Malcolm & Marie: intensidad y toxicidad en blanco y negro

Daniela Castro
Daniela Castro
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3 min readFeb 12, 2021

La nueva puesta en escena de Sam Levinson (el creador de la exitosa serie de HBO, Euphoria) tiene un montón de datos de color detrás, una fotografía de la hostia y unas actuaciones dignas de nominación al Óscar por parte de Zendaya y John David Washington. Pero debo decirlo, la intensidad que manejan estos personajes, durante casi 2 horas, cansa un poco.

La película, que puede verse en Netflix, muestra la relación de una pareja de artistas durante toda una noche, luego de regresar del estreno de la película de Malcolm, en la que se dirán de todo y cuando digo TODO lo digo en serio. No hay tema que no toquen: cine, racismo, género, relaciones, drogadicción, y algún otro tema que seguro me quede en el tintero.

Con diálogos largos, casi monólogos, podemos ir entendiendo la dinámica de esta joven pareja que tiene bastante recorrido y que fuera de esos trajes divinos que visten al llegar a su casa, al inicio del film, tienen pasados oscuros y difíciles. Sobre todo Marie. Ella será quien inicie este viaje de introspección que hacen ambos tanto de la pareja, como de cada uno de ellos.

A pesar de que por momentos me aburrió un poco y hasta me sentí confundida e incomoda con la manera en la que ambos se tratan, debo decir que me parece una película correcta. El guion por partes me gustó porque con su estructura nos va desmenuzando la historia de los personajes y de la pareja. Aunque por momentos se torna un tanto repetitivo y predecible.

Por otro lado, me enamoró la belleza de su fotografía, hay un trabajo divino en ese área que es uno de los fuertes del film. El blanco y negro siempre le dará un no sé qué al cine. Y bueno, sin dudas, la selección de actores fue la decisión más acertada. Me encantó la química entre ellos y la intensidad de ambos para reflejar las personalidades de estos personajes tan cargados de todo.

Malcolm & Marie se filmó en plena cuarentena y solo tomó 2 semanas rodarla, en total secretismo, en la localidad de Carmel, California, en esa hermosa casa de vidrio ecológica llamada Caterpillar House.

Se dice que Zendaya fue quien contactó a Levinson para hacer algo juntos y en 6 días ya tenía la historia. La filmación se realizó bajo estrictos protocolos que consistieron en aislar a todo el equipo dos semanas antes para realizarse los test, convocar abogados, médicos y miembros de diversas asociaciones cinematográficas, que solo hubiera 12 personas en el set, y que los actores se colocaran sus micrófonos y vestuario.

No hay dudas que será candidata a los Óscars en alguna de sus categorías. De cabeza actuaciones y fotografía. No sé si será de mis favoritas de la temporada, porque la historia no me terminó de convencer y no estoy muy segura del mensaje que se quiso o intenta transmitir en cuanto a este tipo de relaciones un tanto tóxicas. Pero es una película digna de ver.

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