Caso Mariana “Una niña olvidada”

Bitácora 26 de Abril del 2018

En la clase de hoy comenzamos a revisar el caso Mariana el cual tiene los siguientes datos:

Primera Entrevista con la madre en hospital. 22 de noviembre de 2012.

DATOS DE IDENTIFICACIÓN

NOMBRE: Mariana

Fecha de nacimiento: 29 de mayo de 2002 Edad: 10 años 6 meses

Grado escolar: 5° de primaria Rendimiento: Entre 7 y 8

Madre: Silvia Edad: 38 años

Ocupación: Abogada, trabaja de manera independiente esporádicamente.

Padre: Adrián Edad: 46 años

Ocupación: Policía preventivo y taxista

Hermanos: Emilio Edad: 4 ½ años

Domicilio: Viven en el pueblo de Santa Fe

Motivo de consulta:

Expone que a la niña le cuesta mucho trabajo mantener la atención, es muy dispersa, se tarda horas haciendo la tarea, a veces tarda hasta la 1 de la mañana, ella se desespera y la deja sola con la consigna de que no se puede ir a dormir hasta que no termine la tarea.

Antecedentes:

Mariana nace a los dos años de matrimonio, antes tuvo 2 abortos. En los dos embarazos logrados desarrolló el síndrome de anticuerpos antifosfolípidos, ella explica que es una enfermedad donde el cuerpo ataca al embarazo. Después del nacimiento de la niña tuvo otro aborto, manifiesta que a lo largo de la gestación tuvo mucho miedo, fue atendida en el Hospital de Perinatología y tratada con cortisona, razón por la que engordó hasta pesar 86 kg, durante el embarazo presentó 18 amenazas de aborto y en una fue internada por 4 meses. “Fue muy difícil, estuve sola todo el tiempo, sentía mucha tristeza porque no podía valerme por mi misma, hubo poca respuesta de mi esposo, a partir de eso comenzaron los problemas con él”. Platica que su esposo prefería estar con su mamá que apoyarla. Padeció de preeclamsia, le indujeron el parto a los 7 meses.

En esta parte pudimos analizar en la clase, que la prehistoria del niño es muy importante ya que existen cargas afectivas desde antes de que nazcan los niños.

Mucho antes de que el individuo vea la luz del mundo, existe un discurso que lo antecede, un conjunto de enunciados concernientes al niño que constituyen lo que lo que se conoce como la sombra hablada.

Recordemos que como he visto en Winnicott el desarrollo es un complejo proceso donde interactúan aspectos de la herencia, la maduración y la acumulación de experiencias de vida, para que pueda darse se requiere un entorno facilitador; el desarrollo se construye y fortalece a lo largo de toda la vida.

La historia del individuo no comienza con su nacimiento, lo precedente influye significativamente en donde la relación madre-hijo no espera al parto para existir, es decir, inicia a partir de que la mujer sabe que está embarazada y percibe los primeros movimientos del feto; así, se instaura una relación imaginaria con un embrión en desarrollo al que se imagina con los atributos de un cuerpo completo, cuerpo imaginado sobre el que la madre deposita su libido, investimento narcisista de un anhelo de ideal, proyección de los sueños incumplidos de los padres que actúa como factor estructurante.

Desde el embarazo comienza la libidinización, es decir, la preparación física y psíquica, del espacio al que advendrá un nuevo ser; algunos autores sugieren que la narcisización del niño comienza desde el momento en que los padres imaginan su llegada, aspecto fundamental en la constitución subjetiva del individuo.

Pero como podemos darnos cuenta desde el embarazo de Silvia, no hubo una muy buena relación entre Mariana y Silvia, lo cual puedo haber empeorado al momento del nacimiento ya que Mariana, parece que no cumplió las expectativas que se tenían de ella desde antes de nacer. Hubo problemas de libidinización lo que provoco que no se generara una adecuada relación amorosa.

