¿Por Qué DADA?

La noche de las elecciones invitamos amigos a ver los resultados en casa. No sabíamos si sería una fiesta o un funeral, pero sabíamos que no queríamos estar solas. Teníamos que compartir el momento en vivo, con gente.

Al principio el ambiente era alegre y esperanzado, porque como todo el mundo, habíamos estado consultando encuestas totalmente irrelevantes y estadísticas despistadas durante meses. Pero también salimos a votar esa mañana hermosa y soleada y esperamos en la larga fila junto con ciudadanos de Nueva York respetuosos, muchos de los cuales habían llevado a sus niños a las urnas para que experimentaran la democracia en acción. Beatriz, nuestra fundadora, votaba por primera vez como ciudadana norteamericana. Todo parecía ir bien.

Sin embargo, esa noche fuimos comprendiendo que la gente odia a Hillary Clinton más de lo que duda de Trump, y que la mitad de este país quiere el tipo de cambio que va para atrás en vez de hacia adelante. Nuestros amigos se deprimieron. Un grupo de gente inteligente, talentosa y decente presenciamos cómo la burbuja en la que vivimos reventó en nuestras narices.

[caption id=”attachment_3081" align=”aligncenter” width=”630"]

Vetunn Pelukis and Boris Toledo Doorm[/caption]

Lo que me dijo mi amiguito Leo, de 10 años de edad, todavía me atormenta. “Si Donald Trump gana, provocará la tercera guerra mundial!”, exclamó cuando la noche era aún jóven. Yo le aseguré que no ganaría. Ahora me siento mal por haberlo engañado. Esta nación ha traicionado a sus niños.

La gente estaba en shock. Yo quería llorar pero no podía. Comencé a lavar copas y platos para no tener que enfrentar el hoyo de repulsión y terror en la boca de mi estómago. Nos fuimos a dormir hacia las tres de la mañana, después de ver a Trump lograr articular cinco minutos de un discurso más o menos tranquilizador (sin duda para que los mercados financieros no colapsaran) y después volvió a su palabrería vacía e incoherente.

[caption id=”attachment_3084" align=”aligncenter” width=”630"]

Beatriz Helena Ramos and Otro Captore[/caption]

Dormir es misericordioso, como la muerte. Excepto que después te levantas y te das cuenta que ahora vives en una nueva realidad cruel y difícil que te habías negado a contemplar. Miré a mi perrita Petra con envidia y lástima. Ella no sabe que vive en un mundo en el que existe Donald Trump. Su inocencia contrasta con la maldad que hay en el mundo.

No soy quién para dar consejos espirituales. No puedo recetar plegarias, o meditaciones o tranquilizar a la gente con un repertorio de sentimientos relajantes. Mi respuesta es que tengo que hacer lo que hago y ser quien soy de la mejor manera posible. Y esto es algo que quizás todos podemos aplicar. Porque la acción y la intención son las semillas del cambio. Quiero trabajar más y ser mejor porque lo que hago y quien soy es bueno. Mi consuelo amargo es que los pobres diablos que votaron por Trump y creen que su dinero les va a llover del cielo se van a quedar esperando y merecen rotundamente el infierno que ya habitan. Que digan que soy horrible. Así de enojada estoy.

Pero mi mejor consuelo es que estoy involucrada con DADA. Y DADA es un lugar, una comunidad y una idea que por su propia naturaleza está en oposición directa con Trump y con todo lo que él y sus seguidores representan.

[caption id=”attachment_3083" align=”aligncenter” width=”630"]

María García and Beatriz Helena Ramos[/caption]

Hemos creado un lugar a donde puedes venir a dibujar. O puedes dibujar con otros. Eso es todo. Y no sabes ellos de qué color son, o a quién prefieren amar, o si son ricos o pobres, o buenos o malos o si hablan tu idioma — y no te importa. Tú dibujas y ellos te pueden corresponder con un dibujo. Si esto te hace sonreír, o disfrutar el dibujo de otro, o conocer a alguien nuevo, o retarte a ti mismo, quiere decir que hicimos nuestra tarea.

Me siento muy orgullosa de haber construido este lugar como respuesta a un mundo indiferente, un mundo que sospecha del intelecto, el arte y el conocimiento, un mundo que se burla de los artistas y sus valores. Y siento un poquito de confianza en que las ideas como DADA y la gente que le otorga vida y aliento cada día prevalecerán.

[caption id=”attachment_3080" align=”aligncenter” width=”630"]

Cromomaniaco and Massel[/caption]

Estoy orgullosa de que construimos un espacio para que la gente se exprese, crezca, aprenda, y juegue con otros. Y agradezco y estoy conmovida por los artistas que se han convertido en nuestros amigos y colaboradores, que están regados por todo el mundo, a los que no hemos conocido todavía en persona, pero con los que nos sentimos tan cercanos.

[caption id=”attachment_3086" align=”aligncenter” width=”630"]

Members of DADA by Jonathan D’Arte[/caption]

Si estás deprimido, triste, asustada, descorazonado, solo toma un acto — ponte a trabajar, lee un libro, recoge tu habitación, escucha música, escribe, ve a ver arte, canta una canción, ve una gran película, haz un dibujo: enriquécete a ti misma primero para poder alimentar a los demás. Entonces podrás pasar a cosas más grandes.

El cambio solo puede empezar desde nosotros mismos.

Paz.