Mi nombre es Ana, y soy adicta a los artículos de Medium
Me encanta Medium. Un lugar en el que cualquiera puede compartir sus ideas; un lugar en el que las palabras son lo más importante. Nada de configurar páginas, comprar hosting, o decidir entre miles de plantillas y colores.
Escribir y ya, justo lo que necesito.
Pero no solo me encanta escribir en Medium, también me fascina leer aquí. Todos los días hay algo nuevo; mi página principal se llena de artículos sobre ciencia, productividad, consejos para autores, y más. Hay piezas profundas y bien trabajadas, pero la mayoría son artículos como este, sencillos y rápidos.
Leerlos se siente bien.
Obviamente no tengo nada en contra de este tipo de publicaciones, yo misma las escribo. Tienen su lugar y pueden enseñar cosas importantes o animar a alguien que realmente lo necesita.
Pero últimamente me he dado cuenta de que he pasado demasiado tiempo leyendo en Medium. Sé que debería estar leyendo cosas más demandantes para mi cerebro, pero leer aquí es más fácil. Además, no me siento tan mal de ignorar mis otras lecturas, porque los artículos que leo son sobre cosas productivas, ¿no?
¿Porque realmente necesito conocer la rutina de escritura de esta persona?
¿Porque realmente necesito este nuevo consejo sobre cómo vencer la procrastinación?
¿Porque realmente necesito saber cómo “desconectarme y aprovechar al máximo el tiempo”?
Seré honesta, dudo mucho que vaya a encontrar algo nunca antes visto en uno de estos artículos. Pueden servir para inspirarme, motivarme, confrontarme, o refrescar mis ideas. Pero si quiero nutrirme para poder escribir contenido útil para los demás, necesito alimentarme de cosas que reten mi mente y me hagan pensar.
Los caramelos de Medium son buenos de vez en cuando, pero tengo que limitarlos. Tengo que ponerme a dieta.
