Empezó la 3 Bienal Internacional de Danza de Cali, se abre el portal para ver otras danzas, otros mundos, otras posibilidades de existir, de moverse, de agradar o disentir, de mover el cuerpo y la imaginación. Hasta el 6 de noviembre Cali será anfitriona, espectadora y testiga de estos días de movimiento.
En la noche del 31 de octubre, bajo la danza de los árboles del centro de la ciudad y la caricia de la brisa que llegaba del mar pacifico, en una gradería ubicada en el Boulevard del río, que miraba la noche y un escenario que fue plataforma para las agrupaciones y compañías locales que se vienen gestando desde hace años y, que cada vez ganan más espacio para mostrar sus procesos.
Las y los caleñxs, así como visitantes, tuvimos la oportunidad no solo de ver qué pasa con los cuerpos danzantes, sino también saber cómo nos estamos identificando en una ciudad que ha sido históricamente multicultural y que ya empieza a manifestarse de manera pluricultural. La danza urbana, el folclor y la salsa encendieron el “fuego” del público asistente. Sentir Étnico de la Universidad San Buenaventura ofreció una danza folclórica con una conciencia de estar en el presente, unos bailarines con cuerpos diversos y dueños de su movimiento, celebrando el territorio.
Más tarde, a las 9 pm en el Teatro Municipal Enrique Buenaventura el público caleño y los visitantes de otras latitudes que siguen la Bienal, tuvieron la oportunidad de ver una obra del coreógrafo Italiano Mauro Astolfi; una beca de creación de la Compañía Colombiana de Ballet- INCOLBALLET.
La obra que mezcla el mundo de fantasía de Alicia en el País de las Maravillas, y el mundo fantástico del Realismo Mágico, transcurre y se dilata en el “suspenso”, sin variedad de principio a fin. Desde el primer instante de la entrada del público la imponente escenografía, la pálida iluminación y el ambiente sonoro introducían al espectador en esa atmósfera lúgubre y fuera de tiempo que enmarcaba claramente la obra.
Imágenes surrealistas y mucho suspenso se reflejaron en los cuerpos de los bailarines. Interesante ver los jóvenes cuerpos salir y entrar a la técnica conocida y arriesgarse a moverse diferente, con formas extrañas y más teatrales, lo que sin duda será un oportunidad para cada uno de ellos en su estudio del movimiento.
Alicia en la casa misteriosa, una obra con música y voz en off acompañando los cambios de atmosfera, la escenografía y un diseño de luces interesante. La gran pregunta o mejor la expectativa a futuro es saber que pasará con el flujo del movimiento personal de cada bailarín, el universo poético que se vive en el mundo de Alicia y también de las mujeres, adolescentes y niñas colombianas.
Cada uno de los bailarines representaba un personaje, a veces incomprensibles y difusos, pero la temática de la obra lo permitía, y que aunque no hacen parte directa de la novela de fantasía, provienen de ese mundo fantástico.
Astolfi aprovecha el nivel técnico de los bailarines con quienes trabaja para explorar el movimiento, y en ocasiones vemos cómo se descompone la técnica para lograr cuerpos retorcidos, fragmentados y hasta antinaturales. El diálogo entre estos elementos es más evidentes en unos bailarines que en otros; sus destrezas, comunicación e interpretación reflejan claramente su larga, o poca experiencia en escena lo que puede ser un “talón de Aquiles“ para los bailarines, pues el estilo que propone el coreógrafo reúne muchos elementos a tener en cuenta para la interpretación de los personajes: la calidad del movimiento, la técnica, la energía, el estilo, y la personalidad del bailarín que si no aparece no puede defender la obra.
Dos momentos que revelan la calidad y el nivel de los bailarines de INCOLBALLET, y que abonan fuerza a la obra, es el cuadro “erótico” entre dos bailarines, y un corto solo de Leonardo Ramírez (parte de la compañía hace varios años), en estos dos momentos podemos ver la magia aunada a la técnica, sin intereses efectistas sino sólo cuerpo, emoción y experiencia artística.
Sin duda el proceso creativo de Alicia en la Casa Misteriosa permitirá que estos artistas más jóvenes fortalezcan su proceso de formación para continuar su camino profesional, y que próximamente puedan ser a ellos a quienes les otorguen una beca de creación por parte de la Bienal de Danza.
Podrán disfrutar más del trabajo artístico de compañías nacionales e internacionales hoy hasta el 6 de Noviembre en distintos escenarios de la ciudad en el marco de la 3a Bienal Internacional de la Danza de Cali.
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