Sueños de un animal creativo

Noel Wolf
Detour talks
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8 min readNov 5, 2015

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Renata Paluch es la creadora y directora creativa de Animal Dreams, un lugar extraordinario en el centro de Palermo, Buenos Aires. Renata es también scouter de diseño y arte para Percha MAG, una publicación online de arte de vanguardia

La autora intelectual de este espacio mitad galería de arte, mitad escenario para músicos y performers habla sobre cómo encontrar placer en lo que uno hace y cuenta sobre su experiencia y el camino que siguió para lograrlo.

Cuéntanos qué es Animal Dreams. Es complicado resumirlo en pocas palabras, es un conjunto de varias cosas, pero en corto… Animal Dreams es un espacio con personas que promueven el arte y la música.

Algunas veces a los artistas les cuesta canalizar la energía y genialidad que tienen para crear su arte hacia la organización de sus muestras, por lo que exponer y promover su obra les termina resultando una labor difícil.

Principalmente lo que hacemos en Animal Dreams es facilitar la exposición a todo artista que tenga algo para compartir. Somos un espacio abierto y ponemos a disposición nuestra audiencia y plataforma (locación, comunicación, alianzas, etc.) a quienes exponen acá — promovemos el arte, a los artistas y su obra, todo sin pedir algo a cambio.

Expo Collagear #1 @ Animal Dreams

Describe el camino que seguiste para llegar a esto. Venía viviendo un momento medio malo personalmente, me encontraba sin trabajo y realmente no sabía lo que quería hacer; sí sabía lo que no quería, y era tener un trabajo formal — me rehusaba a esa idea. Respeto a la gente que tiene un trabajo de 8 horas, incluso los admiro por tener el poder de estar de lunes a viernes dentro de una oficina; eso es algo que yo no tengo, personalmente siento un rechazo hacia ese tipo de trabajo — debe ser mi personalidad.

Para ese entonces había cursado 2 carreras parcialmente — marketing y gastronomía — y ya había emprendido, hecho funcionar y terminado un negocio (un centro de estética). Cuando estudiaba era muy aplicada, pero me costaba mucho cumplir con un régimen, un horario y toda esa historia. El centro de estética funcionaba muy bien; pero me mataba de aburrimiento, era algo en lo que no encontraba pasión.

No recuerdo exactamente cómo comenzó, pero entré en una etapa a partir de la cual no paré de ir a muestras de arte, mi cabeza se puso muy inquieta, sentía que quería dar algo artísticamente.

Por supuesto que de chica quería ser modelo — claramente no estaba teniendo en cuenta mi altura <risas>. Seguí con esa idea hasta los 15 y 16, cuando había comenzado a modelar rostro, para lo que sí iba bien <más risas>. Pero tampoco era lo mío, sentía que faltaba algo. Eventualmente me di cuenta que no quería ser la que está en la foto — lo que me gustaba era estar del otro lado, ayudando en la producción, me gustaba que las cosas salieran bien y ver cómo eso generaba satisfacción en las personas con quienes trabajaba.

Mis papas y mi hermano (mayor que yo) son artistas, así que como podía esperarse, en determinado momento quise seguir ese camino. No recuerdo exactamente cómo comenzó, pero entré en una etapa a partir de la cual no paré de ir a muestras de arte, mi cabeza se puso muy inquieta, sentía que quería dar algo artísticamente.

Eventualmente me encontré en un punto en el cual no sabía qué hacer; me llamaba el arte, la música, pero ¿qué podía hacer con eso? — me decía no soy artista, ¿quiero ser bailarina… quiero ser música? o… ¿me pongo a pintar? No… ¡pinto para el c#lo! y tampoco tengo la paciencia para hacerlo, ¡No! entonces… ¿qué es?

De pronto empecé a darme cuenta que tenía otro perfil, que me gustaba organizar y estar en la producción de las cosas, y que me salía bien — vi un lado “emprendedor” en mi y comencé a pensar que quizá podría combinarlo con mi gusto por el arte.

¿Hubo un momento clave en el que supiste que querías hacer esto? Sí. Recuerdo una charla mientras tomaba un café con una amiga muy talentosa (Daniela), quien es artista plástica y fotógrafa, y una persona muy especial para mi que siempre me ha inspirado con su talento y energía.

Tomando ese café tuvimos una charla clave. Le conté que quería hacer un showroom para diseñadores de ropa y combinarlo con muestras de arte, y empezamos a imaginarlo — hablamos sobre la decoración, las bebidas que prepararíamos, Daniela me preguntó si podría vender un par de cuadros suyos, le dije que por supuesto y comenzamos a pensar en qué otros artistas amigos podíamos invitar. Luego hablamos sobre qué música pondríamos… No imaginábamos que tendríamos músicos invitados que se encargarían de eso.

Organizamos una primer muestra, invitamos a un DJ, se armó una barra y enviamos invitaciones — vinieron 150 personas. Así nació Animal Dreams, con un showroom y una galería. Fue eso, decir “hagamos una muestra…” y bueno… Lo hicimos.

