Memorias de Colombia
Viaje “transatlántico” durante el confinamiento
Colombia. Segundo día. Mi marido se había empeñado en jugar al deporte nacional— y patrimonio cultural — : el tejo. Era de noche y nadie parecía conocer el salón de juegos que recomendaba nuestra guía de viaje.
Preguntamos en un antro donde estaban jugando al billar y nos dijeron que era allí, al fondo. Un hombre nos acompañó. Cruzamos la sala de billar y pasamos por varias salas ruinosas y desérticas. Los dos nos miramos con cara de “¿a dónde nos estarán llevando?”.
¡BUM! ¡Una explosión! ¡BUM! ¡Otra explosión! Casi me tiro al suelo para protegerme. 🤣 Entonces llegamos a un patio donde la gente estaba jugando al tejo. Al cabo de un rato — ya acostumbrada al ruido de las explosiones, pues en eso consiste el juego — , se acercó a nosotros un señor de avanzada edad que amablemente nos explicó las reglas del juego. Toda una experiencia.
Ya hace un año de aquel inolvidable viaje, del que volvimos dos semanas antes de que empezara esta nueva normalidad. Quién hubiera imaginado por aquel entonces que no íbamos a poder salir casi ni de casa.
A pesar de llevar bastante bien el confinamiento, viajar es una de las cosas que más echo de menos. Hoy, para recrear los buenos recuerdos de mi viaje a Colombia, he preparado unas deliciosas arepas colombianas con queso.
¡Feliz finde!
