Remediación Planetaria: Venus

Como parte de la serie de Remediación planetaria exploraremos cada planeta de la astrología helenística y revisaremos las formas de darle balance a la energía de cada uno.

El turno de hoy es para Venus

En remediación planetaria la energía de Venus es:

Es estable cuando se encuentra en el signo de exaltación (Piscis), es débil cuando está en Detrimento (Virgo), se encuentra conflictiva cuando está en Exilio (Aries y Escorpio) o se encuentra exacerbada cuando está en su domicilio (Tauro o Libra).

Al mismo tiempo, Venus puede presentar complicaciones si se encuentra en casas que representan problemas para el individuo: VI, VIII o XII.

Cuando Venus en tu carta presenta uno de estos aspectos o tiene un tránsito que debilite su fuerza (conjunción con Marte, por ejemplo) puede que necesites remediarla. También puedes preguntarte:

¿Me cuesta disfrutar de los placeres simples de la vida? ¿Me cuesta mucho ver la belleza en lo que me rodea? ¿le doy demasiado valor a lo material? ¿me cuesta relacionarme con los demás? ¿todo tiene que ser bonito para que valga la pena para mí? ¿soy perezoso en exceso?

Si respondiste sí a una o más preguntas puede existir un desbalance (exceso o ausencia) de energía de Venus en tu carta. Para remediarlo, alivianarlo y ganar su favor puedes usar una de las siguientes técnicas:

1. Oración planetaria

La oración planetaria puede ser el dedicar un momento del día (idealmente la hora del planeta) a meditar, observar y conectarte con la energía del planeta.

Existen mantras y oraciones planetarias que puedes utilizar:

Mantra

En astrología védica cada planeta está asociado a una deidad en particular, por lo que si resuenas con esta escuela, puedes practicar el siguiente mantra:

Om Draam Dream Draum Sah: Shukraya Nama

Oración planetaria

También puedes utilizar el himno órfico a Hermes para invocar sus favores, recuerda encender una vela o incienso para favorecer aún más la plegaria, en este caso la deidad, Afrodita puede ser cambiada por Venus:

Celestial y por muchos himnos celebrada, sonriente Afrodita, nacida de la espuma marina, diosa engendradora y veneranda amante de la noche; emparejadora de enamo­rados nocturnos, madre de la Necesidad, tejedora de enga­ños. Pues todo parte de ti, y pusiste bajo tu dependencia el orden universal; ejerces tu poder sobre las tres partes y engendras todo cuanto existe en el cielo, en la fértil tie­rra y en las profundidades del mar , venerable compa­ñera de Baco. Que se complace en las festividades, propi­ciadora de las bodas, madre de los Amores, Persuasión que se complace en el lecho, arcana, dispensadora de gracia, visible e invisible, de hermosas trenzas, hija de ilustre padre. Comensal nupcial de los dioses, soberana, loba, prolífica, apasionada por los hombres, muy ansiada, vivi­ficadora, que enlazas a los mortales por necesidades que no admiten freno y a muchos pueblos los cautivas por la desenfrenada fuerza de la pasión amorosa. Ven, pues, di­vino retoño nacido en Chipre, ya estés en el Olimpo, sobe­rana diosa, gozosa con tu bello rostro, ya te muevas tam­bién por el suelo de Siria, rica en incienso, ya en las llanuras, con tus áureos carros, ocupes las fructíferas aguas del sagrado Egipto, ya, igualmente, en tu carro de cisnes, al ponto agitado te encamines y te alegres con las evolucio­nes circulares de los seres marinos, o bien te deleites con las ninfas de azulado rostro en la divina tierra, a lo largo de la arenosa orilla del mar entre ligeros saltos, o bien te encuentres, soberana, en Chipre, tu sustento, donde las hermosas doncellas célibes y las ninfas te celebran a lo largo de todo el año, a ti, bienaventurada, y al inmortal y casto Adonis. Ven, afortunada diosa de figura tan en­cantadora, pues te invoco con ánimo puro y piadosas palabras.

Caridad planetaria

En el día de Venus (Viernes) o a la hora de Venus, cualquier día, puedes dedicar tiempo o donar dinero a una causa relacionada con el planeta. Venus se ocupa de todas las causas relacionadas con las artes, diplomacia, belleza paz y armonía.

3. Dieta y ayuno

Si lo deseas, puedes también dedicar un día para alimentar el planeta o hacer un sacrificio por él. Puedes optar por hacer un ayuno los jueves, de amanecer a atardecer, consagrándolos al planeta.

No sobra decir que si vas a remediar un planeta, hacer la tarea un solo día no basta. Entre más incorpores estos rituales en tu vida diaria y seas consciente del trabajo que haces con el planeta de manera consciente, más favor obtendrás del mismo.

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