¿En dónde encuentras la motivación para hacer esto? Una de las mayores motivaciones que tengo es ver a los artistas que han expuesto aquí alcanzar un nivel más alto, ser parte de su evolución artística es algo sumamente satisfactorio.

Me fascina el arte y la música. Me estimula compartir con las personas a través de la apreciación artística. Este conjunto me llevó a crear este lugar y me ayuda a continuar, es el gusto por las relaciones humanas y el disfrute en hacer todo esto lo que me hace moverme.

Creo que el sentido de propósito y significado de lo que haces lo encuentras en la relación con las personas que te rodean, en la relación que tienes con tu trabajo y en cómo te conectas con algo más grande que vos.

¿Qué es para ti la felicidad y cómo se relaciona con lo que haces en Animal Dreams? No es fácil hacer lo que te gusta — incluso cuando encontraste lo que disfrutas hacer, siempre existen dificultades y complicaciones con las cuales lidiar, además de las propias limitaciones que tu pasión conlleva. Trabajando con Animal Dreams no me puedo dar el gusto de tomarme vacaciones, por ejemplo; pero estoy feliz con eso.

Trabajando todos los días haciendo lo que elegiste, enfrentas desafíos y situaciones a veces no tan placenteras, lo cual a mi me ha ayudado a mantener un nivel de felicidad constante — ya que todo reto o dificultad viene con la satisfacción de resolverlo. Creo que la felicidad es un estado en el que uno puede mantenerse entendiendo que algunas veces estás arriba y otras abajo.

Hay que tener en cuenta que la felicidad tiene intervalos o altibajos, y que eso es algo normal. No me considero una persona libre de problemas, ni de prejuicios o preconceptos, incluso estoy llena de exigencias a mi misma sin las que probablemente sería más feliz; pero es algo en lo que trabajo día a día y que me ha servido personalmente — el aceptar la imperfección. No todo tiene que ser ideal, ni como uno quisiera, pero eso esta bien y aún así podemos ser felices.

El staff de Animal Dreams

Disfrutar lo que haces es algo que se percibe, algo que se siente. Considero que la gente valora este lugar por ver que se trabaja con mucha pasión y con mucha responsabilidad. Por mi lado, con la sonrisa de los artistas que apoyamos y las personas que nos visitan estoy hecha.

Creo que el sentido de propósito y significado de lo que haces lo encuentras en la relación con las personas que te rodean, en la relación que tienes con tu trabajo y en cómo te conectas con algo más grande que vos. Pienso que si no es ahí, es cerca donde se encuentra la felicidad.

¿Respondí correctamente? <muchas risas>.

¿Tu familia y tus amigos te apoyan en lo que haces? Demasiado. Mi papá ha sido un muy buen consejero en la lógica, me ayuda a pensar las cosas lógicamente, me baja a la realidad. Mi mamá me ayuda mucho con el lado espiritual, me muestra y abre puertas a un montón de cosas. Es una persona muy sabia y a la vez muy alocada y muy jovial — yo la veo y pienso “qué energía tiene esta mujer, quiero tener esa misma energía”, mi mamá es de otro mundo…

Considero que una de las principales cosas que ambos me dieron es haberme enseñado a tener tacto con las personas, la empatía — el que realmente me importen los demás.

Por otro lado, mi hermano es un artista muy inquieto con quien siempre nos hemos apoyado en todo lo que hacemos.

No hay mejor momento para disfrutar plenamente, el único momento es este.

¿Qué consejo darías a quien pasa por una situación similar a la que te encontrabas antes de crear Animal Dreams? Cada persona tiene mucho potencial que no utiliza, a veces usamos mucho la cabeza, pensamos de más y evitamos la acción. Yo creo que hay que comenzar a hacer… Antes de crear Animal Dreams solía decirme cosas como “no puedo hacerlo” o “no es el momento” — fue cuando cambié el mensaje y comencé a decirme “bueno, hagámoslo y veamos qué pasa” cuando ocurrieron las cosas.

Muchas veces buscamos la perfección, y si no esta todo impecable no hacemos las cosas. Creo que cuando hacemos esto, en realidad estamos racionalizando los temores que son normales cuando queres hacer cosas grandes — pienso que debemos arriesgarnos y ver qué pasa, si no funciona, siempre podremos volver e intentarlo de nuevo estando mejor preparados.

Es fácil preocuparnos por lo que no somos, en lugar de ver nuestras cualidades y valorar lo que hemos logrado. No debemos esperar a tener las condiciones ideales para hacer lo que nos apasiona. No hay mejor momento para disfrutar plenamente, el único momento es este.

FIN

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Noel Wolf
Detour talks

Diseñador e instigador en creatividad. Ayudo a creativos a comprometerse con su vocación y desarrollar la mentalidad, hábitos y habilidades clave para despegar.