Aunque sepas Twitter, haz como que no sabes
Estoy preparando un curso para iniciarse en Twitter y lo más complicado es conseguir olvidarme de que lo que yo sé ellos no lo saben. ¿Me ayudas?
El problema es que los términos timeline, retuit, favorito, hashtag, listas, seguidores y seguidos… que a mí me resultan de lo más familiares cuando pienso en Twitter, a mis pupilos (hispanoparlantes) les suenan a chino, incluso esas palabras puro español de España.
Intentar enseñar Twitter como antaño se empeñaron (he aquí el resultado) mis profesores de inglés –listas de verbos y vocabulario para repetir y retener de memoria– no funciona. Si no conoces el código, el ADN, el ecosistema de un lenguaje o como quieras llamarlo, hablarás como un guiri el español o como nosotros (yo, al menos) el inglés. Eres consciente de que sirve para decir cosas, pero realmente no dices (casi) nada, o que valga la pena escuchar o que, por lo menos, tu interlocutor se aclare contigo. Lo mismo con Twitter: si tartamudeas, trastocas las sílabas y pones mal los acentos (no digo nada de las tildes porque eso es para nota)… es posible que acabes comunicando (?) lo contrario de lo que pretendías y te metas en un lío.
Pero como Twitter lo citan no sólo en los telediarios sino en cualquier tertulia de bar o de ascensor, ya se sabe que o aprendemos Twitter o nada; estás abocado a ser un extranjero en el mundo. Twitter como habilidad básica: conducir, idiomas, utilizar bien los cubiertos al comer, apagar el móvil cuando toca… y, ahora, –¡encima!– aprender a tuitear.
En eso estoy desde hace años. Pero en esta ocasión quiero incluir vídeos, más y mejores ejemplos, testimonios de expertos. El reto consiste en que los entusiastas de mis alumnos se enganchen desde el minuto 1 intentando acercarles rápido para que comprendan que los 140 caracteres de un tuit pueden ser una mina de conocimiento y distracción (de la buena) sin sensación de perder el tiempo. Se admiten sugerencias, ideas, ejemplos y anécdotas que sean muy, muy pedagógicas. Y muchas gracias.
