¿Es necesaria una regulación legal de las criptomonedas?

400 mil millones de dólares, esa es la valoración actual del mercado de todas las criptomonedas que existen en el mundo; un monto demasiado grande como para dejarlo en el limbo jurídico.

Desde que el Bitcoin se creó en el 2009, muchos de los portadores y desarrolladores de criptomonedas han defendido que las leyes y el gobierno deben estar lo más lejos posible de este mercado. La propia razón de ser de las criptomonedas es la de crear un mecanismo de pago alterno a los sistemas tradicionales controlados por los entes gubernamentales.

No obstante, el crecimiento del mercado y la adopción masiva de las criptomonedas han dejado ver que una regulación legal a este sistema financiero es justa y necesaria para poder garantizar los derechos y deberes de todas las partes involucradas en el proceso.

Para defender la tesis de la necesidad jurídica de la regulación legal de los criptoactivos, como abogado, he establecido 4 justificaciones que deberían motivar tanto a los “crypto holders” como a las personas que todavía se mantienen ajena a este mundo pero quisieran tener más seguridad jurídica para poder invertir y empezar a utilizar criptomonedas.

1. Impulsando cuerpos legales que regulen las criptomonedas lograríamos que los gobiernos locales brinden seguridad jurídica para los comerciantes y demás personas que estén vinculadas con el mundo comercial.

Para quienes no lo saben, la seguridad jurídica es la certeza que tienen las personas de que sus derechos e intereses no sufrirán alteraciones bruscas sin ninguna justificación fundada.

Esta Seguridad Jurídica es INDISPENSABLE si se quiere lograr que las criptomonedas sean utilizadas en los comercios y en la vida cotidiana. Los comerciantes necesitan saber cómo se va a llevar el tema fiscal, laboral y administrativo con el uso de las criptomonedas y una vez que puedan dominar esta información, ellos podrán determinar si aceptan o no estas monedas virtuales como método de pago.

2. Permitiría que importantes montos monetarios provenientes de instituciones sólidas, e inclusive entes gubernamentales, se decidan a entrar en el mercado de las criptomonedas.

A pesar de que ya muchas se han decidido a hacer inversiones aquí, la mayoría lo hace como si fuera una inversión de alto riesgo.

Este riesgo es provocado ante la posibilidad de que algún día los gobiernos declaren como ilegales el uso de las criptomonedas o establezcan un marco tributario sumamente agresivo que genere muy poco atractivo para el poseedor de criptomonedas.

3. Ayudaría a prevenir la gran cantidad de SCAM y de proyectos falsos que hoy abundan en la comunidad por medio de “monedas” ficticias. Las supuestas ICO y proyectos que prometen 3000% de ganancia a los inversores dan muy mala imagen a todo el mercado de las criptomonedas y muchos críticos se afianzan aquí para decir que este mercado es una mera “burbuja”

Con un control se lograría un beneficio colectivo puesto que las monedas serias podrían seguir creciendo y consolidándose dentro del mercado para así continuar construyendo proyectos más establecidos y útiles para la comunidad.

4. Hoy en días los ciberataques son muy comunes en el mercado de las criptomonedas y tienen un gran impacto. El más relevante quizás fue el que aconteció el año 2011 en la casa de cambio “Mt Gox”, que para el momento era la más importante del mercado. Este ataque generó una depreciación de más del 30% del valor del Bitcoin para el momento.

Si se crean normas que especifiquen y construyan los estándares comunes de seguridad legal y sus consecuencias ante violaciones, se pueden prevenir y enjuiciar a los autores de los ciber-ataques.

Si bien es cierto que las normas no trascienden hasta el campo virtual como una especie de campo de fuerza, sí permitiría que la búsqueda y enjuiciamiento de hackers fuera mucho más efectiva a como resulta ser actualmente.

Habiendo plasmado estas 4 justificaciones quiero aclarar que, al no haber una regulación legal, las criptomonedas no son tampoco ilegales. Hay un vacío legal que sencillamente no regula estos activos y todo lo concerniente a su uso.

Al no haber una prohibición al respecto conviene recordar el latinismo que dice:

Nullum crimen nulla poena, sine lege

No hay crimen ni pena sin ley. Como no existe prohibición alguna al respecto es importante concluir que el uso de las criptomonedas no está penalizado ni tampoco prohibido por la autoridad gubernamental. Su utilización puede seguirse haciendo dentro de la libertad inherente que se encuentra ampliamente respaldada por los Estados para cada uno de sus ciudadanos.

Prof. Ezio Rojas