Carola Fernández
Carola Fernández
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2 min readJun 26, 2018

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¿Por qué la Gestalt?…en mi vida.

Realmente no lograba enamorarme de la psicología hasta que conocí la Gestalt.
Me era entretenido estudiar psicología, pero cuando me proyectaba en la carrera, no lograba verme como psicóloga y al mismo tiempo siendo yo misma.
La Gestalt llegó de manera accidental, gracias a los libros de Violet Oaklander…antes de eso, había estudiado 5 años de psicología sin saber nada del enfoque.
Me enamoré de la autenticidad del terapeuta, de la posibilidad de usar variados recursos en psicoterapia, amé que mi creatividad (lo que más aprecio de mi misma) tuviera un lugar en el ejercicio profesional y que el cuerpo fuera un protagonista. Amé que aquí el ser psicóloga no me hacia ni más heroica, ni más sabia…en la Gestalt a quien le llamamos paciente es el de la sabiduria (no el de la patologización).
Luego me enamoré de los procesos de quienes confiaban en mi como psicóloga, amé ver tanto florecimiento…amé acompañar en las sombras, en el malestar.
Amé aprender la gestalt, amé el miedo que sentía antes de cada ejercicio al saber que me daria cuenta de algo acerca de mi misma.
Admiré y sigo admirando a mis profesores, quienes valientemente han mantenido este enfoque vivo y fértil en Chile.
Y como dijo José, compañero de mágister, el día de la titulación… “no es posible volver a ser la misma persona después de esta formación”…y yo agregaría…porque ahora somos más nosotros mismos que antes.
Leer el discurso (que era algo más gestáltico que esto que escribí hoy) me permite cerrar y agradecer con alegria, aquel camino que hizo que trabajar en mi profesión fuese siempre un agrado y un regalo…más que un trabajo.

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Carola Fernández
Carola Fernández

Psicóloga Clínica, amante de la terapia Gestalt y Terapeuta Sexual.