Ciclo en el Observatorio
Si te interesa la ecosostenibilidad o si te atrae el mundo del emprendimientono desde la responsabilidad social, no te pierdas las confesiones de un amante de la ciencia y, claro, del medio ambiente.
Desde Ciclo Ecopapel participamos con entusiasmo en la serie de productos que el proyecto de periodismo transmedia Observatorio Científico está realizando en torno a la educación ambiental. Contamos la experiencia “cicloecopapelista”, tanto en el emprendimiento como en la apuesta por una vida sostenible.
En esta ocasión, desde la voz de Max Barbosa Miranda — responsable de comunicación y parte de nuestra familia verde — se expande por las redes quiénes somos y qué hacemos en función de un mundo más ecofriendly, además de dar algunos tips que nos han funcionado en el devenir de nuestro oasis en medio de La Habana Vieja.
¡Haz un buen papel!
La primera lección es que solo con la cooperación y ayuda de varias personas es posible hacer de nuestro planeta un lugar más sano. Es tan posible como necesario — inventiva mediante — hacer rutina las acciones que no dañen esta gran casa de todos y todas.
Sí, nuestro producto estrella es el papel pero, con nuestro eslogan queremos promover mucho más. Hablamos de una filosofía de vida.
Así lo explica Max Barbosa: «Básicamente, realizamos papel reciclado a partir de los sobrantes que nos donan algunos emprendimientos, organizaciones no gubernamentales, empresas estatales y actores de la comunidad». Sin dudas se necesita de la conciencia verde multiplicada.
«Se hace necesario, en muchas ocasiones, buscar alternativas para adquirir la materia prima y hallar estrategias de promoción para valorizar el trabajo ecosustentable y la importancia de reutilizar este papel» con el fin de articular a otras personas convencidas en nuestro proceso productivo.
«La elaboración lleva cero químicos: utilizamos agua de lluvia y energía renovable a partir de paneles solares; pues la finalidad del proceso, a la par de generar un beneficio económico-financiero, también es preocuparnos por el medio ambiente y generar una cultura limpia, ambiental-sostenible, a partir del reciclaje», comenta Max.
Comunicación educativa
«Una de nuestras metas es educar en torno a cómo hacer un mejor papel». Así se define una de nuestras principales líneas de trabajo, aleada 100% de la estrategia de comunicación de la tienda que no solo incentiva a consumir los productos que ofertamos.
Ciclo Ecopapel desarrolla una fecunda actividad educativa que explica las razones de nuestro empeño e incentiva a secundar nuestras acciones con otras de mayor impacto socio-ambiental.
«Por ejemplo, desde la comunicación, explicamos la cantidad de árboles que se dejan de talar si se reutiliza o recicla el papel que muchas veces es desechado. Igualmente, es necesario hacer partícipes del concepto a las personas que van a adquirir estos productos hechos con material reutilizado o reciclado».
Tal vez, incluso, el impacto social de Ciclo no es a gran escala, pues somos un negocio local. Sin embrago, la posibilidad de colaborar con otros medios y de establecer una estrategia de comunicación que impliquen las redes sociales, nos ha permitido llegar también a que varias personas concienticen.
Estrategias sostenibles y posibles
Como estamos en un momento en el cual «ser verde está de moda», lo aprovechamos y nos montamos también en ese discurso entronizado y establecido dentro de una comunidad en Cuba.
Para Ciclo Ecopapel estar al tanto de las tendencias, ha sido un apoyo indispensable para el desarrollo del proyecto ambientalista. Conocer las corrientes de las modas, las opiniones, el ir y venir de las situaciones sociales es una de nuestras fortalezas, porque logramos articularlo con lo realmente importante para posicionarnos. Entonces, ¿qué nos dice Max Barbosa al respecto?
«Eso nos ha permitido que nuestros productos lleguen a más personas, pero, no sólo el producto, sino la idea del reciclaje, la cultura de utilizar productos hechos de materiales reciclados o reutilizados y la conciencia de que hay otra manera de hacer las cosas sin despilfarrar, sin desaprovechar los recursos que ya tenemos. Todo ello nos permite, en muchas ocasiones, hacer que las personas, negocios y proyectos lo repliquen también a partir de la misma filosofía verde».