Mariana nació a las 34 semanas por cesárea, más que alegría estaba muy preocupada cuando nació pues la niña tenía un soplo en el corazón, el estómago girado en sentido contrario, pero no hubo cirugías, estuvo en la UCIN por 22 días y cuando salió ya se habían corregido los problemas. Ella se entristecía porque no la podía tocar ni ver, solamente desde el vidrio de la UCIN; pesó 1,800 kg, midió 43 cm y tuvo un afgar de 8/9; “todo fue muy estresante” por la cuestión del estómago “bajó a 1,400 kg, era estresante verla llena de sondas y tablas”, pero la veía muy fuerte, confiaba en que iba a poder salir de esa situación. Con el embarazo del más pequeño también sufrió esta enfermedad, solo que el niño nació de 6 meses, pesando 1,100 kg. Este actualmente padece de los riñones, no habla bien y en el servicio de psicología del hospital sospechan de un padecimiento del espectro autista.

Como pudimos observar en lo que esta en negritas arriba, la madre de Mariana (Silvia) hace una depositación en la niña que ella desea, la ve fuerte, en que podía salir adelante. Pero de lo que realmente pasa es que es lo que ella quiere ver en Marina, quiere que sea fuerte como ella, y pueda afrontar en la situación en la que se encuentra.

Otro autor que se menciono durante la clase fue Aulagnier, del cual debemos recordar que aborda el tema de el deseo de hijo y el deseo de maternidad, el cual es visto en el capitulo 4 de la tesis de la Dra. Eva María Esparza, el primero correspondiente a ese deseo que de la madre pasó al padre y se cristalizó en el deseo de procrear un hijo con otro hombre: su pareja; en tanto que el deseo de maternidad, responde al deseo de repetir especularmente su relación con la madre, lo que resulta nefasto para el niño, ya que no llega un ser nuevo, diferenciado, sino que representa el retorno de algo que debió quedar reprimido.

Cuando el deseo de ser madre se antepone al deseo de hijo, expresa una falla en la transmisión del derecho al deseo, pues no anticipa el advenimiento de un nuevo ser, su importancia estriba en la posibilidad de que la madre retroceda al lugar privilegiado que supone ocupó en una época anterior. En estos casos, el deseo del padre no tiene cabida, queda totalmente marginado, sin que se valorice su papel dentro de la procreación, aunque es pertinente mencionar que la exclusión puede provenir tanto de la madre que expulsa al padre, como de éste mismo que se aleja porque no hay compromiso de su parte. Lo cual se ve reflejado en lo anterior dicho al principio de los antecedentes.

A la tercera semana de nacida le permitieron ingresar a la sala para ver a la niña, “pero ella no me quiso ver, se volteaba para el otro lado, en cambio mi esposo si la pudo cargar”, cree que desde entonces es que ellas no se pueden llevar bien; el hecho de que la niña haya aceptado que el padre la cargara le produjo enojo, porque él iba muy poco al hospital, dice que él no se comprometió, por eso ella lo ignoró y lo hizo a un lado, se sentía enojada y sola. El nacimiento de Mariana “fue impactante, triste, doloroso, me preguntaba ¿qué hice yo mal?, si no hubiera fumado antes tal vez no me hubiera pasado esto”.

Es muy importante que los padres sientan un enorme placer, al momento de que los niños nazcan, no se tiene que ver como algo triste o doloroso.

Un dato que es de suma importancia que lo menciono la profesora durante la clase es que los niños cuando nacen prematuros, se deben tomar con mucha mas firmeza que otros niños, ya que si solo les damos pequeños caricias, los bebes sentirán como pequeñas descargas eléctricas. Que fue probablemente lo que le paso a Mariana al momento de que su madre Silvia la quiso tocar.

Referencia:

Esparza, E. (2015). Los Síntomas del TDAH, sólo la punta del Iceberg. Clínica de lo Negativo. (Tesis de doctorado). Colegio Internacional de Educación Superior, México.

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