Al 5G y Más Allá
La irrupción de la tecnología 5G promete impulsar la evolución -¿o involución?- al estadio de ciberseres, plenamente integrados en la esencia de una realidad flotante, llamada Internet. Solo que falta un pequeño y gran detalle: hacer que el 5G exista.
El término refiere a la quinta generación de telefonía móvil: su velocidad de conexión -cinco Gigabits por segundo- será diez veces más rápida que el actual 4G, lo que permitirá que varios dispositivos se conecten simultáneamente a la Red de forma más fiable y seguro. En la actualidad, la velocidad de transmisión llega hasta el gigabit por segundo, lo que significa que descargar una película en HD se tarda una hora y un gran problema es que rara vez se experimenta la velocidad máxima del 4G, porque la señal es interferida por cualquier cosa, como lo es un edificio u otra red WiFi.
Todavía no existe un estándar definido, ya que ni los fabricantes y/u operadores apenas están experimentando con las tecnologías para determinar cuáles son los parámetros que debe seguir el nuevo sistema de comunicación. Ante ello, lo único seguro es que todos piensan iniciar la implementación sobre el negocio fijo y que, por tanto, se necesitará de más infraestructura instalada que soporte la gran explosión de datos que sucederá. Al respecto, empresas como AT&T o Movistar han comunicado que sus primeros planes serán lanzados en Estados Unidos.
A inicios de octubre del 2018, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) informó la completa liberación de la banda de 600 MHz, lo cual convierte a México en el primer país en reorganizar las frecuencias para la próxima generación de servicios móviles. Así, el canal que antes transmitía señales de televisión (tanto digital, como análoga) fue reasignado para la explotación de Banda Ancha Móvil, a través de la nueva generación.
Tal innovación tendrá capacidad colosal que abrirá un mundo de posibilidades en la domótica, como muchos le llaman: el Internet de las cosas. Cámaras de seguridad, cerraduras, automóviles, wearables y demás elementos estarán conectados y se predice que para 2020, más de 20,000,000 de dispositivos estarán conectados.
