16 de Febrero: Conecta

Reflexionamos sobre los sacrificios de las personas más vulnerables al cambio climático. En la zona rural de Camerún, los efectos del cambio climático, causado por los seres humanos, tienen una consecuencia inesperada que es menor acceso a la educación superior. Los cameruneses que viven en aldeas rurales tienen un ingreso promedio de $ 40- $ 50 mensuales, la venta de productos de huerta, como los plátanos y la yuca, les brinda a estas familias los medios económicos para educar a sus hijos y que tengan mejores oportunidades laborales.

Sin embargo, las altas temperaturas y la escasez de lluvia han reducido drásticamente el rendimiento de los huertos familiares, esto se traduce en menores ingresos, lo que obstaculiza el acceso a la educación para la futuras generación.

Meditamos sobre los sacrificios que las familias camerunesas hacen debido a nuestras acciones cotidianas. Consideremos cómo podemos reducir parte de nuestro consumo excesivo en pos de un mundo más justo.

Te invitamos a conectarte con estas personas vulnerables, tal vez tu diócesis tiene una diócesis hermana. Dedica unos minutos a aprender cómo el cambio climático afecta la región a la que está conectado, reza por profundizar las relaciones con aquellos que están arraigados allí.

“Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros. De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros.” (Juan 13:34–35)