Ilustración de una ballena azul nadando en el océano

El papel del océano en la reducción del CO2

Sandra Manrique
Bulb España
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4 min readJun 7, 2021

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Evitar emisiones de CO2 es vital para luchar contra la crisis climática. Pero también tenemos que trabajar en capturar el CO2 que ya se ha emitido. Mientras la industria energética explora cómo conseguir esto en la tierra, los océanos llevan ya mucho tiempo absorbiendo y secuestrando CO2 para que no llegue a la atmósfera.

Los árboles son una buena comparativa

Cuando le contamos a los usuarios de Bulb que han reducido sus emisiones de media en 906 kg de CO2, normalmente lo comparamos con el número de árboles que necesitaríamos para secuestrar esa cantidad de CO2 del aire (314 albaricoqueros, para ser más exactos). Esto es similar a lo que hace el fitoplancton en nuestros océanos, pero quizá la comparativa sonaría demasiado rara en un email (no estamos tan familiarizados con el fitoplancton).

El potencial del océano para retener CO2 se pasa a menudo por alto. Un árbol secuestra carbono mientras está en pie (esperamos que sea mucho tiempo) y podrían pasar décadas antes de que el carbono se libere de nuevo al aire. Pero cuando el carbono llega a las profundidades del océano, se mantiene alejado de nuestra atmósfera durante cientos (si no miles) de años en forma de huesos de animales, sedimentos o materiales vegetales.

Hay muchas maneras en las que el océano retiene el CO2.

Líneas de costa

El carbono capturado por los ecosistemas costeros se llama carbono azul. Los marismas de sal, los humedales o los manglares son excelentes para secuestrar carbono (extrayéndolo del aire) porque las plantas que viven en estos entornos tan ricos crecen muy rápidamente. De hecho, hay estudios que sugieren que los humedales en realidad capturan carbono 10 veces más rápido que las selvas tropicales maduras. El suelo en sí también es importante. Suele ser anaeróbico, lo que significa que carece de oxígeno. Las plantas se descomponen mucho más lentamente en suelos anaeróbicos, por lo que el carbono almacenado en esas plantas tarda más en encontrar su camino de regreso a nuestra atmósfera.

Animales marinos

Todos los vertebrados marinos almacenan carbono en sus cuerpos. Las ballenas son un gran ejemplo, porque pesan mucho y viven siglos. Durante su larga vida, las ballenas acumulan una gran cantidad de carbono en su grasa y su potencial de almacenamiento no se detiene ahí. Cuando una gran ballena muere, se hunde hasta el fondo del mar, capturando la impresionante cantidad de 33 toneladas de CO2. A partir de aquí, el carbono pasa a cualquier criatura hambrienta de las profundidades marinas y, finalmente, al sedimento, donde puede permanecer encerrado durante miles de años. Las ballenas también juegan un papel importante en la difusión de nutrientes a través del océano, en parte gracias a sus movimientos gigantes y en parte gracias a sus excrementos gigantes. Estos nutrientes ayudan a desarrollar poblaciones de fitoplancton. Lo que nos lleva perfectamente a …

Plantas marinas

El fitoplancton son plantas marinas unicelulares que flotan libremente y también son pequeños expertos en captura de carbono. Como las plantas terrestres, utilizan CO2 y producen oxígeno durante la fotosíntesis. Se estima que al menos el 50% del oxígeno en nuestra atmósfera proviene del fitoplancton y que estas superestrellas microscópicas absorben aproximadamente 4 veces más CO2 que la selva amazónica.

Las plantas marinas más grandes (macroalgas) como el kelpo, también podrían desempeñar un papel importante en la lucha contra la crisis climática. El quelpo puede crecer a una velocidad de 60 cm por día, y tiende a disfrutar de las condiciones rocosas cerca de la costa. Cuando estas rocas se erosionan, o cuando se desprenden trozos de algas marinas, la materia vegetal flota hacia el mar y se hunde, almacenando CO2 en el fondo marino profundo (un poco como nuestras amigas, las ballenas). Los científicos han sugerido que las macroalgas capturan alrededor de 200 millones de toneladas de CO2 cada año. Eso es lo mismo que las emisiones anuales del estado de Nueva York.

Absorción en la superficie del océano

Además de las plantas y los animales, el agua de mar juega un papel en la absorción de carbono. Eso es porque el CO2 se disuelve en la superficie del océano. Y el mar es enorme, no lo olvides. Se estima que el mar absorbe el 30% de las emisiones de CO2 provocadas por el ser humano. Pero hay un problema: a medida que los humanos emitimos más gases de efecto invernadero a la atmósfera, estamos alterando también la química del agua de mar haciéndola más ácida. Y esto tiene efectos colaterales en la vida marina.

Proteger los océanos es una forma muy importante de prevenir la catástrofe climática

Está claro que el mar juega un papel vital en mantener el CO2 fuera de la atmósfera. Por eso tenemos que proteger la biología marina para frenar la crisis climática: debemos apostar por la restauración de las marismas saladas y la protección de las poblaciones de ballenas, sin olvidarnos de preservar los bosques de algas marinas.

Hay muchas organizaciones que están haciendo un trabajo fantástico para proteger nuestros océanos, como Oceana o WWF. Te animamos a colaborar con estas iniciativas y a informarte aún más sobre el tema. Además, aquí te dejamos 10 consejos para cuidar los océanos que podrían servirte de punto de partida para aportar tu granito de arena.

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Sandra Manrique
Bulb España

Simpler, cheaper, greener. Ser respetuoso con el planeta no tiene por qué ser caro.