Jordan Howard aún tiene asuntos pendientes en Puerto Rico
El armador de los Brujos de Guayama regresa decidido a completar el cambio de cultura en la franquicia.
Por Emmanuel Marquez para Prensa BSN
Fue un viaje corto de negocios y solo cinco partidos con los Brujos de Guayama en el Baloncesto Superior Nacional de Puerto Rico, pero Jordan Howard dejó bastante claro que tenían que contar con él en la liga. Antes del parón por el Covid 19, su aportación de 20 puntos, 4.4 asistencias, 2.6 rebotes y una efectividad al triple del 58% por juego, fueron claves para promover un cambio de cultura en la franquicia sureña que los dejó con balance de 4 victorias y 2 derrotas, y las ansias de continuar ganando.
“Yo vine aquí con la meta de cambiar la narrativa del baloncesto en Guayama y ponernos de nuevo en la ruta como un equipo y una cultura ganadora”, dijo Howard desde Arizona. “Yo siento que eso es lo que hemos estado haciendo porque en los últimos años no habían llegado a los playoffs. Siento que nosotros, definitivamente no tan solo yo, sino el equipo completo, tenemos algo que probar y sentimos que somos unos de los mejores equipos en la liga”.
Ahora, ante la posibilidad de reanudar la temporada bajo un formato de burbuja, renacen en el armador de 24 años las expectativas y la emoción por volver a hacer lo más que ama, jugar baloncesto. Porque para Howard falta mucho por lograr, quedan negocios pendientes y hay que cerrar el trato que comenzó en Puerto Rico.
Por eso el reloj de alarma suena todos los días a las 4:30 de la mañana y Howard, su hermano Markus, una auténtica máquina de hacer puntos recién salido de la Universidad de Marquette que espera su turno para entrar a la NBA, y su papá, Chuck, un experto en entrenamiento físico, lo contestan con la misma rapidez de hace 20 años para ir al gimnasio. Luego, a las 6:00 am, es la hora de trabajar en la cancha y allí lo espera su hermano mayor Desmond, dueño del centro de entrenamiento de baloncesto League Me, para perfeccionar ese drible tipo maquinilla de Howard que lo hace tan escurridizo en la cancha y aceitar la mecánica para que su tiro a larga distancia siga funcionando como un rifle. Comidita, recreo, descanso y a las 4 de la tarde regreso a la cancha para una sesión de tiros desde todos los ángulos posibles y siempre exigiendo que se enceste en ristra.
Cuando no está practicando, Howard consume su tiempo libre creando y editando videos para su canal de Youtube “The Howard 3”. El armador obtuvo un grado de bachillerato como Cineasta Digital de la Universidad de Central Arkansas — donde además fue un estudiante de honor — , y le ha sacado provecho durante la cuarenta.
“Mi mentalidad ha sido la de enfocarme con toda la incertidumbre que ha habido durante todo este tiempo. Yo no sé qué va a pasar, es cuestión de mantenerse positivo y continuar trabajando porque nunca sabes cuándo va a llegar esa llamada y tendrás que estar listo”, sostuvo Howard.
Abiertamente un hombre de Fe, Howard elige pensar positivo y tener siempre en mente que “las cosas podrían ser peor”. El jugador confía en que si continúa trabajando fuerte las cosas mejorarán y disfruta el hecho de que por primera vez en casi seis años, la familia Howard completa ha podido pasar más tiempo de calidad juntos.
Una vez anunciada la cancelación de la temporada y con el avión despegando desde el aeropuerto Luis Muñoz Marín en San Juan con ruta a Phoenix, Arizona, Howard pensó que se trataría de no más de un mes de inacción. Era el momento perfecto para recuperarse de una lesión en el tobillo que sufrió en su quinto partido con los Brujos y regresar al ataque. Seis meses después, aquí estamos, con la pandemia por Coronavirus aún rampante, pero con las ganas de regresar a las canchas más vivas que nunca.
El timing fue alocado porque yo me doblé ese tobillo bastante grave, así que probablemente iba a estar fuera [de juego] más tiempo del que esperaba”, manifestó Howard.
“Así que fue como una bendición pausar la temporada y poner mi tobillo al cien por ciento como lo está ahora. Estoy de regreso al 100 por ciento y me siento genial. Poder venir aquí [Arizona] y recuperar mi tobillo fue un gran plus”, dijo el armador cuya madre Noemi, de padres puertorriqueños, siempre ha dejado claro las raíces boricuas de su familia repitiéndole a Jordan que, “¡tú eres mitad afroamericano y mitad puertorriqueño, siempre recuérdalo!”.
Aunque se trató de solo cinco partidos en uniforme, Howard expresó que la oportunidad en Puerto Rico rindió buenos frutos tanto a nivel individual como colectivamente. No tan solo puso a Guayama de vuelta en el panorama competitivo, sino que también corroboró en primera persona todos los rumores que había escuchado del BSN a través de los años.
“Siempre tuve un respeto definitivo por la liga porque han salido muchos grandes jugadores de ella, pero muchos buenos jugadores todavía participan en la liga y muchos buenos jugadores hablan con todo el respeto de ella. Y por supuesto Puerto Rico es un lugar hermoso donde todos quieren estar. Así que tener baloncesto de tan alto nivel allí fue otra cosa que me hizo querer llegar más aún. Pienso que fue el pareo perfecto y el momento resultó perfectamente para que yo viniera esta temporada”, subrayó.
Cuando se canceló la temporada en marzo, los Brujos eran el equipo con más partidos jugados [6] y se encontraban en el tope del standing. La combinación de Howard junto a Gaby Belardo, Juan Pablo Piñeiro y José “Money” Rodríguez estaba perfectamente en sintonía, y los refuerzos Will Daniels y Ben McCauley rendían mejores dividendos que los esperados. Con la interrupción queda la duda de si Guayama en efecto podrá retomar tal ritmo nuevamente. Howard piensa que habrá que comenzar desde cero.
“Nosotros hubiéramos querido seguir jugando porque íbamos por el camino correcto para tratar de ganar y tener la oportunidad de ser uno de los mejores jugadores en la liga al final de la temporada. Pero el virus es algo que no podemos controlar, así que ahora tenemos que regresar a trabajar y hacer exactamente lo mismo. Construir desde donde comenzamos y esperamos llegar aún más fuerte que antes”.
Luego de pasar por la vida colegial lejos de casa en la universidad y sus participaciones profesionales en la G-League de la NBA y la liga de Corea del Sur, Howard dice estar listo para adaptarse y rendir en cualquier escenario, incluyendo el formato de burbuja que ha propuesto el BSN.
“En mi caso definitivamente estoy listo. Por supuesto será difícil porque mucha gente no están acostumbrados a tener todo ese tiempo [libre] y estar aislados, pero sé que el BSN hará un buen trabajo de organizarlo y al final del día es un periodo corto de tiempo. Es un pequeño sacrificio, pero sé que todos quieren regresar a jugar cualquiera que sea la manera. Yo estoy emocionado por regresar y sé que no será tan difícil porque al final podemos vivir de jugar baloncesto y eso por sí solo es una gran bendición”.
Jordan Howard tiene licencia para tirar en Guayama, y por lo que ha demostrado durante su carrera, el techo del Wyndham Grand Rio Mar no debe ser problema para seguir encestando.
