Un Secreto que se grita a voces. Lo nuevo de Nat Bieler
La cantautora caleña lanzó este pasado 12 de marzo su más reciente sencillo “Secreto” con el que encabeza su nueva producción.
Nat siempre ha tenido el toque mágico de crear canciones que transportan a momentos ya vividos, a pesar de que dichas canciones son recientes. La nostalgia que vive dentro de los acordes del bambuco fue la base melódica para “Secreto” y junto a sonoridades afro, europeas y latinas, creó junto al pianista y arreglista Giovanni Caldas un sencillo cargado de sensualidad y añoranza.
La exploración del Gótico Tropical ha sido una bandera dentro del proceso creativo de Nat, pero ¿Cómo juntar este concepto que proviene de la literatura con la música y con la causa feminista? Por eso quise hablar ella, para encontrar respuestas, para que desglosáramos un poco lo que se avecina a partir de este primer sencillo del año.
Escuche y vea el estreno acá:
Contanos un poco a cerca del concepto pop gótico tropical en el que enmarcas esta canción y sobre cómo lo enlazas al bambuco.
El gótico tropical no es un concepto mío, sino que se deriva de La mansión de Araucaima de Álvaro Mutis (una novela gótica desarrollada en el trópico, Luis Buñuel insistía que no era posible realizarla acá, dado el contraste de ambos mundos) y su posterior adaptación al cine por parte de Carlos Mayolo. Siempre he sido muy fan del arte que se hizo en la Cali en los setentas: Andrés Caicedo, Luis Ospina, Karen Lamassone (quien de hecho me permitió usar una de sus pinturas como portada de mi canción “Perderme en ti").
Cuando empecé a investigar más sobre ello, me di cuenta que las canciones que hacían de soundtrack de obras como Que Viva la Música, fueron las principales influencias en mis composiciones en géneros como rock, blues, funk, y la salsa, que todavía no he explorado. En los últimos años me he sumergido en ese mundo, imaginando cómo suena esa Cali apocalíptica, gótica tropical (gótica como analogía al mal, las pasiones desenfrenadas, lo misterioso, y tropical en referencia a nuestra geografía, calidez y colorido), así que mezclando elementos y contrastantes como el ritmo de algunas músicas folclóricas nuestras (bambuco) con las armonías del jazz, uniendo arreglos de voz en soul y gospel, que ya había trabajado antes, y empleando un sonido inclinado hacia lo electrónico, he ido definiendo lo que para mí es el pop gótico tropical: un pop diverso, rico en influencias, y que un día puede sonar a salsa y otro día a punk, pero que siempre tiene detrás un mensaje específico para la sociedad. En el caso específico de Secreto, una crítica hacia la objetificación del cuerpo femenino.
¿De qué se trata la campaña «No es un secreto, no soy un objeto» a la que te unes con este lanzamiento?
Para hacer más contundente el mensaje de Secreto, y a propósito de todos los debates que suelen suscitarse alrededor del Día Internacional de la Mujer, con el FEMMES Fest nos aliamos para que este lanzamiento se convirtiera en una pieza central de la campaña “No es un secreto, no soy un objeto”, que llevamos a cabo en la marcha en Cali del 8M. La cosificación sexual es un fenómeno que va desde la valoración sexualizada de los cuerpos de las mujeres hasta las prácticas más negativas y brutales, como son el tráfico sexual y la violación, y siendo más común que este fenómeno afecte a mujeres que a hombres decidimos que para el videoclip daríamos la vuelta al estereotipo de las mujeres como objetos o adornos, que tanto se ha popularizado en los videos musicales, y pusimos hombres en su lugar. No se trata de ofender, pero sí dar a entender que ni hombres ni mujeres se ven bien ahí, que las personas son seres con sentimientos y complejidades, y la publicidad se ha encargado en muchos casos de invisibilizar, y que por encima de todas las cosas cada quien merece respeto.
¿Cómo se construye la idea de este videoclip que sale junto a la canción?
El videoclip de cierta forma es una ironía a la canción, pues ésta última es una historia de romances fallidos que a pesar de no llegar a nada dejan huella en una, eso visto desde un lente nostálgico e inocente. La escribí pensando en algún amor que no funcionó, y que luego me di cuenta que no era un himno para uno sino para muchos, así que partiendo de ahí quisimos poner a todos estos hombres dentro de acciones cotidianas donde ellos se convierten en paisaje, es decir, recuerdos. El hecho de enlazar todo esto a una crítica social simplemente hizo clic, pues es algo en lo que vengo enfatizando con mi trabajo de los últimos años.
Siempre serás una de las mejores canciones de casi amor, que escribiré en este tiempo.
Escuche a Nat Bieler aquí:
