Marciano Martín
Aún no somos robots
3 min readApr 18, 2016

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Tiempos para la ciencia en Chile (o el desafío de ser más curiosos)

El mes de octubre ha sido, desde hace 20 años, el mes de la Ciencia y Tecnología en Chile, bajo la coordinación del programa EXPLORA de CONICYT. Una de las mayores actividades en este mes es la campaña#1000cientificos1000aulas, la cual lleva a cientos de profesionales y académicos a las aulas de colegios en Chile en un esfuerzo de escala nacional. También ocurren muchas actividades de relevancia nacional, como la Fiesta de la Ciencia hace 9 años y la 45° feria científica escolar del Museo Nacional de Historia Natural (un gran museo y uno de los mejores en redes sociales en Chile), ambas en la Quinta Normal durante la primera semana del mes.

También este año comenzó con la conferencia internacional Nuestro Oceano (Our Ocean) donde la cancillería, junto al gobierno de Estados Unidos, lideróuna actividad de escala mundial el 5 y 6 de Octubre entre Edificio del Congreso y la Universidad Federico Santa María, en Valparaíso. Otro evento de gran envergadura, por sus invitados nacionales e internacionales es la Conferencia de Cultura Científica, organizada por la Universidad Andrés Bello y liderada por el divulgador y biólogo de plantas @gabotuitero.

Lo cierto es que en Chile se hace mucha ciencia con muy poco. Esto podría tener mucho más impacto, relevancia y productividad intelectual bajo el establecimiento de una política que potencie la cultura científica nacional.

Este año también ha sido denominado por la Unesco como el “Año Internacional de la Luz”, por lo que también diversas actividades organizadas durante este octubre han tenido énfasis en la radiación electromagnética más veloz del universo. El Departamento de Física (DFI) de la Universidad de Chile ha tenido una parrilla de actividades, donde su ciclo anual de charlas ha reunido a cerca de 2.500 personas en las ya 8 versiones en los mediodías de los primeros miércoles del mes. Son muchas las actividades que han pasado en paralelo durante nuestro mes de la ciencia y tecnología.

Lo cierto es que existe una enorme cantidad de trabajo tras los científicos, tecnólogos y divulgadores en Chile, pero siempre desde su motivación de compartir lo bello, asombroso e importante de sus saberes. Pero una enorme debilidad es la falta de una red que cohesione y potencie dichos esfuerzos, como lo hacen hoy agendas gastronómicas, artísticas y turísticas. Pero también hay que reconocer un problema de política pública: el gobierno de Chile no es consistente en hacerse responsable de la investigación e innovación en Chile, menos de la valoración pública de esta.

El gobierno de Chile ha mantenido en la postergación la política nacional en ciencia y tecnología desde incluso antes de la dictadura. Esto lo devela la reciente reincorporación del consejo de Conicyt, la disgregación de organismos de su sistema nacional de innovación y la falta de un discurso aunado. Mientras algunos hablan de luz, otros lo hacen de océano, mientras unos dicen innovación otros hablan de sociedad del conocimiento. Mientras muchos luchamos por una institucionalidad, otros insisten en mantener lo que hay. Una maraña de conceptos sin una dirección clara ni un plan que deje contento a nadie.

El gobierno de Chile ha mantenido en la postergación la política nacional en ciencia y tecnología desde incluso antes de la dictadura.

Lo cierto es que en Chile se hace mucha ciencia con muy poco. Esto podría tener mucho más impacto, relevancia y productividad intelectual bajo el establecimiento de una política que potencie la cultura científica nacional. Las iniciativas listadas arriba son solo un florete de las oportunidades que están existiendo en este mes. A pesar de esto, la última encuesta de percepción de la Ciencia y Tecnología por parte de la ciudadanía le dio la última prioridad como política pública. Esto es solo un síntoma de la desafección nacional por el conocimiento, por la lectura, la inventiva y el saber de la opinión pública y de su clase política.

La invitación en lo que queda de octubre es a abrir la mirada. Y si ya la tienes abierta, a problematizar a otro (familiar, amigo, pareja) a hacerse consciente de esta necesidad. Porque las oportunidades sobran en el mundo de la curiosidad. Vamos por él.

Publicado originalmente en MQLTV http://mqltv.com/tiempos-para-la-ciencia-en-chileo-el-desafio-de-ser-mas-curiosos/

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