El Desierto de Atacama convertido en un contaminante vertedero de ropa
Miles de toneladas de prendas de vestir desechadas de todas partes del mundo llegan hasta Chile. La situación ha encendido todas las alarmas de alerta, pues conforma un gran índice de contaminación en la región.
Hace unas semanas, imágenes provenientes del Desierto de Atacama, en Chile, se hicieron viral en redes sociales. En estas imágenes se observa cómo miles de prendas de vestir desechadas yacen como colinas en el terreno, lo cual ha generado sorpresa debido al tamaño de la contaminación. Pero, ¿cómo este escenario se ha convertido en un gigantesco depósito de ropa?
El Desierto de Atacama es considerado el más grande de Sudamérica y el más seco del planeta. Esta meseta chilena es, a su vez, una zona franca; es decir, un lugar que goza de beneficios fiscales y no paga impuestos por las importaciones. Es de esa manera que miles de productos hacen su ingreso al país diariamente, lo cual puede ser considerado como uno de los factores clave del problema.
De acuerdo con el informe de la agencia AFP, Chile es el primer país consumidor de ropa en América Latina, así como el primer importador de prendas de segunda mano en la región. Se estima que alrededor de 59,000 toneladas de ropa sin vender y de segunda ingresa al Puerto de Iquique, en el norte de Chile, para ser comercializada en Latinoamérica. De esa cantidad, al menos 39,000 toneladas terminan en Atacama.
La ropa desechada, en su mayoría, es fabricada en Bangladesh o China. Luego, son transportados y comercializados en Europa, Asia y Estados Unidos, hasta finalmente llegar a Chile, donde es rematado como ropa de segunda. Lo reportado hasta el momento indica que ante la imposibilidad de venta de las grandes cantidades de prendas importadas, parte de los productos se comercializan a través del contrabando, y otra gran cantidad termina en estos vertederos ilegales. Jeans, zapatillas, casacas y ropa de todas las marcas internacionales se pueden encontrar en el lugar y, lo más sorprendente, es que muchas de esas prendas aún contienen las etiquetas de precio y presentan signos de nunca haber sido usadas.
Lamentablemente, esta situación no es reciente, sino que ya data desde hace algunos años. Debido a la falta de control de esta actividad en la zona, algunos pobladores de bajos recursos se acercan a recolectar las prendas para poder usarlas o venderlas en sus vecindarios. Ese es el caso de Alto Hospicio, una pequeña localidad industrial, que está rodeada por “La Toma”, un terreno con casas precarias ocupadas en su mayoría por inmigrantes venezolanos. Todos los días, estas personas se enfrentan a las altas temperaturas para ir a la búsqueda de prendas de vestir que puedan reutilizar.
Moyra Rojas, Secretaria Regional Ministerial del Medio Ambiente, ha indicado que los vertederos de ropa se han convertido en un problema grave porque se generan incidentes de quema, lo que produce contaminación del aire, afectando así a las localidades y lugares poblados que existen cerca a la zona.
La Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo ha asegurado que la industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo, por encima de la manufacturera, de energía, de transporte e incluso la alimentaria. Y es aún más preocupante ver cómo las grandes marcas de moda fomentan a seguir las cambiantes tendencias de moda, creando una cadena de consumo sin fin, cuyo verdadero impacto ambiental es aún desconocido por los compradores.
La industria textil y del vestido utiliza al año 93,000 millones de metros cúbicos de agua, y al mismo tiempo, es la responsable del 20% del agua desperdiciada del mundo. El informe de la ONU también señala otros datos preocupantes. Por ejemplo, para la confección de un par de jeans, se necesitan 7,500 litros de agua, que es lo equivalente a lo que una persona puede consumir en siete años aproximadamente. Además, la fabricación de tanto ropa como calzado genera el 8% de los gases de efecto invernadero.
Frente a este panorama desolador, Chile ya ha comenzado con el proceso de implementación de una ley que determina que los productores son los responsables de hacerse cargo de los residuos generados. Por otro lado, también se están fomentando iniciativas desde las comunidades, que pretenden disminuir el impacto de la contaminación. Ese el caso de Rosario Hevia, fundadora de Ecocitex, una empresa fabricadora que recicla y convierte el material textil desechado en ovillos de lana y que pretende marcar la pauta en cuanto a soluciones sostenibles en Chile.
A pesar de las buenas iniciativas que buscan frenar el problema de la desbordada contaminación, queda claro que Latinoamérica enfrenta una guerra contra la industria de la moda rápida. El primer paso consiste, entonces, en educar y concientizar sobre nuestro comportamiento como consumidor y, de esa manera, actuar para generar un impacto positivo. Nuestro planeta lo agradecerá.
Referencias:
AFP News Agency [AFPnewsagency]. (2021, noviembre 9). Chile’s desert dumping ground for fast fashion leftovers | AFP. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=wAPidXqvNLk
Co, R. E. (2022, enero 6). Impactante: toneladas de ropa usada se acumulan en el desierto de Atacama. El Heraldo. https://www.elheraldo.co/mundo/atacama-toneladas-de-ropa-usada-invaden-el-desierto-en-chile-877927
Deutsche Welle (www. dw.com). (s/f). Chile: el desierto de Atacama, vertedero de montañas de ropa. DW.COM; Deutsche Welle (www.dw.com). Recuperado el 13 de enero de 2022, de https://www.dw.com/es/chile-el-desierto-de-atacama-vertedero-de-monta%C3%B1as-de-ropa/g-59827420
El Destape. (2021, diciembre 30). La preocupante montaña de ropa que acumula el desierto de Atacama. El Destape. https://www.eldestapeweb.com/atr/contaminacion/la-preocupante-montana-de-ropa-que-acumula-el-desierto-de-atacama-2021123017320
(S/f). Diariocriterio.com. Recuperado el 13 de enero de 2022, de https://diariocriterio.com/ropa-desecha-en-desierto-de-atacama-en-chile/