Lo que aprendí trabajando en una startup (Parte I)

Existen múltiples posiciones donde puedes desempeñarte como profesional en el mundo de la tecnología. Si bien antes el trabajo ideal era pertenecer a una gran compañía transnacional, hoy también se apuesta por un nuevo tipo de empresa llamada startup.

Para los que no están familiarizados con el concepto de startup, en palabras sencillas, es un emprendimiento con una idea innovadora que utiliza tecnología para convertir esta idea en un producto tangible.

En mi vida profesional he trabajado en empresas tradicionales diseñando e implementando sitios y sistemas web con lenguajes muy conocidos como PHP, .Net, entre otros; siguiendo metodologías clásicas como RUP y XP.

Luego de investigar y buscar oportunidades de trabajo, trabajé en una startup en Lima, dedicada al rubro de la educación online con un producto B2C, con un stack tecnológico increíble, usando Python, Django, Graphql, Go, React, Angular, entre otras librerías y frameworks de desarrollo web. Asimismo usábamos herramientas de gestión como Trello, Slack, Jira para la gestión de proyectos y comunicación interna.

Cuando empiezas a trabajar en una startup, todo cambia. Normalmente, tienes la libertad de jugar con nuevas tecnologías (librerías, frameworks) mientras éstas ayuden a cumplir los objetivos del producto. Al mismo tiempo que usas estas nuevas tendencias, aprendes y aplicas nuevos conocimientos, aumentando tu stack tecnológico, lo cual sería difícil de conseguir en una empresa tradicional ya que ellas se la juegan por la tecnología “de siempre”, la que siempre ha funcionado y no ha traído problemas, en vez de innovar y renovar procesos y funcionalidades del software que manejan.

Asimismo, trabajar en un startup cambia la forma en la que vives tu trabajo, desde la forma de vestir (casual; con zapatillas y polos) y los horarios flexibles hasta el teletrabajo (desde la comodidad de tu hogar), hasta las metodologías (SCRUM, Kanban, etc).

Me arriesgaría a decir que puedes llegar a sentirte más motivado en una startup ya que tienes más libertades y formas de participar, pero con todo esto viene la responsabilidad, la ética profesional y tu desenvolvimiento en el trabajo. Si rindes, cumples con tus pendientes y pones tu granito de arena a que la startup crezca, te aseguro que tienes un lugar ganado en el equipo, puedes recibir un aumento, mejoras en tu contrato, entre otros; metas que en una empresa tradicional podrían costarte más tiempo.

Ojo, no digo que trabajar en una empresa tradicional esté mal o no sea un ambiente cómodo en el cual estar, solo doy mi punto de vista de haber tenido la oportunidad de trabajar en ambas, siento que trabajar en una startup te llena más como profesional y es una nueva experiencia que te recomiendo vivir si tienes la oportunidad.

Para no hacer muy largo el articulo lo dividiré en 2 partes. En la segunda parte, te cuento lo bueno y lo malo que me tocó vivir trabajando en una startup, así como algunos consejos que puedes seguir para poder encontrar un puesto dentro de una de ellas.

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