Sobrevivir a la catástrofe

De 1ra Mano
De Primera Mano
Published in
2 min readMay 13, 2022
Sobrevivir a la catástrofe

Ibis no tenía que haber ido a trabajar. Ese día se sentía mal, así que pidió permiso a su jefa para quedarse en casa e ir al médico. Sin embargo, se había comprometido a llevar una pasta de bocaditos al trabajo, para celebrar el cumpleaños de su compañero Rodolfo. Planeaba dejarla e irse, pero le arrancaron la promesa de permanecer un rato en la celebración. Habrían pasado 10 o 20 minutos, relata, cuando sintió que el mundo se acababa.

Más tarde se enteraría que una explosión había hecho grandes estragos en la estructura del hotel. Por eso caían los pedazos de techo a su alrededor y el polvo nublaba la vista. Pero en ese momento no sabía nada. Solo sentía en su cabeza el estruendo ensordecedor y el desconcierto de saberse perdida.

No veía una salida, quiso saltar hacia el vacío por la fachada del edificio. La desorientación no le daba otra alternativa. Unos brazos decididos la sujetaron, la hicieron entrar en razón. “¡Nosotros no nos vamos a morir hoy! ¡Vamos a salir de aquí!!”, gritó Rodolfo, el único que permanecía cuerdo frente a las puertas de la muerte.

Avanzaron en medio del caos. Ibis no sabe cómo, pero ella y cuatro de sus compañeros consiguieron salir del Hotel Saratoga. “No nos cayó arriba ni un tornillo”, cuenta, consciente de su fortuna. Me habla con los ojos llenos de lágrimas, con el pesar de la pérdida de los que no lograron sobrevivir a la catástrofe.

--

--