La Gente vs. Los Contaminadores

Un comentario sobre la Cumbre del Clima de la ONU

Ben Goloff
Center for Biological Diversity
5 min readDec 20, 2018

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Cientos de participantes de la Cumbre del Clima se sientan en las escalinatas para exigir más de las personas que toman las decisiones a nivel global. (Corporate Accountability)

Acabo de regresar de la ciudad de Katowice, Polonia, un país completamente dependiente del carbón y una ciudad que se caracteriza por la actividad minera. Esta fue la cede de la conferencia número 24 de las Cumbre sobre el Clima de las Naciones Unidas (UN Climate Talks).

Esta conferencia se hizo en una coyuntura histórica, luego que el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) hiciera un reporte estableciendo la necesidad de limitar el alza en la temperatura global a 1.5⁰ Celsius. Esto fue un claro llamado de la comunidad científica a hacer urgente el cambio a la energía renovable y limpia en los próximos 12 años para mantener la vida como la conocemos.

Estados Unidos, Rusia, Arabia Saudita y Kuwait no esperaron para objetar en contra del reporte y darle su merecida “bienvenida”. Como si fuera poco, Brasil con su recién electo presidente Jair Bolsonaro amenazó con seguir el ejemplo de Estados Unidos y salir del Acuerdo de París, lo que causó una demora en buscar una solución en los mecanismos del mercado para solucionar las emisiones asociadas a la quema de carbón.

He dedicado mucho tiempo a organizar movimientos de base comunitaria para las últimas cinco cumbres de clima de las Naciones Unidas y esta reunión no fue diferente a las anteriores.

Como expuso la periodista Kate Aronoff, los negociantes de Estados Unidos han trabajado incansablemente para moderar los resultados de las cumbres de clima de las Naciones Unidas mucho antes de la administración Obama. Los países ricos han sido exitosos en transferir su responsabilidad financiera por la destrucción ambiental a los países en vías de desarrollo.

De hecho, los acuerdos para disminuir las emisiones de gases de invernadero no se acercaron a cumplir con la meta de 1.5⁰ Celsius. Por el contrario, los “líderes” han proyectado llevar al mundo a un alza de hasta 3⁰ Celsius en el 2100.

Esto refleja la magnitud del problema en la cumbre del clima de las Naciones Unidas.

El activista Nigeriano Nnimmo Bassey y aliados globales protestan contra los contaminadores en la conferencia. (Ben Goloff)

Esta reunión, que pretende ser un foro democrático para que todas las naciones intentemos resolver uno de los problemas más determinantes para el bienestar colectivo; se ha convertido en un parque temático de las corporaciones petroleras. Estas “grandes contaminadoras” han servido como auspiciadores de estas cumbres, dándoles acceso a un lavado de imagen como compañías “verdes”.

Un ejecutivo de una de estas compañías incluso tuvo la osadía de alardear sobre su influencia clave en definir los términos de intercambio de créditos de carbón. Además, los oficiales de las Naciones Unidas prohibieron utilizar las palabras “combustible fósil” en algunas de las charlas.

Más allá de demostrar un decoro diplomático, debemos enfrentar a los negociantes y políticos del mundo y preguntarles: ¿De qué lado estas? ¿Del lado de la gente — o del lado de las contaminadoras?

A través de la cumbre organizamos a líderes interesados en la justicia ambiental global para que dieran la batalla en este combate.

Jóvenes líderes del movimiento de justicia ambiental toman el salón donde un panel de la administración Trump promovía los combustibles fósiles. (Ben Goloff)

Por segundo año consecutivo, la administración Trump intentó llevar a cabo un panel para glorificar el uso de combustibles fósiles y la energía nuclear. Cientos de personas rieron de la ironía de las falsas soluciones sugeridas por este panel, y líderes jóvenes enfocados en justicia ambiental se apropiaron del espacio haciendo con una protesta que exigía una transición justa lejos de combustibles fósiles. Dejamos al panel de la energía sucia en un cuarto casi vacío.

Cuando la Unión Europea sugirió el fracking como una solución legítima al problema climático, estos también tuvieron la misma suerte.

El Centro para la Diversidad Biológica se ha unido a colaborar con aliados a nivel global, que han lanzado la campaña “ People’s Demands for Climate Justice” (La Gente Demanda Justicia Climática) que establece un estándar bien alto al liderazgo ambiental (que por su puesto comienza con mantener los combustibles fósiles en el suelo). Tuvimos cientos de miles de simpatizantes antes de siquiera tener nuestras primeras exigencias ante la secretaria de las Naciones Unidas la semana pasada.

Miembros del movimiento People’s Demands for Climate Justice hacen frente a los negociantes de los contaminadores. (Ben Goloff)

El viernes, colocamos a los negociantes y a los líderes del mundo en una posición incómoda cuando decidimos sentarnos como grupo en medio de las escaleras principales de la cumbre.

Ganaremos cuando obliguemos a las personas que toman decisiones a ver la crisis climática como lo que realmente es: compañías y corporaciones nefastas hacienda dinero de nuestra salud, nuestro bienestar y nuestras vidas, y empeñando las vidas de las generaciones presentes y futuras.

Ganaremos cuando reconozcamos la crisis climática como un síntoma de la perpetuación de la injusticia económica, la opresión y discrimen racial.

En los Estados Unidos, líderes demócratas recién elegidos para la Cámara de Representantes (US House of Representatives) se encuentran en una presión constante para hacer lo justo al aprobar lo que se le refiere como un Nuevo Acuerdo Verde o Green New Deal en su traducción al inglés. El “Green New Deal” propone soluciones con una transición en justicia hacia una energía renovable alejada de los combustibles fósiles. Este acuerdo toma en cuenta las familias y comunidades de trabajadores que se verán afectados por esta transición y le pasará factura a los contaminadores por dichos daños y no a nosotros como ha sido la costumbre.

Ganaremos cuando quitemos la carga desproporcionada que lleva la extracción de energía sucia a las comunidades indígenas, a las personas Negras, a la clase trabajadora y los países en vías de desarrollo.

La Cumbre sobre el Clima de las Naciones Unidas provee un proceso internacional importante para lo que concierne a nuestra crisis planetaria. Pero siempre será nuestro deber mantener a las personas que toman las decisiones tomando las decisiones correcta y honestamente. A nosotros, la gente, no a los contaminadores.

Diseñadores de campañas climáticas a nivel ambiental se unen para mantener los combustibles fósiles en el suelo. (Ben Goloff)

Traducido por: Myrelis Diaz Martinez, Coordinadora enlace con la Comunidad Latina, Centro para la Diversidad Biológica.

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Ben Goloff
Center for Biological Diversity

Climate campaigner at the Center for Biological Diversity. Organizing for a just transition off fossil fuels to 100% clean, renewable energy.