y que dejará un mundo peor para las generaciones futuras. Ahora somos el árbol, somos la ballena.”

La tecnología funciona con decisiones que los seres humanos han estado tomando. Podemos cambiarlos usando el arma de la fuerza de voluntad colectiva.

“Son las críticas las que impulsan la mejora. Son los críticos los verdaderos optimistas”

Photo by Prateek Katyal on Unsplash

--

--