Mito o verdad: ¿El sol ayuda a mi piel?

lulilith
Cuidado de la piel
Published in
4 min readMar 24, 2024

Hoy en día, es muy común encontrar productos con bloqueador solar incluido para evitar que el sol dañe nuestra piel. Sin embargo, ¿en verdad la daña de manera significativa?

Todos los humanos disfrutamos del sol, puesto que es un elemento esencial para nuestro funcionamiento físico y psicológico. La piel utiliza la luz solar para ayudar a fabricar la vitamina D, la cual es importante para la formación normal de los huesos. Pero algunas veces, los rayos ultravioleta pueden ser muy perjudiciales. Es importante identificar cuando ya hemos recibido suficiente luz solar.

La verdad es que, en pequeñas cantidades, el sol es beneficioso. La piel es capaz de defenderse “por sí sola” de la agresión de los rayos UV. El pelo, la barrera corneal y la barrera de melanina son algunos de los medios de los que dispone la piel para defenderse. Aunque, siempre es bueno tener herramientas extras que puedan ayudar a nuestro propio cuerpo a cuidarse adecuadamente. Algunas de estas se encuentras enlistadas aquí: https://flip.go2cloud.org/aff_c?offer_id=4&aff_id=2114&url_id=809&source=contbtech

En este artículo, te explicamos el verdadero efecto que tiene el sol en tu piel. En la capa epidérmica o exterior de la piel hay células que contienen el pigmento llamado melanina. Esta protege a la piel de los rayos ultravioleta del sol, los cuales pueden quemarla y, con el tiempo, podría reducir su elasticidad y causar que una persona envejezca prematuramente.

Lo que conocemos como bronceado, se produce porque la exposición a la luz solar hace que la piel produzca más melanina y se oscurezca. El bronceado desaparece a medida que estas células llegan a la superficie y se caen. La luz solar es beneficiosa en cantidades limitadas y con la debida protección para prevenir la sobre-exposición. La demasiada exposición a los rayos ultravioleta puede causar quemaduras solares quepenetran las capas exteriores de la piel y pasen a las capas más profundas, en donde pueden dañar o matar las células.

Las personas que no tienen mucha melanina y se queman fácilmente con el sol, deberían protegerse cubriendo las áreas sensibles, utilizando bloqueador solar, limitando su tiempo total de exposición y restringiendo su tiempo de exposición al sol. Asimismo, la exposición frecuente y prolongada a los rayos ultravioleta durante muchos años es la principal causa de cáncer en la piel.

Ahora bien, el exponernos al sol puede ocasionar que pequeñas manchas broten en nuestra piel. Los lentigos solares, también conocidos como “manchas de sol”, o “manchas seniles”, son uno de los efectos más visibles del envejecimiento de la piel. Son el resultado de la acumulación de melanina en la epidermis o la dermis y se trata de una forma común de hiperpigmentación que aparece en forma de áreas pequeñas, planas y oscurecidas de color marrón claro a negro. Estas se encuentran en las zonas más expuestas al sol, es decir, la cara, cuello, hombros, pecho, antebrazos y el dorso de las manos.

Siempre hay que tener en cuenta que hay muchas formas en las que el sol puede dañar la piel. La luz ultravioleta puede causar daños irreversibles y, en los casos más graves, la muerte. La exposición al sol –sin precaución– es arriesgada, pues provoca quemaduras solares, envejecimiento prematuro, alergias y, en los casos más graves, cáncer (melanoma y carcinoma). La única forma segura de evitar el riesgo de sufrir daños por el sol es no dejar la piel expuesta tanto tiempo.

Según estudios, un tercio de todos los cánceres diagnosticados en el mundo son cánceres de piel, y el 10% de ellos son mortales. El cáncer de piel es la proliferación de células cancerosas en la piel y se produce por un cambio en la composición genética de las células de la piel, que se multiplican a gran velocidad, provocando un tumor.

¡Pero no te preocupes! No todo es malo. Recuerda que nuestros cuerpos fueron diseñados para aprovechar el sol. La luz solar ayuda a mantener nuestros patrones de sueño por buen camino para que podamos permanecer despiertos durante el día y dormir profundamente por la noche. Además, tomar muy poco sol, sobretodo en los meses de invierno, puede hacer que algunas personas se vuelvan propensas a una forma de depresión conocida como trastorno afectivo estacional. Este afecta la funcionalidad psicológica de la persona. Lo recomendable es siempre tomar luz del día cuando se presente la oportunidad.

La mejor manera de proteger la salud de la piel y prevenir el cáncer de piel es limitar la exposición al sol.Algunas personas lo buscan como una fuente de vitamina D, pero se necesita solamente un momento para sacarle provecho en este sentido. Limita tu tiempo al sol para proteger la piel contra las arrugas prematuras, daños y enfermedades. De igual manera, usa protector solar, protege tus ojos y evita camas de bronceado. Mantente hidratada con agua y productos que humecten tu rostro.

Fuentes:

Medline Plus. (2024). Efectos del sol en la piel. https://medlineplus.gov/spanish/ency/anatomyvideos/000125.htm#:~:text=La%20piel%20utiliza%20la%20luz,contienen%20el%20pigmento%20llamado%20melanina.

Avène. (2024). Los beneficios y daños del sol en la piel. https://www.eau-thermale-avene.es/tu-piel/sol/los-beneficios-y-danos-del-sol-en-la-piel

National Institutes of Health. (2014). El sol y la piel. https://salud.nih.gov/recursos-de-salud/nih-noticias-de-salud/el-sol-y-la-piel

--

--