En 2015 Por Primera Vez Voto A Ganador

En 2015 por primera vez voto a ganador.

Mi primer voto lo emití en 1989 y luego de 26 años, por primeva vez voto verdaderamente a ganador.

Seguramente les sonará más raro aún entender esto que siendo 16:15hs. de este domingo 22 de noviembre de 2015, soy un ciudadano que aún no ha emitido su voto, y más aún; aún no ha decido a quien votar.

Mi única certeza es que no votaré en blanco. Votar en blanco en un balotaje no es una opción aunque no te guste ninguno de los dos candidatos. En el balotaje uno tiene que optar (no elegir) entre las dos opciones más votadas por todos los ciudadanos para elegir quien estará a cargo de conducir nuestra nación por lo menos los próximos 4 años. Es nuestra primera vez en esta metodología electoral, y hay que tomar la madura decisión de optar (y no elegir repito) entre las dos opciones posibles, aunque nuestro ideario política hubiese preferido otro. Eso no es lo que está en juego en esta novedosa primera vez en una segunda vuelta.

¿Entonces por que digo que por primera vez voto a ganador?

Me parece que la mejor forma de explicar esto es tomar las palabras del brillante escritor y periodista norteamericano Ambose Bierce que decía sobre votar que:

“El elector goza del sagrado privilegio de votar por un candidato que eligieron otros”.

Es una perfecta definición del “cómo” deberíamos tomar “siempre” el acto eleccionario, y más aún en una segunda vuelta o balotaje.

Eso fue lo que me dijo mi viejo en 1983 y yo no pude comprender con mis 14 años, cuando Raúl Alfonsín se imponía a Italo Argentino Luder en las presidenciales de ese año propinándole al peronismo su primer derrota electoral de la historia.

Criado en una familia peronista que sufrió en carne propio la persecución política, la cárcel y luego la proscripción y el terrorismo de estado por parte del golpe militar encabezado por Jorge Rafael Videla en el denominado “Proceso de Reorganización Nacional” uno de los ciclos más oscuro, nefasto y doloroso de la historia Argentina.

Luego de ser uno de esos héroes anónimos de los que está plagada la historia de la humanidad y no figuran en los libros y memorias, quienes en este caso formaron parte de la negociación- mejor dicho ablande y convencimiento- para que esa dictadura que había quedado abatida y debilitada por la derrota en la Guerra de las Malvinas del 82' llamase a elecciones luego de esos 7 años de gobierno inconstitucional.

Y llegó la elección en la que luego de trabajar arduamente para la victoria del peronismo, la voluntad popular en ese momento fue optar por un gobierno de otro corte político.

Cuando llegaban los resultados de esa elección, la desazón me embargaba el alma en mi primer elección con cierta conciencia de lo que era este acto democratico.

El mito del peronismo invencible y popular, era derrotado claramente por el partido radical, algo que en mi construcción mental era casi un imposible (más aún habiendo vivido cientos de reuniones de campaña en mi casa).

Pero mi viejo estaba feliz, y no apesadumbrado como yo. Tenía una cara de tranquilidad, paz y felicidad.

Y recuerdo, que vino a abrazarme al balcón donde yo penaba de dolor y desconcierto en mis jóvenes 14 años al escuchar los bocinazos de los festejo de la gente, y me dio la lección cívica más grande de mi vida. La que hoy me representa más que nunca:

-“¿Gonzi, por que estás tan triste?”

-”Pa, perdimos, ¡¡¡perdimos!!!, es imposible”

-No hijo, no perdimos. Ya ganamos- me decía con una paz que incluso recuerdo me perturbaba- lo importante es pudimos volver a votar y elegir. Eso es lo único que importa. Ya volveremos a tener chances de ganar una elección, y vos vas a tener muchas más que yo, lo importante es que SIEMPRE TENGAMOS LA POSIBILIDAD DE ELEGIR NOSOTROS ”.

Igual no pude dejar de seguir lagrimeando por no poder entender la derrota en las urnas cuando por dentro tenía una construcción épica del regreso y triunfo abrumador del peronismo que no viví, que iba a cristalizarse en ese octubre del 83'.

Y esa misma coherencia que tuvo en octubre del 83', la mantuvo en marzo de 1987 cuando fue el levantamiento carapintada de Aldo Rico, en el que fuimos juntos a la Plaza de Mayo para acompañar al presidente Alfonsín para decirle al mundo que “Nunca Más” íbamos a tolerar un Golpe de Estado.

Y desde el 89', he podido tener el grato deber de poder emitir mi voto ininterrumpidamente. Mis candidatos han sido electos mayoritariamente algunas veces, otras han sido superado en votos por otras opciones( no hablemos de vencedores ni vencidos ya que cada vez que podemos votar todos hemos ganado independientemente de los votos obtenidos por nuestros candidatos).

Por eso hoy, tres décadas después digo que en 2015 por primeva vez voto a ganador. Por primera vez tengo la opción de optar entre dos candidatos por los que no he votado en la primera vuelta. Candidatos con los que coincido en algunas cosas , pero en muchas más no.

Pero gane quien gane, lo haya votado o no, quien resulte electo será mi Presidente, será el presidente que yo he votado y elegido, por que yo somos todos los ciudadanos y no una simple singularidad humana.

Hoy sin duda ya hemos ganados todos. Hoy comienza un ciclo en el que todos debemos apoyar al presidente que elijamos, y todos debamos exigirle a éste que nos represente a todos. Al 100% de los argentinos.

Hoy voto a ganador, y espero que a partir de ahora TODOS votemos siempre a ganador; SIEMPRE. Por que no importa el partido que se imponga en las urnas, importa que siempre podamos entre todos elegir el Presidente de todos.

Son las 17:24, tengo que ir a votar…votar a ganador.