Afrontando la crisis climática con mentalidad emprendedora
Este verano tuve la oportunidad de participar en la mayor escuela de innovación, aceleración y movilización de estudiantes hacia una sociedad más sostenible y resistente al cambio climático del EIT Climate KIC; Journey.
EIT es el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología y han creado esta iniciativa enfocada al emprendimiento e innovación por el cambio climático en el que durante un mes hemos conocido 3 ciudades europeas: Limassol (Chipre), Riga (Letonia) y Hamburgo (Alemania). El objetivo era encontrar soluciones para crear una sociedad resistente, sostenible y adaptada.
Una experiencia única que busca ampliar horizontes a los jóvenes europeos y hacernos conscientes de que no estamos solos; hay mucha gente dispuesta a dedicar su tiempo y su vida a encontrar soluciones sostenibles y crear un impacto positivo. Un mes compartido con otras 39 personas de distintos perfiles y de las que he podido aprender más de lo que me habría imaginado.
He vivido de primera mano cómo gracias a la combinación de perfiles completamente distintos (ingeniería de energías renovables, agricultura sostenible, inversión de impacto, emprendimiento, economía circular, oceanografía, urbanismo sostenible, desperdicio de alimentos, gestión del agua, cambio climático, negocios y más), hemos podido desarrollar de forma plenamente colaborativa y multidimensional soluciones muy potentes de cara a los retos climáticos actuales. Formas de pensar y crear muy distintas, y que sin embargo, hemos complementado para buscar soluciones a un mismo objetivo.
Cada día, por no decir cada minuto, hemos aprendido, explorado y debatido sobre temas como el cambio climático, cuán sostenible puede llegar a ser la sociedad y cómo cambiar los sistemas que hemos ido empeorando nosotros como seres humanos a lo largo de la historia.
Tenía muchas dudas en cuanto a lo que yo podría aportar en esta beca teniendo en cuenta que mi perfil era de todo menos científico o técnico, pero con mi experiencia en Byld, pude dar el punto de vista de negocio y emprendimiento, un aspecto del que muchos ingenieros o científicos se suelen olvidar.
Limassol, Chipre “Defining trajectories”
Llegamos a Chipre sabiendo que iba a ser un mes donde nos retaríamos a nosotros mismos y yo intuía que algo iba a cambiarme. Lo que no sabíamos era lo impactante (nunca mejor dicho en este caso) que iba a ser para nuestro futuro.
Comenzamos nerviosos, no teníamos ni idea de qué nos esperaba. Los primeros días fueron muy intensos, nos dedicamos 100% a team building y de la mano de nuestros coaches, conseguimos crear un espacio totalmente abierto para mostrarnos tal y como somos, guiaron este viaje de tal manera que todos nos sentíamos cómodos y con mucha confianza. El objetivo antes de dejar Chipre era tener un equipo con el que posteriormente desarrollar una idea.
System mapping
Gran parte de los aprendizajes se centraban en torno a System mapping. Es una herramienta utilizada para desarrollar ideas innovadoras a los problemas actuales, para cambiar el sistema. Como punto de partida, se plantea el tema o reto en el que queremos centrarnos y escribimos los distintos elementos que pueden formar parte de ese sistema. Con esto averiguamos cada uno de los elementos que tienen influencia, ya sea positiva o negativa, en un sistema. Una vez se han terminado de definir los elementos, comenzamos a unir unos con otros para ver la relación que tienen. Al ver esto, podemos sacar insights que previamente no eran tan obvios e investigar más a fondo sobre ellos.
Durante estos primeros días hicimos mucho trabajo que de cara a cualquier persona puede resultar muy distinto, pero en Byld forma parte de nuestra metodología. La primera fase, a la que llamamos Deep Dive, consiste en hacer una investigación profunda sobre los territorios elegidos, salir a la calle a hablar con los locales, hacer entrevistas con expertos del sector y conocer qué están haciendo las incubadoras de la zona. El objetivo de este proceso inicial es entender la industria, qué retos y tendencias para sobretodo entender el problema que existe y empezar a plantear soluciones.
Gracias a Systems Mapping y el proceso de investigación, pudimos ir bajando los conceptos y retos abstractos a trayectorias un poco más definidas. Esta herramienta se puede combinar con otras que utilizamos en Byld como la de Personas, Mindmaps, Mapa Stakeholders, horizontes de innovación, la cadena de valor y las tendencias del sector que se esté analizando. Systems mapping aportará mucho valor a futuros proyectos de Byld, hay proyectos que nos llegan con una trayectoria más o menos definida, pero otros en los que el territorio de enfoque es mucho más amplio. Es en estos casos en los que esta herramienta facilita ver la estructura de todo el sistema.
Fuimos de los retos más generales a trayectorias más específicas:
- Consumo excesivo como consecuencia de la falta de confianza en uno mismo.
- Falta de información sobre productos sostenibles.
- Falta de motivación para reducir el consumo.
- Desconfianza en las autoridades y gobierno para llevar a cabo iniciativas de los ciudadanos.
- Falta de conexión con la naturaleza en las ciudades.
- Revalorización de los productos.
Fue en el último día en Limassol cuando se consiguieron definir los equipos. Un proceso normalmente complicado ya que no conoces la experiencia del resto de participantes o su forma de trabajar, pero los coaches consiguieron que este proceso fuese lo más sencillo y natural posible. Con la ayuda de los coaches pudimos encontrar nuestros equipos y que cada persona pudiese aportar su conocimiento y motivación al tema elegido.
