Frases Las uvas de la ira.
«A veces el espíritu me ilumina, pero no tengo nada sobre lo que predicar. Tengo vocación para conducir el rebaño, pero no tengo adónde llevarlo.»
« Ni hay pecado ni hay virtud. No hay más que lo que hace la gente. Todo es lo mismo. Y algunas de las cosas que hace la gente son buenas, y otras no lo son, pero eso es todo lo que tiene derecho a decir un hombre.»
« Demasiado tarde para eso. Y los propietarios o sus representantes les explicaban la manera de pensar, la manera de actuar, del monstruo que era más fuerte que ellos. Con que le den lo justo para comer y para pagar los impuestos, cualquiera puede conservar sus tierras. Cualquiera puede hacerlo.
Sí, cualquiera puede hacerlo, hasta el día que pierde una cosecha y tiene que pedir un préstamo al banco.
Pero, verán un banco o una compañía no pueden hacer eso, porque esas criaturas no respiran aire, no comen carne. Su aire son los beneficios; su carne son los intereses. Y si no los tienen, se mueren de la misma manera que un hombre se muere si le falta el aire o el alimento. Es triste, pero es así. Exactamente así.»
« Sabían que un hombre tan herido y tan perplejo es pasto fácil de la cólera, incluso contra las personas que quiere.»
«A veces, cuando uno está triste, puede echar la tristeza fuera por la boca. A veces, un hombre que desea matar puede echar sus ganas de matar por la boca, y no matar.»
« No está comprando sólo trastos inservibles, sino también vidas inservibles. Y algo más, ya lo verá: está comprando amargura.»
« ¿Cómo vamos a vivir sin nuestras vidas? ¿Cómo vamos a saber quiénes somos sin nuestro pasado?»
« Conozco a otros como usted. No está preguntando nada, sólo repite una cantinela. ¿A dónde vamos a llegar? Le importa un bledo saberlo. La gente se mueve, se va a otros sitios. La gente se está muriendo a su alrededor. Y vaya a saber si no será usted de los primeros que se mueran, pero no se habrá coscado de nada. Conozco a muchos como usted. No quieren enterarse. No hacen más que repetirse siempre lo mismo, ¿adónde vamos a llegar?»
« …temed el momento en que el hombre no sufra y muera por una idea, pues esa sola cualidad constituye su esencia misma, esa sola cualidad es el hombre y lo que lo diferencia del resto del universo.»
« Si vosotros, los que poseéis lo que debería ser de otros, entenderais esto, estaríais protegidos. Si fuerais capaces de separar las causas de los resultados, si superais que Paine, Marx, Jefferson y Lenin fueron resultados, no causas, sobreviviríais. Pero sois incapaces de daros cuenta, porque vuestras posesiones os paralizan en el yo y os separan para siempre del nosotros.»
« ¡Una sola persona decidida se puede llevar por delante a unos cuantos!»
« Pero si nosotros, Tom, la gente como nosotros, nosotros seguimos vivos, mientras que todos ésos…, ésos van a desaparecer. Nosotros somos los que estamos vivos Tom. No nos van a quitar de en medio. ¡Caramba! Nosotros somos el pueblo…, nosotros seguimos.»
«¿cómo puede un desposeído conocer el valor de las posesiones? »
« Y en los ojos de la gente se ve el fracaso; y se ve cómo crece la ira en los ojos de los hambrientos. Y en sus almas se hinchan y maduran las uvas de la ira, preparándose para la cosecha.»
« Antes teníamos unas tierras, y las tierras eran nuestra vida y nuestra ligazón. Los viejos morían, y nacía gente nueva, y siempre éramos una cosa, éramos una familia, unida y cada cual en su sitio. Pero ahora somos un desbarajuste. No me lo puedo explicar. Todo es un desbarajuste en la familia.»
« Y lo que encontró es que no tenía un alma sólo suya. Que tenía un trocito de un alma grande que no era sólo suya. Decía que irse así solo no servía de nada, porque su trocito de alma no valía si no estaba con el resto y se hacía entera.»
« Rondaré en la oscuridad. Estaré en todos lados, a donde usted mire, allí estaré yo. Adonde se luche por un pedazo de pan, allí estaré yo. Adonde vea un policía dando palos a un pobre chalao, allí estaré yo. Si es como decía Casy…, ¡caray!, pues estaré en los gritos de los desesperados y…estaré en la risa de los chiquillos cuando tienen gana y saben que la comida está ahí mismo, esperándolos. Y cuando nuestra gente coma de lo que saca de la tierra y viva en las casas que se han construido…, pues ahí estaré yo también.»
