¿El futbol mexicano es socialmente responsable?

Hacer campañas en Pro de causas no lo hace tener esa categoría, tener una certificación tampoco… ¿sus prácticas empresariales son honestas, adecuadas?

Eduardo Hernández Castro
Cámara Húngara
4 min readSep 14, 2017

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El balón rosa rodó en el futbol mexicano por primera ocasión en 2007, cuando Alejandra De Cima encontró la vitrina de la Primera División para mandar un mensaje de conciencia.

En ese entonces, Voit y la Federación Mexicana de Futbol, a través del torneo de la Máxima Categoría, crearon una edición especial del balón oficial de la competencia, con el distintivo color rosa y con el cual se jugarían cinco jornadas de octubre, el mes que conmemora la lucha contra el cáncer de mama.

“Agradezco muchísimo a Voit y la iniciativa de crear este balón Tribu rosa y a la FMF por creer en la fundación, en nuestra lucha y por ver por las mujeres en un deporte de hombres”, fue el mensaje oficial de Decio de María, entonces secretario general del organismo.

Dos años después, la federación mexicana recibió por primera vez el Certificado de Gestión de la Calidad por parte de la Asociación Española de Normalización y Certificación, una de las instituciones que acreditan a las empresas con buenas prácticas laborales, calidad de servicios, seguridad, innovación de prácticas, protección al ambiente y responsabilidad y vinculación con la sociedad.

“Una empresa con responsabilidad social no recurre a prácticas desleales de mercado, no da mordidas, cumple con las legislaciones vigentes fiscales, es transparente en la contratación y en la venta de sus productos”, indica Alfredo Bernabes, investigador de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana.

La federación mexicana de futbol lleva nueve años revalidando una certificación que, destaca el certificado en el sitio oficial de la Liga MX, “organización, reglamentación, administración y control de las competencias oficiales a nivel nacional e internacional para la Liga MX/Ascenso MX y selecciones nacionales, diseño, actualización y realización de de cursos y eventos avalados por la FMF, servicios de tecnologías de información, realización de trámites jurídicos, prestación de servicios en concentraciones: hostelería, servicios médicos y fisioterapia, servicios de crecimiento personal e instalaciones deportivas, conciliación y resolución de controversias ante afiliados de la FMF.

En una nota informativa publicada en el sitio oficial del torneo mexicano se destaca que a nivel mundial la Liga MX fue de los primeros torneos de futbol en obtener una certificación de calidad en gestión. Desde hace cinco años el Centro Mexicana para la Filantropía (Cemefi) le otorga una segunda certificación por ser una Empresa Socialmente Responsable.

¿Qué hace el futbol mexicano como empresa para lograr un certificado de calidad de gestión?

La FMF ha pagado 2.5 millones de pesos a la FIFA por no poder erradicar un grito considerado homófobo por las autoridades del balompié; tampoco ha logrado que uno de sus agremiados (Lobos BUAP), pueda cerrar un contrato de derechos de transmisión y mantiene demandas con árbitros, exjugadores (caso Salvador Carmona) y los incidentes de violencia siguen apareciendo periódicamente.

Según documentos del Cemefi, la sociedad reconoce el valor de contar con empresas con una gestión socialmente responsable. Los consumidores más conscientes eligen productos y servicios dependiendo del compromiso de las empresas, por lo que también cuestionan y castigan a las compañías de acuerdo con sus comportamientos sociales.

“La responsabilidad social basada solamente en el marketing está desapareciendo”, describe Jorge Villalobos, presidente ejecutivo de Cemefi.

La Liga MX no hace donaciones sobre las campañas de responsabilidad social que mantiene, además del balón rosa para cáncer de mama, implementó en años posteriores causas por la educación, medio ambiente, cultura física, discapacidad física.

El periódico El Economista informó que las campañas sociales llegaban al 75% de la población de México, tomando en cuenta las personas afectadas, beneficiadas y casos que cada año se presentan según cada una de las causas que se ha comprometido el futbol mexicano.

“ Es una campaña de impactos, mensajes para mandar las señales correctas, es un tema importante en el que debemos trabajar todos”, expresó Decio de María en 2013.

En el sitio de la Liga MX se observa tres actividades en el apartado de Ligarse, donde se explican las tareas de responsabilidad social del futbol mexicano. Grassroots México es una iniciativa que consiste en organizar torneos para niños de 6 a 12 años en comunidades apartadas.

Arcoiris de balones consiste en las campañas que tienen como imagen los balones de futbol, generando un impacto mediático y por último se encuentran las tareas individuales que emprenden los clubes.

El sitio especializado en responsabilidad social Expok señala que existen puntos débiles en la estrategia de ESR del futbol mexicano, tomando en cuenta que que no existe una estrategia clara sobre la definición de los proyectos y no se pueden medir los logros conseguidos con la ayuda aportada.

“No se presenta una justificación del por qué se lleva a cabo este tipo de programas, cuál es la meta que se pretende alcanzar o cuál es el impacto positivo que se espera exista para la población a la cual está dirigida este programa”, señala el portal.

Según sitios especializados, una certificación de calidad cuesta 100,000 pesos, la revalidación cada año una cifra similar. La federación mexicana de futbol tiene vigente su certificado de gestión de calidad hasta mayo de 2018.

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Eduardo Hernández Castro
Cámara Húngara

Reportero de deportes en El Economista y colaborador para Cámara Húngara. El deporte, sus protagonistas y derrotados son inspiración para contar historias