Riga, Letonia “Prototype or die”
Los días cada vez se iban haciendo más cortos y el tiempo pasaba más rápido. Y todavía no habíamos definido la idea final. Conforme pasaban las horas íbamos iterando hacia conceptos cada vez más distintos al original. Algunos equipos lo tenían muy claro desde el principio, pero la mayoría no fuimos capaces de decidirnos por una idea hasta el último momento. Y esto nos pasa constantemente en Byld que llevamos a cabo varias sesiones de Concept Sprint y Brainstorming hasta dar con un concepto con el que tanto nuestro partner como nosotros estamos contentos.
En Riga fue una semana donde desarrollamos más el modelo de negocio del concepto. Aquí pudimos comprobar la viabilidad del proyecto, sus posibles limitaciones y los siguientes pasos para implementarlo. Esta semana corresponde con la segunda fase en la metodología de Byld; Labs, en la que pasamos de una oportunidad de mercado a un proyecto real. El laboratorio de RTU Design Factory de la Universidad de Riga nos aportó los materiales necesarios para hacer los primeros prototipos (impresoras 3D, láser) y los organizadores del Journey nos facilitaron los contactos de emprendedores especializados en los temas de cada uno de los proyectos para empezar la validación de la idea. Debatimos con ellos sobre los distintos modelos de negocio de cada una de las ideas, aprendimos de sus fracasos y de cómo consiguieron sacar sus ideas adelante. Fue aquí cuando pasamos a validar la propuesta de valor con un pequeño MVP con potenciales clientes reales.
Durante esa semana utilizamos algunas de las herramientas que también usamos en el proceso de Byld, aunque en Byld siempre estamos constantemente buscando.
Brainstorming
Pudimos participar en workshops de creación de soluciones de una manera más creativa. Expertos en UX y Diseño que nos ayudaron a enmarcar nuestro reto en una pregunta que permite un mayor foco, pero abierta a la creatividad.
Financial Tools
Tuvimos un workshop sobre contabilidad, balances, etc, pero de una manera muy básica ya que para la mayoría de participantes era un tema totalmente nuevo.
Sustainable Business Model Canvas
Esta parte fue la que me hizo darme cuenta de lo poco integrado que está la mentalidad de emprendimiento y negocio en las carreras de ingeniería. Era la primera vez que veían un BMC y la primera vez que se cuestionaban este tipo de preguntas en sus ideas. Aquí pusimos un mayor enfoque en el Sustainable Business Model Canvas.
Problem Mapping
Hablamos sobre las herramientas Ishikawa, 5 Whys, Problem Tree o Root Cause Análisis, también muy presentes en la metodología de Byld.
“Since change is here to stay, problems are here to stay …… Forever!” (Ichak Adizes)
Viendo como la mayoría de los que estaban ahí nunca habían estudiado la parte teórica de emprendimiento o design thinking, me di cuenta de la importancia de combinar perfiles de ingeniería y negocio para conseguir ideas mucho más disruptivas. Los ingenieros tienen las ideas más originales y somos los de negocio los que conseguimos que las ideas que parecen una locura puedan salir al mercado y hacerse una realidad. Y esto es especialmente importante en ideas para atacar el cambio climático que suelen requerir una orientación de negocio para poder ser ejecutadas.
Terminamos nuestra semana de validación y prototipado en Riga y viajamos en autobús hasta Liepaja, en la costa de Letonia, donde cogimos un ferry hasta Alemania para intentar viajar de la manera más sostenible posible.
Hamburgo, Alemania “Joining forces”
En la última etapa de Journey, al igual que en Byld, es la fase en la que la idea se hace “real”. Hicimos el deck de la idea, con su business plan completo: problema, oportunidad, solución, modelo de negocio, marketing, gastos y siguientes pasos.
Nos reunimos en Hamburgo junto con el resto de 140 participantes de otros Journey para presentar nuestros conceptos durante el que fue el primer Climate KIC Summit. Una semana de charlas, pitches de las ideas y conferencias inspiradoras donde participaron Sandrine Dixson-Decleve o Kristen Dunlop, CEO de Climate KIC.
Esta fue la última etapa antes de crear la startup como tal que más tarde podría participar en otros programas de emprendimiento de Climate KIC, como la incubadora (Greenhouse), la aceleradora o en la competición de startups verdes (Climate Launchpad) además de ofrecer una amplia red de posibles inversores.
Todos estos nuevas amistades y conocimientos me han empujado a seguir este camino hacia la búsqueda de ideas sostenibles. Nos hemos ido, pero no despidiéndonos, si no con un sentimiento de pertenecer a una gran comunidad.
Una experiencia en la que se han unido lo mejor de los mundos del negocio y la ingeniería, donde jóvenes de toda Europa han unido sus fuerzas y conocimientos para buscar soluciones a la crisis climática.
Como dijo Sandrine Dixon:
“This is not about technology anymore, this is no about innovation anymore, it’s about the social change and that change starts with us.”
Empezamos el mes como completos desconocidos, pero nos vamos habiendo formado una gran comunidad. Una comunidad en la que nos apoyaremos para seguir innovando y creando ideas para mejorar el mundo.
